Friday, March 31, 2006

ENCUENTRO EN LA RED

Se conocieron a través de internet.
El le regalaba palabras hermosas, la trataba con dulzura infinita.
Ambos contaban las horas que los separaban del próximo chat.
Intercambiaron fotos y teléfonos.
Ambos se estremecían al escuchar sus voces.
Después de unos días programaron un encuentro en la playa.
Esa mañana Eugenia sacó su pasaje, solo unas horas la separaban de ese ser mágico.
Desde la ventanilla del avión observaba las nubes que le devolvían la imagen de su enamorado. En el aeropuerto se confundieron en un abrazo interminable.
Parecían hechos para caminar juntos y para siempre por la vida.
Los primeros días fueron los que soñaba cualquier mujer, noches ardientes, otras de paz y sosiego.
Silencios que arrullaban un amor único, largas charlas que no conocían de espacios ni tiempos. Miradas que suplantaban las palabras.
Salieron a caminar, la luz plateada de la luna iluminaba el paseo.
El mar golpeaba bravío en las rocas, allí él se mostró como era, hosco, malhumorado,autoritario. Las palabras dulces habían desaparecido, para dar lugar a falsos reclamos.Se diluyeron los besos, tampoco sentirían el calor de un abrazo.Solo lágrimas.
Confundida Eugenia, deseó empujarlo a las aguas y ver el cuerpo de Esteban flotando con sus brazos en cruz.
Solo atinó a correr, quería separarse para siempre de ese sueño.
Era tiempo de regresar a la más absoluta soledad.

RECUERDOS

Laura y Javier festejaban sus bodas de oro.
Sus hijos quisieron regalarles un viaje especial.
No deberían llevar equipaje, todo sería provisto en el camino.
Se introdujeron en un túnel.
Luego de unos minutos, estaban en un lugar que no les era ajeno.
De pronto sus ropas cambiaron, ella estaba vestida con un largo vestido decolor blanco, en sus manos llevaba flores, las mismas que jugaban en sus cabellos.
Javier vestía un traje negro.
Todo era asombro.
Subieron a un carruaje que los condujo a una pequeña iglesia, ornamentada con arreglos florales.
En el altar los esperaba el sacerdote.
Luego de la misa intercambiaron anillos y promesas de amor eterno.
Caminaron por senderos poblados de flores, hasta podían sentir su exquisita fragancia.
Los pájaros les regalaban la más bella melodía.
Se fueron a una cabaña cerca de un lago, en ese lugar de ensueño proyectaron su vida.
Sabían que pronto estarían rodeados de niños, sus hijos.
También adivinaban la llegada de los nietos.
El tiempo expiraba.
Debían regresar.
En sus retinas quedaría para siempre el recuerdo de su casamiento.

Thursday, March 30, 2006

LA ESTATUA


¿Qué puedo decir de ella?.
Era la belleza en el cuerpo de una mujer.
Ojos profundos que llevaban a sumergise en la imensidad del océano.
Su cuerpo tallado de diosa pagana.
Su boca de rubí, que no conocía el sabor de un beso.
Sus cabellos, marco perfecto para su cara despojada de expresiones.
El la había construído a su imagen y semejanza.
Vestida con una túnica que dejaba ver sus formas.
Piernas larguísimas que mostraban sus pies descalzos.
Sus manos finas parecían de porcelana.
Nunca conocería el calor de una caricia, el abrigo de un abrazo interminable.
Vuelo a mirarla, creo adivinar una sonrisa en su boca gélida, deseando ser el destinatrio de ella. Otra vez me detengo en sus ojos que miran sin ver buscando un gesto.
Nada.
Al bajar la vista veo que en su pecho no late su corazón.
En ese momento advierto que es solo una estatua vacía de sentimientos.
Me alejo turbado, su imagen me acompaña.
La deseo.
Una brisa suave me trae una voz que me invita a seguir soñando.

Monday, March 27, 2006

SUS OJOS

Sus ojos negros como el azabache tienen un dejo de nostalgia.
Ha recorrido muchos caminos.
Está cansado y se queda dormido a un costado del mercado.
Sueña con ella, con los días que se han ido.
Por un momento la toma en sus brazos para darle cariño.
Juntos caminan por la arena, no hay flores para regalarle solo sequía.
Escucha su voz en la lejanía, hasta puede adivinar los hoyuelos de su cara cuando sonreía.
Le cuenta de paisajes lejanos, de cantos y dichas, de lunas y soles quefueron su asidua compañía.
Ella lo escucha con atención obsequiándole el arrullo de su mirada enamorada.
Un ruido lo despierta, son los puesteros del mercado que recogen sus cosas.
Mira a su alrededor buscándola .
Está solo, se incorpora, acomodándose el turbante solo piensa en ella, eleva su mirada al cielo rogando se la devuelva.

VENDEDOR DE ILUSIONES

Con su turbante paseaba por el mercado de un pueblito de Turquía.
Contaba que en el llevaba recuerdos de su estadía en diferentes palacios del mundo.
A veces decía que en su interior tenía piedras preciosas que le habían regalado diferentes monarcas, otras que llevaba telas multicolores bordadas con hilos de oro.
Era un personaje curioso y Zahira lo escuchaba con antención.
Ella hubiera querido comprar una estrella parecida a la del turbante de este señor de barba blanca, para que iluminara sus noches vacías.
También le habría gustado comprar alguna tela para confeccionar un hermoso vestido y conquistar a un caballero de ojos color azabache.
Con el acorde de las cítaras, Zahira danzaba en sueños.
Por un momento se sentía la reina del corazón de quien amaba en silencio.
Podía sentir el calor de sus brazos que rodeaban su cintura, y al final de esa danza el sabor dulce de sus besos.
Lo que el vendedor nunca dijo, es que su turbante estaba vacío, ya que el vendía ilusiones y leyendas que no se compran con ninguna moneda.

EL HOMBRE DE LA FOTO

Cada surco de su cara demostraba sabiduría.
El sol había sido su compañero de viaje durante años.
Su barba parecía adornada con hilos de plata que utilizaba para enhebrar cada una de sus historias.
A veces contaba de viajes por el desierto, la arena tenía las marcas de sus pisadas.
Otras hablaba de sus visitas a países exóticos, de su gente.
De tantos lugares que había recorrido, con frío o calor, con sol o iluminado por la luz de la luna guardaba una leyenda.
Decidió quedarse en ese pueblito pequeño, donde las mujeres sobresalían por su hermosura, sus cuerpos parecían juncos que no habían madurado hasta tornarse dorados.
Posó sus vista en ella, lo cautivaron sus ojos color almendra que prodigaban ternura.
Utilizaban el idioma de las miradas y gestos, hasta que un día ella le regaló el rubí de su boca, estaba feliz.
Como ofrenda de su amor le regaló su turbante y sus fantasías.
Volvió a partir.
Otras tierras esperaban su vida andariega, al llevarse sus manos a la cabeza solo la acariciaba a ella.

UNA MODELO

Se preparó como nunca antes lo había hecho.
Eligió ese trajecito color azul que hacía juego con sus ojos, sujetó sus rizados cabellos con una cinta.
Calzó su altos tacos y salió acompañada de un perfume suave para acrecentar el misterio.
Salió a la calle en busca de un taxi, consultó su reloj y decidió caminar.
Pocas cuadras la separaban del estudio de quien dejaría en el óleo su imagen para siempre. Llegó a una casa antigua pero bella, un sendero de flores la condujo a la puerta de entrada.
Allí estaba el.
En el interior se despojó de sus ropas y desnudó su alma que se reflejaría en ese cuadro.
En penumbras el adivinó sus formas, escuchó los latidos de su corazón.
Se preguntaba si podría reflejar en la tela tanta belleza.
La luz tenue jugaba a entrar por una ventana, se veía aun más hermosa.
El pintor la quiso solo para el.
Cuenta la leyenda que la vieron entrar en la casa del artista, nunca salió.
En el museo es el cuadro más visitado.
Muy cerca su autor lo admira con los ojos inundados de lágrimas.

Friday, March 24, 2006

LA ESPERA


Quería una versión del tema “Las hojas muertas” orquestada, de esa forma a los compases podría agregarle mis vivencias.
Lo había visto caminar por la playa, el viento jugaba con su pelo, su color bronceado lo hacía más interesante.
Pude acercarme y conversar, me hundí en el azul profundo de sus ojos, me atrapó con su mirada y una lluvia de palabras.
Quedamos en encontrarnos al día siguiente, el sol acariciaba las olas que danzaban lentamente, mientras observaba el mar esperaba su llegada.
Los latidos de mi corazón se acrecentaban a medida que adivinaba la hora del encuentro.
La playa estaba solitaria, a lo lejos comenzaban a reunirse varias personas, la curiosidad me instó a acercarme.
Con un dolor que laceraba el alma ví su figura tendida en la arena, con esa imagen se fue parte de mi vida, se borraron mis sueños, de a uno se esfumaban mis proyectos.
Hoy el recuerdo me lleva a caminar otra vez por esa playa, mientras el viento me trae los acordes de la canción que no pudo ser.

BAUTISMOS MULTIPLES

El monasterio de Luján, hoy se veía diferente.
No era un claustro despojado.
Los altares estaban cubiertos de finos manteles blancos, sobre ellos descansaban las imágenes que el pueblo veneraba rodeadas de flores que regalaban la magia de su fragancia.
Para ésta ocasión se permitieron flores de diversos colores, se asemejaba a un jardín salido de un cuento.
De sus cóncavos techos pendían banderas de todas las comunidades.
En un costado ubicaron al coro, mientras ensayaban sus cánticos, en la inmensidad del lugar se escuchaba el susurro de los ángeles, en las voces de esos niños.
El padre Francisco, apoyado en su bastón, caminaba por el lugar supervisando que todo saliera perfecto.
Consultó su reloj de bolsillo y presuroso llamó a una de las colaboradoras del lugar.
En los bancos cercanos a la vieja puerta de entrada aun faltaba colocar los moños y arreglos florales armados con las que se cortaron del parque que circundaba y daba color al austero edificio.
Los acordes del órgano podían oírse desde afuera, esa música celestial, alegraba los corazones y hacía brotar alguna lágrima.
Llegó el momento.
Hoy al antiguo monasterio vestido de fiesta,entraría gente de todas las edades para recibir las aguas baustimales.

Tuesday, March 21, 2006

EL FIN DEL VERDUGO

Una vez más había cumplido con su trabajo, pudo despedirla con un beso tardío.
Sus pasos cansados no tenían rumbo.
A cada momento se preguntaba, porque había si elegido para decapitarla, no encontraba respuestas.
Aun se escuchaban los gritos en la plaza, la misma gente que años antes tomó La Bastilla, a punta de lanza y fuego, consiguiendo de esa forma la libertad, hoy cantaba la temprana muerte de sus reina.
El con las manos manchadas de sangre no podía seguir su camino, su corazón estaba oprimido, sus ojos secos ya no podían llorarla.
Esa mujer que era el eje de su vida ya no estaba, nada tendría sentido.
Recordaba sus ojos tan azules como el mar, su cuerpo delgado, embellecido con costosos vestidos, su cara igual a las rosas blancas que crecían en primavera.
No podía resistir su ausencia.Esperó la noche, regresó a la plaza, la guillotina esperaba erguida como un fantasma, puso su cabeza en el cepo y dejó caer su filosa hoja.
La muerte con su magia los uniría para siempre.

Saturday, March 18, 2006

EL VERDUGO

Se vistió con sus viejas ropas negras, debajo del brazo llevaba la capucha que cubriría su cabeza.
Caminó hasta la plaza, poblada de gente que esperaba, pero no para aplaudir a su reina.
Cada paso que daba le traía un recuerdo.Desde que la vió por primera vez se enamoró de ella, escondido detrás de las rejas la observaba.
Vestida de azul cielo, con un corset que marcaba su fina figura, danzaba en brazos de otro hombre.
Por un momento deseó convertirse en el collar que adornaba su blanco cuello para sentirla cerca.
También hubiera querido ser el alcohol que ella con gracia llevaba a su boca y meterse en sus entrañas.
Nada eso pasaría, en la madrugada ella cambiaría sus ropas costosas por una sencilla bata que no opacaba su grácil belleza.
La vió caminar altiva por última vez.
En un instante más caería la filosa hoja de la guillotina.
Su cabeza rodaría por el suelo, la levantó,selló su boca con un beso apasionado y escondió sus lágrimas en esos cabellos de oro.

Friday, March 17, 2006

DEBILIDAD DE UN MONARCA

No era agradable a la vista su presencia, la librea que conformaba su vestimenta lo hacía aparecer aun más pequeño.
Conoció a María de Austria, una joven tan bonita como egoísta.
Estaba seguro de moldear su carácter a su imagen y semejanza.Antes de ser reina de Francia, ella reinaba en su corazón.
Le dedicó su vida, cumplió cada uno de sus caprichos, no se imaginaba la vida sin ella.
Luego del nacimiento de su primera hija, le regaló un castillo.
No le importaban las infidelidades a las que ella estaba acostumbrada.
La llenó de joyas, vestidos fastuosos para que los luciera en infinitas fiestas en las que el estaba ausente, sabiendo que la perdía un poco más.
No ignoraba que María pasaba sus noches desvelada con la compañía de sus amantes y el alcohol.
Por ella descuidó a sus súbditos que poco a poco se revelaban.
No le importó que lo esperara la hoja filosa de la guillotina.
Cuando por el suelo rodó su cabeza, muchos advirtieron que en sus ojos sin vida había lágrimas.

PERFUME DE MUJER

Hija de reyes, fue criada con todos los lujos .
Desde niña se mostró caprichosa, alejada del protocolo que debía aprender una futura reina.Se casó en la adolescencia, no alcanzó para dejar atrás su rebeldía.
Era de talla pequeña, su mirada demostraba que no le importada nada que no fuera ella.
Interpelaba a sus doncellas con desdén, se fue del palacio de Versalles, al de Trianon.
Sola ,podía llevar una vida aun más disipada, preparó su primer viaje a Paris, compró vestido lujosos, con bordados y piedras para destacarse del resto.
Se sentía una reina cuando estaba vestida con los exclusivos modelos de la época, su cuello de cisne lo adornaba con joyas.
Las fiestas se sucedían en forma continua.
A su alcoba del palacio llevó a sus amantes, se acercaba a ellos en medio de las magníficas fiestas, bebió la vida con prisa, nada la detenía, era la reina de Francia.
Ese día cambió su vestuario, un hábito gris austero.
Su dorado cabello brillaba al sol.
Cuenta el verdugo que cuando rodó su cabeza, en el aire flotaba un exquisito perfume.


* Maria Antonieta reina de Francia murió decapitada el 16-10-1793

Thursday, March 16, 2006

FIN DE UN REINO

Dentro del palacio Luís XVI juega nervioso con los puños de su camisa inmaculadamente blanca.
Maria Antonieta apura a las doncellas con el equipaje, no debe olvidar nada, su ropa, sus joyas, su diario íntimo, donde escribió casi toda su vida.
Tenía que esconderlo, nadie debería enterarse, de su amor por ese hombre de tez morena con quien había compartido sus noches de amor y fuego.
Todo es quietud y silencio, solo la acompañan sus pensamientos,¿ volvería a verlo?.
Le resultaba difícil imaginar su vida sin el, lejos de las paredes palaciegas que arrullaron sus sensaciones.
Afuera en los jardines de Las Tullerías, la gente se aprestaba a vivir una jornada diferente, atrás quedarían los grilletes que ataban a los esclavos a una vida parecida al infierno.
Las banderas tricolores flameaban cual pájaros.
Anochecía, del cielo brillantes pendían las estrellas, la luna plateada iluminaba a todos los que buscaban la libertad, el renacimiento de la humanidad, comenzaba a gestarse la paz.
Principio del destierro de un rey sin reino.

Saturday, March 11, 2006

VISITA GUIADA

Ganamos aquel concurso, por fin habíamos llegado a Hollywood.
La primera visita guiada, sería a un estudio de cine.
Alucinante, fue como regresar en el tiempo.
Entramos a los talleres, donde aún se guardan los vestidos y trajes de los más famosos artistas.
Cambiamos nuestras ropas informales y probé varios vestidos.
Elegí uno color esmeralda sin breteles, bien ajustado, al que acompañé con un pequeño sombrero de plumas con un tul que llegaba por debajo de los ojos, quería agregar misterio a ese momento.
Martín optó por un traje de color gris, con pequeños bastones de color blanco,estaba más hermoso que nunca, así lo veían mis ojos de mujer enamorada.
Nos dispusimos a cumplir nuestro sueño, viajar en el tiempo, igual a esa película que veíamos en los videos.
Me regaló un rosa y un beso, allí supe que nuestro amor sería eterno y capaz de viajar a través de la memoria acompañados por el brillo de nuestras miradas.

Saturday, March 04, 2006

VISITA AL MUSEO

Heber y Sofía visitaron el museo náutico.
Se detuvieron en una goleta y mágicamente encontraron, catalejos y disfraces.
Heber se vistió de pirata, con un gran pañuelo que sujetaba sus desordenados cabellos.
Sofia eligió un vestido y entre sus trenzas color de oro, intercaló flores multicolores, cerraron sus ojos y viajaron a la isla del tesoro encantado.
Allí había duendes que los condujeron por paisajes inigualables, flores que regalaban su perfume, pájaros que con sus trinos endulzaron aun más sus oídos de niños.
Debajo del tesoro, compuesto por piedras preciosas y monedas de oro había un papel ajado que leyeron con atención y decía "Niños cuando terminen las clases los esperamos en esta isla para cumplir sus más caros anhelos".
Presurosos salieron del museo, el lunes tendrían una historia nueva para compartir con todos sus compañeros, quienes en unos meses los acompañarían a vivir más aventuras en la Isla del Encanto.

UN SUEÑO

Soñaba, había embarcado en un viejo galeón, ese que enarbolaba una bandera roja con una calavera negra en el medio que asustaba.
Los hombres llamaban la atención por su vestimenta de color negro, solo a veces un pañuelo de color sujetando sus cabellos.
Ellas sencillas, una pollera con vuelo y puntillas y una blusa escotada.
El viaje fue primero sobre el mar azul, que más adelante se convirtió en el mismo verde de las esmeraldas que ellos buscaban.
Luego de unas horas, se divisaba una isla, con altas palmeras, que al compás de la brisa danzaban.
A medida que se internaban en búsqueda del tesoro, el follaje se hacía intenso, el canto de los pájaros acompañaba la caminata, rodeados de flores, orquídeas que pendían de los árboles en colores tan pálidos como bellos.La luz indicaba que caía el crepúsculo, tiñendo todo de naranja y violeta.
Una ola inquieta rozó con picardía mis piernas, por primera vez me había quedado dormida, abrazada al sol en la playa.

Friday, March 03, 2006

NAUFRAGIO

Eric, como capitán del barco pirata, lo abandonó a último momento.
El mar encrespado lo había mandado a las profundidades del océano, con su carga de, perlas y esmeraldas.
Prímula lloraba en la costa.
El espectáculo era dantesco, esa mole que habíanavegado todos los mares, hoy se sumergía para siempre.
Eric, era fuerte, de cuerpo y más de espíritu, sin temor se arrojó a las aguas inquietas.
Quería demostrar que el amor es el más poderoso de los sentimientos.
A esta altura nada le importaba.Luchando con la fuerza indómita de las aguas, se zambulló en ellas.
Llegó hasta el fondo, extasiado por el espectáculo que le brindaba la naturaleza.
Rutas de corales, tesoros escondidos en las profundidades.
Con pocas fuerzas y cuando la oscuridad y el silencio, lo estremecían, encontró el cofre que buscaba, de allí sacó un collar de esmeraldas para su amada y un rosario de rubíes para su madre.

Wednesday, March 01, 2006

UN VIAJE SINGULAR

Este viaje en globo sería especial.
El punto de reunión sería el viejo aeródromo del pintoresco pueblito deAguas Blancas.
¿Alcanzarían los globos?
El día diáfano invitaba a la aventura, mucho sol, una brisa suave que nos ayudaría a elevarnos.
El paisaje de casas bajas, con sus techos rojos, sus jardines poblados de flores era el mejor marco para lo que en minutos sobrevendría.
Caminamos varias cuadras hasta que por fin los vimos, sus colores eran intensos, parecidos al arco iris después de la lluvia que bendecía los campos de color dorado.
Nos dispusimos a dejar la carga en los canastos que para la ocasión, estaban adornados con flores de mil colores.
Esta vez, no subiríamos nosotros, si viajaría un pedacito de nuestras almas, el viento trasladaría nuestros suspiros, quizás una lágrima, esas que trae el amor, las emociones, en cada uno de los canastos, para fundirse con el universo, en los globos de la foto, viajarían nuestros cuentos.


Dedicado a todos mis compañeros de foro con mucho cariño

Agustina