Friday, June 25, 2010

EL LEGADO*




Hace mucho que no escribo, cambié las letras por pinceles, no me insume demasiado esfuerzo.

Puedo pintar aún cuando la opacidad se adueñe de mis ojos.

Conozco de memoria los colores, no alcanzo a percibirlos en su total dimensión.

Jamás pensé llegar a esta edad.

Recuerdo mi primer trabajo como profesor de física, nada tenía que ver con las artes que tanto amé.

Amor devotísimo, casi igual al que le profesé a mi amada Matilde.

Con ella enfrentamos el mundo de los desiguales.

Plantamos una ramita de glicinas robadas a un jardín ajeno.

Siento la fragancia de cada racimo, el lila de las flores se torna en gris, idéntico a las nubes que van cubriendo mis ojos.

Hace tiempo me asomé a la ventana, mis nietos jugaban en el jardín, los gritos no permitían me concentrara, estaba escribiendo sobre aquellos héroes que mueren en las tumbas arropados por las tinieblas.

Les pregunté a qué se debía tanta algarabía, el por qué de las voces en alto, la respuesta rápida de los entonces niños me llevaron a la realidad.

Con inocencia me preguntaron “Abuelo y vos por qué estás gritando para advertirnos de nuestra falta”.

Ese día reconocí que ellos tenían todas las libertades, bien que me fue negado cuando intentaron ponerme una mordaza.

Supe de silencios y penumbras no buscados.

Dejé que mis nietos rieran con fuerza hasta que sus risas le dieran sonoridad al cielo.

Mi compañera de toda la vida comenzaba a tener los primeros dolores de su enfermedad.

Mudé mi estudio cerca de su cuarto para atenderla.

Reconocí que era torpe para sostener a un enfermo por el que había dado todos los sentimientos, esos que nacen en el hombre cuando el amor se aloja en su alma.

No podía solo, la tristeza me aniquilaba.

Las caricias murieron en mis manos yertas cuando ella decidió subir los peldaños de la escalera que lleva al cielo.

Han pasado muchos años, la recuerdo, la sigo amando como aquel día en que plantamos en nuestro jardín las primeras flores.

La amé más que nunca cuando nacieron nuestros hijos, lloramos juntos la pérdida de uno.

Creí que la vida estaba preparada para que ellos nos despidieran, no fue así, hoy me resisto a aceptar que he perdido un hijo que era mi apoyo.

No soy un integrante de la tercera edad, asumo que la vejez se ha apoderado de mi cuerpo.

Tengo la mirada apagada, lo único que conservo joven es el amor a los míos y a la libertad de los otros.

Estoy llegando al fin de mi vida, así titulé mi último libro “Antes del fin”, titulo ampuloso si los hay, es mi legado a las generaciones futuras y a los muchos seguidores que he conseguido a fuerza de esgrimir la verdad.

No quiero vanidades en mi funeral, mi familia sabe que debe convertir mi cuerpo en cenizas.

A vos que me diste tantas satisfacciones, solo te pido que me recuerdes con el mismo cariño con el que supiste aceptar mi obra.

El universo propiciará el encuentro, la eternidad, será mi nueva cuna.

Antes de irme quisiera que sepan que aún sin conocerlos los he amado y por sobre todas los cosas los respeto.




*Un pequeño homenaje a Don Ernesto Sábato que ayer cumplió noventa y nueve años.

NOCHES DE ARRABAL




Egresada del Teatro Colón, no tuvo suerte como bailarina clásica, no quería regresar a su pueblo, sitio que se había quedado en el tiempo donde nadie tenía posibilidades de crecer dignamente.

Los ahorros se esfumaban, debía buscar un trabajo para sostenerse.

Julián se presentó en su vida como una brisa fresca, atractivo, decía ser representante de artistas, era lo que ella necesitaba, la danza era lo más importante de su vida.

Al conocerlo una lucecita de esperanza se encendió, soñaba estar en el escenario con un vestido etéreo, las zapatillas de punta, el cabello sostenido en la nuca por una coronita de flores, con suaves movimientos entregarse a la música, parecerse a un pájaro cuando sus piernas se elevaban, recibir los aplausos, agradecerlos sonriente sosteniendo un ramo de rosas, talento y gracia le sobraban.

No tardó en compartir sus días con Julián, el tiempo transformó los sueños en utopías.

Su pareja le pedía paciencia, la relación se desgastaba con la misma rapidez que el poco dinero que aportaba.

Necesitaba trabajar para evitar las peleas, amaba a Julián con sus virtudes y defectos.

Asistió a una prueba, el aviso engañoso buscaba bailarinas de primer nivel, el sueldo cumplía con sus expectativas.

Esa noche se produciría el debut, unas horas antes un taxi pasó a buscarla.

A medida que el auto recorría las calles sentía que el corazón se enrejaba atándose a un futuro incierto.

Calles de adoquines dibujaban círculos, parecía que no llevaban a ninguna parte.

El local estaba pintado con colores fuertes, contenía las lágrimas que sepultarían las ilusiones.

El camarín compartido con otra bailarina quien rió sarcásticamente al verla.

No encajaba en ese sitio tan burdo, pese a todo decidió seguir.

Una mueca se dibujó en su rostro cuando observó el vestuario, pollera corta de raso negro con un tajo al costado que mostraba sus largas piernas cubiertas con medias de red, chaleco rojo, un tocado de plumas en la cabeza.

Se sentía ridícula con tanto maquillaje, sombra y delineador negros resaltaban la tristeza de sus ojos, la boca agresivamente roja, altísimos tacos completaban el atuendo.

Al salir a bailar recordaba las palabras de su madre, siempre le decía que la necesidad tenía cara de hereje, sentía cada palabra en su carne.

Mateo sería su compañero de baile, se dejó llevar, los aplausos coronaron la actuación.

Las noches se sucedían sin grandes novedades, Julián la esperaba en la pieza compartida, preso del alcohol, ya no tenía ánimo de iniciar discusión alguna.

La monotonía se adueñó del amor de la pareja.

Una función más terminaba, no podía disimular la atracción que sentía por su compañero de baile.

Noche de lluvia.

Necesitaba caminar para aclarar sus sentimientos.

Los relámpagos cruzaban como saetas el cielo oscuro.

El brillo de los facones se confundía con aquellos.

Dos hombres peleaban por su amor.

En las paredes descascaradas del conventillo perduran las manchas de sangre de una noche de arrabal.


http://www.youtube.com/watch?v=TkAoLBAEgSA&feature=related

Thursday, June 24, 2010

EL GUARDAESPALDAS




Fue criada en los mejores colegios, tenía la vida que cualquier adolescente puede soñar.
El padre empresario exitoso le daba todos los gustos, la madre vivía en un mundo de fantasías al que pocos accedían, un ejército de empleadas cuidaba a la niña quien veía a su mamá cuando regresaba del gimnasio o de reuniones sociales.
Sobraba lo material mientras el cariño estaba ausente de ausencias.
Ella crecía, bella, armoniosa, el cuerpo parecido a los juncos cimbreantes que se encuentran en las lagunas.
Espigas doradas por el sol eran las hebras de su cabellera, marco perfecto para esos ojos azules, tan parecidos al océano que cualquier mortal hubiera querido sumergirse en ellos.
Aún no había conocido el amor, le daba importancia a los estudios.
Una tarde llegó a la mansión, le extrañó que la música fuerte proviniera del escritorio, sabía que esa tarde no habría empleados en la residencia.
No dio importancia al detalle.
Rápidamente subió las escaleras.
Un escalofrío recorrió el cuerpo de la muchacha, tirado en su cama el guardaespaldas de su progenitor la esperaba.
Intentó escapar, no pudo, un brazo fuerte inmovilizó su cuello.
Manos sucias recorrían la geografía de su figura, besos con sabor a alcohol se depositaban en los labios tiernos.
Fue abusada brutalmente, sabía que el agresor tenía las marcas de sus uñas en la espalda.
No sabe cuántos minutos estuvo debajo del agua, no alcanzaba para limpiar la degradación de la que había sido objeto.
Vanas fueron las conversaciones con los seres que le habían dado la vida.
En lugar de contenerla, la condenaron.
El día que les dio la noticia del embarazo fue el peor de su vida.
El papá eligió el camino más corto, su hija no podía, aún siendo inocente mancillar el honor de la familia.
Abortar el pecado no cometido sería el camino más corto.
En secreto contrataron a varios médicos y enfermeras abonado fabulosas sumas de dinero, una de las habitaciones sería convertida en quirófano.
Ella era inocente, jamás se prestaría a semejante vileza.
Huyó en el medio de un festejo.
Nadie sabría de ella, la vida que crecía en su vientre no merecía vivir una vida no elegida.
Lejos de todos a los que solo les importan la imagen que dan hacia fuera, tuvo a su niño, esta madre coraje lo cría en soledad absoluta.
Trabaja para sostener a ese bebé idéntico a ella.
Juntos, sin importar las circunstancias están edificando otra etapa de sus vidas.
Matías cumple tres años, será el encargado de llevar las alianzas que utilizarán su mamá y quien lo adoptara sin preguntar su origen.
El futuro será el encargado de develar la verdad, hay tiempo.
Tiempo para soñar que pese a la adversidad, se puede.


http://www.youtube.com/watch?v=xStuakbGxl8

MISIONERAS DE CARIDAD




Hace años decidió consagrar su vida a los demás, aprovechó sus estudios de médica para viajar a las misiones que estaban lejos de su patria.

Al principio sus padres rechazaban la idea, tenían esperanzas que su única hija trabajara en la clínica que habían heredado de la familia.

Los tranquilizó diciéndoles que una vez por año volvería a visitarlos o bien podrían viajar ellos.

Desde la ventana observa el árbol casi desnudo, en el tronco se nota el paso de los años, en otros canteros un jazmín tardío permanece indemne, busca una tijera para cortarlo.

El hogar a leña abriga el ambiente, crepitan las leñas, las chispas rojas le traen recuerdos.

Un papel transparente protegerá al jazmín, a partir de ahora descansará entre las hojas de su libro preferido.

Con ayuda de su madre prepara la maleta, no necesitará demasiadas cosas, adonde va el tiempo es cálido.

En el llavero colocará una foto de sus progenitores imagen que la acompañará en los momentos que la soledad intente tomarla como prisionera.

Un block de hojas, la lapicera que recibiera al obtener su título, un espejo en el neceser donde dispuso los artículos de tocador.

Descarta el cenicero, no lo necesita, prometió dejar el cigarrillo, llevarlo sería una tentación.

No quiere que sus padres la acompañen al aeropuerto, sabe que para ellos la despedida es una prueba difícil de sortear.

Temprano llega a destino, la hermana de caridad la recibe con cariño, la dulzura se ha quedado a vivir en esos ojos negros que la miran con afecto.

La vieja camioneta las llevará a las puertas de la selva, allí se levanta el hogar de niños cuyos padres han sido víctimas de la guerra.

En el frente del pulcro hospital, orgullosa flamea la bandera.

Compartirá la habitación con otra misionera.

Hoy conocerá a los niños, los caramelos serán el vehículo para que los chiquitos tomen confianza, algunos están con bajo peso, la tarea será ardua, también deberá enseñar a las madres el cuidado que tienen que tener con el agua, los consejos básicos son bien recibidos.

En el patio una canilla gotea sobre lo que queda de una rejilla, les dirá que también deben cuidar ese escaso recurso.

Ha pasado un año desde su llegada, recibe la vista de sus padres, la ven tan contenta dando y recibiendo amor de los que menos tienen que deciden regresar a Buenos Aires, vender todas las propiedades que han quedado e instalarse para siempre en el lugar elegido por su hija.


http://www.youtube.com/watch?v=BXzcJ0cYpgY&feature=related

Friday, June 18, 2010

EL ARCHIVO




La biblioteca de la ciudad es un edificio que aún conserva cierto esplendor pese a la falta de mantenimiento.

Es habitual observar como caen cual hojas otoñales láminas de pintura.

Del color amarillo que contrastaba con el verde de los cuidados jardines, solo quedan algunos vestigios.

Nadie lustra la puerta de hoja doble que culmina con lo que alguna vez fuera un brillante y colorido vitreaux.

El tiempo ha dejado su marca en la añosa madera.

Matilde llega puntualmente a su trabajo, viste el uniforme conformado por un trajecito gris, camisa blanca y pañuelo anudado al cuello para levantar el color de la vestimenta.

Calzado de taco bajo para no quebrar el silencio que debe haber en el interior del edificio.

Respetuosa de su trabajo y de los individuos que acuden al salón en búsqueda de un libro.

Luisa es una mujer con pocos escrúpulos, atrevida para vestirse, los tacos aguja golpean sobre los pisos distrayendo a los lectores.

Pese a la poca antigüedad y valiéndose de algunos artilugios secretos ha logrado el puesto de directora de la institución.

Pasa la mayor parte del día en su escritorio, sin darle demasiada importancia a los problemas edilicios que necesitan ser reparados.

Logra el traslado de Matilde al archivo, ignorando que le hace un favor, pese a que debe trabajar en el subsuelo sin poder ver la luz del sol por varias horas, en ese sitio se encuentras varias estanterías que atesoran libros de siglos pasados.

Bienes que cuida como si fueran sus propios hijos, conocedora de su tarea sabe que son ediciones que no se pueden encontrar en otras bibliotecas.

Textos encuadernados en cuero, las letras doradas casi se adivinan, algunos son valiosos manuscritos volcados en finas hojas de papel que a mutado al amarillo que otorga el tiempo.

Matilde reporta a su superior que ha descubierto una pérdida de agua proveniente de una canilla que puede dañar los libros.

Luisa ni siquiera le toma el reclamo, le dice que opte por jubilarse o visitar a un oftalmólogo.

Respetuosa dejará pasar unos días para reclamar nuevamente, así lo hará durante unos meses.

Coloca servilletas de papel entre las hojas intentando quitar la humedad.

Las letras de muchos escritos están borroneadas.

Esta vez hará la denuncia en la secretaría de cultura de la ciudad.

Los inspectores que acuden al lugar notan que el daño producido en algunos tomos es irreversible.

Matilde se ha jubilado, no obstante sigue con interés el caso de su antiguo lugar de trabajo.

Luisa debe presentarse ante las autoridades, desconoce el episodio, aduce que jamás fue informada.

La declaración es endeble, apurada por las circunstancias insiste en deslindar responsabilidades, antes de quedar detenida por incumplimiento de sus funciones y daño a bienes públicos, grita al juez: No sé que pasó, Matilde era tan meticulosa que sólo a una imprevisibilidad cósmica culpó de su error”.

N




Como un equilibrista va sorteando obstáculos, esquiva autos, treinta segundos dura el rojo del semáforo, debe aprovecharlos para vender su mercancía.
Algunos automovilistas le sonríen, extienden las manos para entregarle unas monedas, otros levantan el vidrio de las ventanillas para no ver la realidad de un chico de la calle.
No entiende el odio en las miradas de algunos conductores.
Cuando otros chicos van a la escuela, abrigados con sus bufandas y coloridas camperas N, sale con su mochila gastada por el paso del tiempo y la indolencia que no comprende que aún es un niño.
Lleva objetos variados, estampitas para desearles suerte a sus ocasionales clientes, chocolate para endulzar el corazón gélido del desaprensivo.
No sabe de juegos electrónicos sus ojitos asombrados miran la pantalla de costosos televisores que se muestran en las vidrieras.
Cuenta las monedas y los billetes que ha conseguido a fuerza de ser simpático.
La vida le pesa a ese nene, muchos otros están en igual condición.
Pequeños héroes que arriesgan la vida con tal de llevarles algo de dinero a sus mayores.
N tiene madre y hermanos, hace mucho que no los ve, decidió tener por casa la calle huyendo de los golpes sin razón.
Otros son utilizados por aquellos que no tienen escrúpulos obligándolos a la mendicidad.
Las noches son largas, tienen como frazadas un cielo encendido por estrellas que para la mayoría se apagan cuando tardan conciliar el sueño en las noches heladas.
Sonríe pese a su infortunio, él espera de vos y de mí que extendamos las manos, que alcemos nuestras voces para que escuchen quienes deben proteger la niñez desamparada.
No eligió la calle por gusto, a nadie le gusta el frío o el calor cuando la soledad es la única compañera.
Subsiste como puede.
Tampoco optó que lo reconozcan como N.
Es fruto del amor o desamor de una pareja que lo dejó crecer solo.
Espera que alguien se acuerde no solo de él sino de otros tantos que buscan el calor de una caricia, de vos, de mi depende que ese chiquillo con la cara que extraña el sabor de un caramelo pueda tener un hogar que lo abrigue, un beso que lo despida antes del sueño.
N tiene esperanzas, quiera el destino pueda conservarlas.


http://www.youtube.com/watch?v=p75t5fYBsAw&feature=related

Thursday, June 17, 2010

PÁJAROS NEGROS



Recorrió una exposición de pinturas, se detuvo ante la más grande,conmovía sus sentimientos, soñaba en tiempos lejanos.

Exagerado en su manera de pintar.

Sus percepciones no alcanzaban a ingresar en el mundo de los terrenos.

Pablo a veces le parecía un extraño, si bien estaba acostumbrada descubrir las imágenes en sus trazos confusos para aquellos que miran sin ver.

Se detuvo ante un óleo de su amor platónico.

Pudo descubrir en los trazos fuertes de una mano intimidada por los recuerdos, que anidaba un alma torturada por amores no resueltos.

Girasoles amarillos, colores robados a un sol del estío la sorprendían gratamente.No podía medir el dolor que le causaba ver el autorretrato del artista.

Las venas inyectadas de sangre parecían querer salirse del cuello del pintor para desparramar el líquido rojo que serviría para engalanar otras telas.

Sintió suyos los sentimientos del hombre que ama y no es correspondido.

Viajó en el tiempo para tomar las manos temblorosas del famoso que se había dejado apresar por el alcohol y la locura.

Por un momento se sintió vestida con gasas etéreas, manos frágiles sostenían un sombrilla.

Caminó por los mismos paisajes que antes había recorrido el amor de sus tormentos.

Lo abrazó, le regaló una vida que se extinguía.

En estado de abstracción le pidió que pintara un campo de tulipanes blancos, sabía que ese color era símbolo de paz, conocía todos los azules de sus cuadros.

Ofreció su cuerpo cimbreante como las espigas de trigo.

Nada la detenía.

Entendía que otro amor sería capaz de borrar las huellas que se habían grabado en el alma de un hombre solo.

Lloró desconsoladamente.

Quería que sus lágrimas volvieran a la vida a un hombre que había elegido finalizar la vida dejando pasar al suicidio.

Pájaros negros en sus alas traen pinturas.

Sentimientos encontrados la acosan, amor por unas horas a un grande.

Sugirió no temiera a espacios terrenales, miles de ángeles blancos custodiarán su obra, acordes musicales acompañarán otra vida.

Volátiles las figuras se desvanecen.


http://www.youtube.com/watch?v=KLwx7LZZVfA&feature=related

SUEÑO CIRCULAR




Observa que todos están felices.

Acunan sueños que solo durarán un mes.

Chicos y grandes lucen en sus cabezas vinchas, sombreritos con forma de arlequín, en todos están representados los colores de las banderas de los países participantes.

En ese lugar el frío constante no es impedimento para que los ciudadanos de todas las edades se reúnan en las plazas o sitios cerrados, por un instante todos serán hermanos.

El cielo hoy está celeste como la franja de la bandera de una país al que le hace falta un poco más de compromiso, de esperanza para seguir.

Ríe al escuchar a todos sus compatriotas, en poco tiempo se han convertido en técnicos de selección.

Se pregunta si esos muchachos que el mundo esperar ver ganar, sentirán tanta presión.

Esta vez el cielo se ve poblado de pájaros multicolores, aletean en los paños de las banderas de cada país.

No importa el color, si es blanco y celeste, rojo y amarillo, verde rojo y negro o los que se puedan formar uniendo esos colores.

Dentro de un mes muchos sueños se habrán cumplido, otros deberán esperar un poco más para ser concretados.

Sueña y vibra con todos ellos.

La nieve viste los árboles del bosque de alerces, lentamente se encienden las luces de la ciudad.

En la bahía ya no hay cruceros, solo algunas naves con coloridas guirnaldas buscan su espejo en el mar.

Es hora de pedir un deseo, que la hermandad de los pueblos no sea tan efímera.

Más allá de una gesta deportiva los ciudadanos del mundo desean vivir en absoluta paz para siempre.

No importa quien sea el ganador, la fiesta será completa cuando todo continúe más allá de un sueño circular.




“Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos.”

Martin Luther King

Wednesday, June 16, 2010

TANGO FLAMENCO




Esa noche Marcia estaba invitada a una fiesta especial, era su despedida de España.Por la mañana compró la ropa que usaría para el evento.
Dejó las cajas en la habitación del hotel, se dirigió a la playa, quería mantener el bronceado que había adquirido en esas tierras lejanas, el sol había sido bondadoso obsequiando su calor.

Por la tarde decidió descansar un rato, pidió al conserje la despertara antes del anochecer.

Comenzó a prepararse, el maquillaje destacaría sus ojos, labios rojos idénticos al color del vestido, un profundo escote dejaba descubierta la espalda, el largo de éste casi no dejaba ver las sandalias, finas tiras de cuero sujetaban suavemente las pantorrillas.
Unas gotas de perfume, el arreglo había concluido.

Ansiosa decidió bajar por las escaleras, los volados que formaban la cola de su vestido jugaban como duendes en los escalones.

Su figura era admirada, la armonía de su cuerpo tenía dueño del otro lado del océano, evocarlo le traía mágicos recuerdos, la mirada adquiría un brillo diferente inequívoca señal del amor que sentía.

La noche estaba cálida, una leve brisa jugaba con sus cabellos.
Pocas cuadras la separaban del lugar, mientras caminaba observaba los frentes de las casas, de los balcones pendían macetas con diversas plantas, el verde de los helechos caía como una cascada, los geranios acompañaban con su aroma y color, la luna regalaba destellos de plata.

En la esquina un florista ofrecía su mercancía, compró tres rosas, los pétalos conservaban gotas de rocío, sujetó dos en la cintura y la otra quedó prendida de sus cabellos.

Desde la calle se sentían los acordes de un tango flamenco, el sonido era cautivante.

Las mesas cubiertas con finos manteles blancos, sobre ellos un centro con flores frescas y velas.

La música ejecutada por Paco de Lucía hacía estallar las emociones, el bailador mostraba su destreza, sus manos acompañaban el zapateo en armonía, todo era silencio y admiración.

Terminado el espectáculo brindaron por el regreso de Marcia a su patria.

Ya en el hotel, dejó el vestido sobre la cama, eligió una bata, en su alma había guardado la sensualidad de la música magistralmente ejecutada por un grande.

Lentamente sacó el maquillaje de su cara, luego de una ducha relajante abrazada a su almohada eligió que los acordes de las cuerdas acompañaran el próximo encuentro.

http://www.youtube.com/watch?v=4HagtsfaRz8

Monday, June 14, 2010

MENTIRAS




De a poco los amigos del chat fueron bloqueando su dirección de correo, todas las noches contaba sus encuentros amorosos con mujeres de cualquier edad.

Decía ser el mejor amante, no había una sola fémina que no quisiera caer en sus brazos.

A todas sin excepción las llevaba a lugares costosos, todas querían repetir la experiencia de estar con un verdadero representante del sexo opuesto.

Historias poco creíbles para quien manifestaba estar casado con una modelo, imagen de conocidas marcas en el país y el exterior.

Una mujer sumamente atractiva que no precisaba tener a un simulador en su casa, su belleza le permitía tener a cualquier hombre a sus pies con solo desearlo, la única condición que ponía era preservar su vida privada de la curiosidad de los otros.

Veía poco a su marido, no toleraba la cantidad de horas que pasaba frente a la computadora con el único propósito de captar la atención de algunas muchachas, para después contar sin reparos sus hazañas amorosas.

Lo más triste es quienes compartían con el gran macho la cama, posteriormente eran denigradas entre los ocasionales amigos de la red.

Sofía era joven y hermosa, ganaba fortunas, el amor que le había profesado a su marido se convirtió en desconfianza.

Sin dudarlo, una noche que él había bebido en exceso lo acompañó a la cama, entre caricias y besos logró su objetivo conocer la contraseña que utilizaba su esposo para engañar a chicas y no tan chicas que morían por encontrarse con un hombre de bajos instintos.

A todas vía correo electrónico les ofrecía compartir su fortuna imaginaria, el dinero que entraba a la casa provenía de los desfiles que ella hacía en cualquier parte del mundo.

Juan hacía tiempo que no era un empresario exitoso, la obsesión le hacía perder negocios millonarios, a esta altura no sabía por qué continuaban juntos, antes de abandonarlo el orgullo le daría un escarmiento a su marido.

El dueño de la agencia para la que Sofía trabajaba sería su cómplice, en el momento de pedirle el divorcio no pensaba compartir un centavo con ese hombre que de hombre solo tenía el género.

Ariel era un ser angelado, no se podía determinar su sexo si se tomaba como parámetro la belleza.

El matrimonio se despidió en el aeropuerto, ella viajaba a Dubai para una sesión de fotos, una plaza codiciada y conocida.

Intercambiaron las recomendaciones del caso, sacar al perro a pasear a determinada hora, cuidar que la casa estuviera impecable a su regreso.

Ariel se agregaría a su red de amigos, a los dos días propiciaron un encuentro, para tal fin se vistió de mujer, estaba espléndido enfundado en un vestido de marca, una peluca de cortos cabellos ocultaría su identidad modificada con maquillaje y otros aditamentos.

Juan alquiló una costosa suite en un hotel céntrico, había prometido desde siempre preservar la vida privada de su esposa.

El balde de cristal contenía una botella de champagne, las copas esperaban para brindar por el encuentro.

Antes de llegar al momento esperado, Ariel saca de su carterita brillosa un sobre.

Inmediatamente reconoció la letra.

La esquela decía:


“Mañana contraigo enlace con un jeque árabe, no necesito estar divorciada, no regresaré al país, concretaré mi anhelo de ser madre, mis abogados te visitarán próximamente.Mientras jugabas a ser el macho argentino, acumulé pruebas suficientes, de mi patrimonio no recibirás absolutamente nada.Tenés cuarenta y ocho horas para desalojar el departamento, no podrás llevarte nada, he donado todo, la computadora también”
Sofía

Sunday, June 13, 2010

CELESTE Y BLANCO



El último crucero que visitará la ciudad, está fondeado en la bahía, al atardecer enciende sus coloridas guirnaldas de luces, inmediatamente se reflejan en el espejo de agua por ahora tranquilo.

En pocas horas levará anclas llevará al pasaje a Río de Janeiro, último destino de la costosa travesía.

Una bengala tardía ilumina las nubes queriendo separarlas para descubrir debajo de ese manto oscuro, titilantes estrellas.

Desde el ventanal de la casa observa todo.

Ha aprendido que determinado color en las nubes es preludio de copiosas nevadas.

Durante toda la tarde ha escuchado el estruendo de los fuegos artificiales festejando un triunfo deportivo.

Pequeños copos de nieve se posarán en el techo de la vivienda, mañana si hay sol los chicos confeccionarán los tradicionales muñecos.

Otros vestirán de blanco la desnudez de los árboles.

Las imágenes de la televisión muestran los festejos por el triunfo del seleccionado de fútbol en distintas partes del país.

Repiten las jugadas que consagraron a los ganadores del encuentro jugado horas antes, en otro continente lejano, donde la opulencia se mide día a día en una carrera desigual con la pobreza.

Por primera vez en mucho tiempo observa familias unidas paseando en sus automóviles alrededor de las plazas de las distintas ciudades.

Celeste y blanco se repite, en gorros, banderas, guantes ,ponchos y las tradicionales camisetas.

Ella frunce el ceño, pensando en todos los chicos y grandes que habitan el suelo de la patria, a los que no ha llegado la energía eléctrica a sus humildes casas, los que muchas veces caminan descalzos entre el hielo mezclado con barro.

Puede compartir la sombra de mi alegría, sé que no quiere aguarle la fiesta a ninguno de los que participan en ella, solo intenta que esos otros que sobreviven en su propia tierra, alguna vez dejen de ser los olvidados.

Tienen derechos como todos.

Muchos viven en pueblitos pequeños a los que ni siquiera ha llegado una radio que los mantenga conectados a la realidad cotidiana.

Los festejos serán superfluos si no son compartidos por todos, también por aquellos que no han elegido ser excluídos.


http://www.youtube.com/watch?v=M2bn3gyFUoY

Wednesday, June 09, 2010

OCASO




Los resultados son contundentes, le quedan seis meses de vida, de espera para encontrarse con la mujer vestida de negro que había decido sepultar en el olvido.

Comenzaría a sentir una leve ceguera, todo se convertiría en luces y sombras hasta que llegara el fin.

No quería ni podía compartir con los seres que más amaba tanto dolor, necesitaba estar solo para optar por el mal menor, deseaba ser recordado con como un hombre bueno, honesto.

Elina paseaba con sus hijos aprovechando el receso invernal, vanos fueron los esfuerzos de la familia para compartir el viaje, ello coincidía con las peleas que había propiciado para que la pareja tomara la decisión de tomarse una tregua.

Representaban el amor ideal, lindos por fuera, más bellos por dentro.

Una mentira piadosa no opacaría el final.

Mientras la madre disfrutaba el buen clima del Caribe, él planeaba cada acontecer.

Convocó a Sergio, su mejor amigo, sabía que podía contar con su ayuda, conocía que siempre había estado profundamente enamorado de su mujer, por respeto a la amistad que los unía desde la más tierna infancia, aquel ocultó sus propios sentimientos.

Elina le pidió permiso para pasar unos días más con sus hijos, accedió sin forzar voluntades, hacía tiempo que no disfrutaban de a dos por imperio de la enfermedad que lo aquejaba.

Al regreso de un crucero, ella preparó a los chicos para el vuelo que saldría en dos días para llevarlos a su lugar de origen, mientras peinaba a la más pequeña, en la pantalla de la computadora apareció un correo electrónico.

Su marido le pedía el divorcio, agradecía los años que habían pasado juntos, no tenía motivos valederos para alejarse, consideraba que era la mejor decisión.

La única condición impuesta era no hacer preguntas.

Le pidió que cuidara a los niños, a su llegada la esperaría Sergio con los papeles a firmar.

Desde instante nada sabría de él.

Desconcertada intentó comunicarse con su esposo, no contestaba sus llamadas, la dirección de correo había sido bloqueada.

Sergio los recibió en el aeropuerto, cumplió la promesa de no hablar del pasado.

Meses después una encomienda llega a la casa de la ex pareja.

Obsequios para todos.

Elina llora al leer una simple nota que decía:

“Te amé como a nadie en el mundo, adoré a nuestros hijos, no quise que presenciaras mi ocaso.

Más allá de todos los tiempos sé que tu mano bondadosa me ayudará a recorrer los caminos de la eternidad.

Por siempre serás mi mujer.

No dudes, vive por ti y por mí."



Tuesday, June 08, 2010

PARTIR EN SOLEDAD




De nada le sirve transformar los meses en minutos o segundos, al final del ejercicio la cuenta será exactamente la misma.

Es un hombre de negocios exitoso, ha viajado solo o acompañado por distintos lugares del planeta.

Es atractivo pese a haber pasado, no importa la cantidad de años.

El gimnasio ha modelado su cuerpo, la cama solar disimula la lividez que atrevida comienza a asomar en su rostro.

Una mañana cualquiera encuentra manchas en su cuerpo, el médico personal le había comentado que sería el principio del fin.

Descarta los relojes que marcan la hora de su partida.

Convoca a su abogado quiere dejar los papeles en orden, al despedirlo una lágrima, otra y otra asoman a sus ojos, hasta convertilos en un torbellino de agua salada.

Una copa de cognac cerca del hogar del amplio salón lo llevará a evocar momentos de su vida.

El crepitar de los leños encendidos trae a su memoria la bonanza de sus padres.

Aprieta con sus manos la copa hasta hacerla estallar en mil pedazos, el líquido se vierte en sus piernas como si fuera savia que alimenta la vida que se extinguirá en poco tiempo.

Recostado en el sillón cierra los ojos.

Como en una película, pasajes de su andar por la vida.

El cuerpo se convulsiona al recordar el accidente aéreo en el que murieron sus padres.

Jamás se encontraron los cuerpos.

Tomó como rutina arrojar flores al mar cuando se cumplía un aniversario.

El letargo trae la figura de Amanda.

¿Qué habrá sido de ella?

Se amaron como locos que encendían el fuego hasta dejar las sábanas mojadas.

Era hermosa, codiciada, sensible, aceptó todas las condiciones que él le imponía, menos la de tener un hijo que trascendiera el amor y los tiempos.

Llora hasta que las lágrimas se evaporan en el más sobrecogedor silencio.

Librará su última batalla con la muerte que lo espera.

No le dará oportunidad de verlo vencido.

Se acerca al fuego, rápidamente las ropas se encienden.

Mañana serán inhumadas las cenizas de un hombre que decidió librar una batalla con esa mujer etérea que eligió vestimentas negras.

Amanda asiste a la ceremonia, un joven la sostiene, en el último acto decidió ser partícipe del adiós al hombre que más amó en su vida.

El mar será depositario del contenido de la urna.

Alejo se lleva la placa de metal, espera continuar la obra de su padre viviendo cada minuto de la vida que dos amantes le regalaron.

El mar recibirá las cenizas de un hombre que eligió la soledad que trasciende los espacios terrenales.


http://www.youtube.com/watch?v=wlDWXv-cIh8&feature=related

Sunday, June 06, 2010

LA HISTORIA DE JUANCITO




Es tan pequeñito que su cuerpito cabe en el brazo de una persona, tiene la cara arrugadita como si fuera un viejito, ella está ante la presencia de un niño recién nacido.

Viene desde muy lejos con su mamá, sus ojitos vivaces alumbran esperanza.

Desea sostenerlo en sus brazos, lo acuna hasta que el bebé se queda dormido.

Imagina que un chiquitito que despierta a la vida sueña con ángeles que lo protejan.

Ruega a su madre vaya a tomar un té que abrigue sus entrañas vacías.

La familia se ha desmembrado temporalmente hasta que el pequeñito reciba un transplante de corazón.

Los días pasan sin grandes novedades, visita al niño cuando los propios están en el colegio.

El Hospital Regional, es austero, preparado para llevar a cabo el milagro de extender la vida de cualquier niño en condiciones de salud no deseadas.

Por la tarde le llevará a la mujer el celular de su hija, así podrá comunicarse con el resto de la familia que los espera rezando junto a los descendientes de la comunidad de Los Canoeros, valientes que atraviesan ríos torrentosos para buscar sustento para sus familias.

Juancito se ha convertido en el hijo de todos.

Llega la pediatra, parece un ángel enfundada en su guardapolvo blanco.

No sonríe como siempre, hablará con la mamá del niño.

Es doloroso comunicarle a una madre que su hijo tiene solo seis meses de sobrevida.

La ciencia lo conectará a un corazón artificial, pero necesitan otro para que el niño siga viviendo. Juancito en su cuna conectado a un aparato más grande que su cuerpecito se aferra a la vida.

En todas las casas del lugar hay velas encendidas.

Noche oscura, no brillan las estrellas, la luna ha escondido sus destellos detrás de las nubes que trajo el viento helado.

Tormenta de nieve, los copos apenas llegan a derretirse en la pista.

Aterriza un avión sanitario, presurosos los médicos en una heladera traen el tesoro largamente esperado.

Horas de incertidumbre.

A media mañana la cirujana comunica que la operación ha sido exitosa, solo resta esperar.

Qué importan las esperas cuando se ha esperado que la vida no se extinga.

Cronos y la ciencia atemperan las dificultades.

Hoy celebramos el primer cumpleaños de Juancito, un niño simpático, regala sonrisas.

Globos y guirnaldas de colores alegran el humilde salón, tazas de chocolate y dulces.

Allá en lo alto de la cordillera otro angelito sonríe elevándose hacia las puertas del cielo, su corazón ha servido para salvar a otro niño.


http://www.youtube.com/watch?v=zZLDJXwiyms&feature=related

Friday, June 04, 2010

L & L




El estudio jurídico tiene más de cien años de trayectoria.
Sucursales abiertas en todo el país para resolver los temas imaginados y por imaginar.
Al frente del estudio ubicado en el sur del país están Lidia y Leandro.
Matrimonio con más de treinta años de trayectoria.
La vida transcurre entre expedientes apilados en estantes de fina madera.
La mullida alfombra es de color pastel, sillones de cuero rojo con tachuelas de bronce, parecen recién colocados, los brazos están tallados, otorgando un aspecto majestuoso al salón.
Mesas ratonas ornamentadas con flores contenidas en recipientes de cristal, algunos ceniceros para amortiguar el tiempo de los que esperan la resolución de un juicio laboral que casi siempre se resuelven cuando los actores transitan la última parte de sus vidas.
Ganan buen dinero, un ejército de empleados se ocupa de los trámites burocráticos de los Tribunales.
Con sus mejores atuendos concurren a las audiencias de conciliación.
No omiten sobornar a jueces y fiscales para obtener sentencias favorables que incrementarán un nutrido patrimonio.
Lidia está cansada de tantos papeles, le propone a su marido cambiar de rubro y dedicarse exclusivamente a los divorcios.
Leandro reacciona furioso, tienen más de lo que puede desear cualquier mortal, son reconocidos por toda la sociedad, cuentan con el respaldo de años, un apellido ilustre que les permite acceder a lugares vedados para cualquier ciudadano.
Fiestas a las que asisten los nombres más conocidos de la comunidad.
Nada de eso le alcanza a Lidia, quiere un cambio y está dispuesta a todo.
El matrimonio ansía cosas totalmente opuestas.
Deciden tomarse una tregua en la feria judicial de enero.
Ella reserva un hotel exclusivo en Aspen, Leandro opta por el Caribe, está harto de los paisajes nevados.
El diablo que nunca descansa encuentra la oportunidad para hacer de las suyas.
Pondrá en la vida de la mujer un profesor de esquí, atlético, majestuosa imagen dentro de su colorido traje.
Enciende pasiones en todas las mujeres, pronto compartirán la misma cama.
Noches de amor y fuego.
Leandro en el Caribe se desata, baila desenfrenado con una morocha que mueve las caderas al ritmo de los parches.
El almanaque indica que es tiempo de regresar.
Besos y abrazos apasionados encienden los aeropuertos.
Promesas de reencontrarse en un futuro no lejano.
El matrimonio se saluda con un beso gélido.
Ninguno de los dos está dispuesto a perder nada
Un divorcio controversial será expuesto en Tribunales, las acusaciones de infidelidad se cruzan.
En dos meses la justicia fallará a favor de ella, ha presentado pruebas contundentes en contra de su aún esposo.
Con el fallo recién redactado compra pasajes para regresar a Aspen.
Cree que otra vida la espera.
El profesor de esquí la espera en el aeropuerto, no hay demostraciones de amor, está acompañado por una morocha sensual, esbelta como una gacela.
Lidia regresa sola al hotel, consulta su notebook, furiosa confunde las letras.
El conserje llama a la puerta, le acerca un ramo de azucenas, una pequeña esquela dice: “Te agradezco me hayas llevado a perder el juicio laboral, gracias a tus errores conocí a esta joya caribeña, con ella pasaré el resto de mis días”.

http://www.youtube.com/watch?v=iukdP6JKM2k

ÚLTIMA MARATÓN




Es atleta, ha ganado infinidad de trofeos.

En su carrera de deportista se ha adecuado a todas las disciplinas, cada una tiene un encanto determinado.

Concluidos los estudios serán sus padres quienes le entreguen el diploma de contador público.

Decide alquilar oficinas en el centro de la ciudad, cerca de un gimnasio que le permitirá entrenarse a diario.

A los amigos siempre les dice que el deporte es vida, nada mejor que un entrenamiento para conocer mejor su cuerpo.

Alina fue su última entrenadora, al principio no le inspiraba confianza, hasta que se fueron conociendo.

Dos figuras esbeltas, admiradas, bellos por fuera, pocos conocía que eran personas con valores para copiar.

El amor no tardó en llegar.

Una sencilla ceremonia los unió en la iglesia a cielo abierto ubicada a pocos pasos de la entrada de un bosque salido de un cuento.

Postergaron el viaje que hacen los recién casados para terminar con los arreglos de la casa que habían adquirido cerca de la playa.

Amantes de la naturaleza no hubieran cambiado por nada el sitio elegido, más adelante cumplirían el sueño de viajar.

En ese momento solo querían disfrutar lo obtenido con el esfuerzo de sus respectivos trabajos.

El segundo aniversario lo festejaron en la maternidad con la llegada de Paloma.

La familia decía que era un buen augurio que un hijo naciera en la misma fecha que habían contraído enlace, ellos asentían aún cuando no creían en esos mitos.

Paloma desde la cuna mostraba su belleza innata, una niña preciosa, de los dos tenía algunas facciones, simplemente era hermosa.

La ciudad conmemoraba su fecha, los festejos serían múltiples, no faltaría la clásica maratón, dos años consecutivos el matrimonio había corrido con su pequeña hija.

Alina corría precedida por el cochecito de la nena.

Pasados unos años la niña presenciaba el evento sostenida de la mano de su madre.

Mientras se afeitaba Román sintió una molestia en uno de sus brazos, tan fuerte que su cara estaba más blanca que la espuma de afeitar.

Nada diría, no quería preocupar a su familia.Adujo tener cansancio pero sentirse bien para correr.

A mitad de la carrera sufrió un desmayo.

Rápidamente lo trasladaron al hospital.

Sometido a diferentes exámenes los médicos concluyeron que le quedaban seis meses de vida. Pidió a los facultativos absoluta reserva, no quería que su mujer ni su hija supieran que el tiempo era tan escaso.

De a poco fue dejando los entrenamientos, la excusa era preparar un viaje por el mundo en familia, para ello debería adelantar trabajo.

Visitaron los lugares más bellos del planeta, el sol atenuaba la palidez de su rostro.

Ante las preguntas de su mujer respondía que los días de descanso lo transformarían en el hombre que ella había conocido.

Los viajes debilitaban su cuerpo.

Mañana estarían nuevamente en el hogar que tantos recuerdos atesoraba.

Descansó brevemente.

Por la tarde recibiría a un escribano, quería dejar sus bienes a nombre de las dos mujeres que más había amado en la vida.

Sin fuerzas despidió al funcionario, camino al hospital sintió que la muerte no tardaría en llevarlo.

Alina y Paloma lo encontraron dormido en la cama, sondas y aparatos lo conectaban a un presente que lentamente se extinguía.

Abrazaron fuertemente al hombre que tanto les había dado.

Alina besó sus labios, Paloma apretujaba la mano de su padre entre las suyas.

El atardecer trajo una brisa impregnada con aromas a rosas, las cortinas de la habitación parecían las alas desplegadas de los ángeles que habían venido a buscarlo para acompañarlo en su camino al cielo.


http://www.youtube.com/watch?v=rzC1mLta1YM&feature=related

Thursday, June 03, 2010

LÁGRIMAS Y PAÑUELOS




Recorría varias leguas para darle clases de música a su alumna predilecta.

El cochero lo esperaba mientras él se deleitaba observando los avances de la adolescente.

Los acordes del violín matizaban el tiempo compartido.

Suaves curvas en la silueta de la niña asomaban pudorosos, carita de porcelana iluminada por un par de ojos azules, evocaban el paisaje de su amada Viena.

Ese lugar lo había visto nacer, allí se enamoró de la música.

Distintas circunstancias lo llevaron a cruzar el océano.

Recordaba a sus padres despidiéndolo en el puerto.

Tibios abrazos, lágrimas y pañuelos quedarían para siempre grabados en su alma.

El viaje que lo llevaría a otras tierras atravesaría tormentas y quietud cuando la mágica luna se colgara del cielo.

Enamorado del amor había llegado a las tres décadas en soledad, conociendo amores fugaces como la luz de las estrellas.

Instalado en la pensión del pueblo marítimo veía que los ahorros se esfumaban como la brisa que no descansa hasta convertirse en viento que elevaba la cresta de las olas en su efímera danza.

Era momento de comenzar a trabajar.

El dueño de la vivienda que ocupaba le ofreció el pequeño salón para que diera sus clases de música.

Regularmente los padres le enviaban encomiendas, ahorraba todo el dinero que aquellas traían.

Al cumplir los treinta y dos años pudo adquirir su propia casa.

Los alumnos venían desde lejos.

Osvaldo adoraba a su única hija, no obstante no la dejaría viajar a tomar clases de música.

El pueblo le otorgó cierta fama al profesor.

Poco tiempo después el padre de Griselda lo contrataría con el objeto de cumplir los sueños de su hija.

Día por medio lo pasaban a buscar en el carruaje tirado por briosos caballos.

Su corazón cabalgaba en su pecho al ritmo de ellos.

El destino había puesto en su camino a una mujercita de inigualable belleza.

En las noches solitarias se preguntaba como derribar el prejuicio de la edad.

Jamás había sentido nada parecido por ninguna mujer.

Don Osvaldo al fin cedió a las pretensiones del músico.

El pueblo festejó la boda de Griselda con el extranjero.

El día que nacía el tercer hijo de la pareja, el abuelo decidió partir para reunirse en otros cielos con la mujer que había amado siempre.

Nada los ataba al paisaje en que se habían conocido.

Meses después estaban instalados en Viena.

El cambio no favoreció a la pareja.

Por las noches el artista se alejaba demasiado, no hacía partícipe a su mujer de los logros que había obtenido.

Ante los requerimientos de Griselda aducía falta de tiempo y compromisos.

Nada faltaba en la lujosa casa que habitaban.

Las institutrices cuidaban y educaban a los niños.

Eran reconocidos en todos los ámbitos de la sociedad.

El hartazgo contaminaba la vida de ella.

Una noche de concierto preparó a sus hijos, no querían nada, detestaban los honores y las loas al artista.

El navío esperaba a los pasajeros, regresarían a la vieja casa del abuelo.

Allá lejos intentarían olvidar un amor de hielo.

El alcohol sería la única compañía del músico.

No podía ni quería desandar el camino que lo llevara al amor que le había dado sentido a su vida.

Tarde supo que había perdido a su familia.

Tambaleando se acercó al escritorio, dejaría una pequeña esquela.

Nadie sería culpable de su elección.

Un disparo certero callaría su corazón para siempre.

A miles de kilómetros el cuerpo de Griselda se estremeció.

Abrazada a sus hijos entendió que había culminado lo que pudo ser una gran historia de amor.


http://www.youtube.com/watch?v=DH7teDF51bA