NOSTALGIAS DE OTOÑO

Recuerdo los Idus de Marzo, ocurrió hace mucho tiempo, por aquel entonces un emperador romano fue destituido.
Las glorias y honores quedaron sepultados en la memoria de algunos.
El poder que supo ejercer se diluía como agua entre las manos.
Los hechos históricos quedan casi en el olvido.
Observo el almanaque en poco menos de tres semanas este pájaro de coloridas alas quedará expuesto, sin plumaje que lo proteja, casi desnudo.
He sido un ruiseñor feliz.
No dudé en regalarte mis gorjeos cuando en el cielo aparecían las luces resplandecientes del alba.
Me gustaba observarte descorriendo las sábanas que cubrían la escultura de tu cuerpo, con esa mirada que solo yo conocía bajabas las persianas de tu cuarto.
Siempre entendí que necesitabas tiempo que te alejara de los sueños nocturnos para comenzar un nuevo día.
Contemple tus estados de vigilia, eras más hermosa de lo que cualquier ser terrenal pudiera imaginar.
Tu cara cincelada por un escultor descansaba plácidamente sobre la almohada, los cabellos dorados la enmarcaban placidamente.
Me detuve para admirar el manto de tus pestañas tan oscuras como tupidas, parecías un ángel dormido.
Sé que mis trinos lejos de producirte molestia te agradan, dibujando en tu rostro de porcelana la más bella de las sonrisas.
La tecnología no solo te permitió fotografiarme bebiendo el néctar de las flores también grabaste cada uno de los sonidos que se convertían en melodía.
Debo viajar hacia otras latitudes, lugares tal vez desconocidos donde la primavera es un estallido de fragancias y colores.
Quizás no entienda el idioma, la musicalidad de mis trinos logrará que por fin establezcamos esa conexión que he tenido contigo.
Otras sonrisas me darán la bienvenida, ninguna será como la tuya.
Sabes que no hago diferencias, el mundo es universal a todos aquellos que albergan en la intimidad de su ser promesas de nuevos días, proyectos a punto de concretarse.
No creas que no entiendo tus lágrimas de impotencia cuando alguno de aquellos no llega a iluminar tus anhelos.
Debo partir, no puedo ni debo dejar de pedirte que recuerdes cada momento compartido.
Deja que las hojas del almanaque vuelen cual pájaros sin destino predeterminado.
Sé que en un rincón de tu alma inquieta tienes un lugar destinado para mí.
No quiero despedidas que producen angustia.
No quiero que derrames una sola lágrima.
No te darás cuenta del paso del tiempo, prometo regresar para ser el artífice de tus sonrisas.
Sigue mi vuelo hasta que no me veas, sigue mi vuelo hasta el instante que me convierta en un punto que se desvanece en el horizonte.
Sigue mi vuelo con tu pensamiento, solo él me traerá de regreso.



http://www.youtube.com/watch?v=U8v12M2mRVM

VESTIDA DE SILENCIO

Sé que la dueña de esta casa tiene un variado guardarropas, sin ser ostentoso puedo hallar algo que me guste.
A ella como a mí me gusta pasar no desapercibido sino no llamar la atención de manera estridente, no hace falta.
Me olvidé de presentarme y pido las disculpas que el caso amerita, mi nombre es Silencio.
Conozco a la moradora de esta casa desde hace tiempo, sé de sus gustos, también de aquello que la mortifica.
Podría decir sin llegar a equivocarme que no es pacifista debido a su carácter explosivo, algo que no puede ocultar cuando aparece la injusticia.
No quiero irme del tema, recuerden que estaba buscando un atuendo.
Por fin encontré una túnica de color blanco, espero adecuarla a mis necesidades que no son demasiadas.
Con este ropaje caminaré por la playa tal cual lo hace ella cotidianamente.
Buscará un refugio que la proteja del viento intenso que no cesa en estas latitudes.
La observaré discretamente mientras ella me evoca cuando se dedica a contemplar la majestuosidad del paisaje.
Conocedor de otros sitios sé que hay pocos donde se concentre la belleza que la diosa naturaleza ha derramado generosamente.
No me resulta difícil caminar con esta vestimenta, no es novedosa, solo que cambia de color según el estado de ánimo de quien me convoque.
Azul casi celeste en la línea imaginaria que divide el agua del cielo.
Rojo cuando las pasiones se encienden.
Verde cuando se abrigan esperanzas.
Dorado como los rayos del sol cuando todo resplandece.
Púrpura y magenta cuando en el universo aparecen las primeras estrellas.
Plateado como los gajos de la luna cuando se cuelga del firmamento.
Mutar el color de mi vestuario es una constante en mi vida.
Aprendí a portar todos los matices desde que tengo uso de razón.
No me gusta mucho ser transparente todos pueden llegar a la profundidad de mi alma inquieta, tengo pudor aún cuando no lo creas.
Tampoco quiero ser como las lágrimas que se derraman, algunas sin razón de ser aparente.
Sin ser un ser superior puedo estar en muchos espacios a la vez, solo es necesario que me convoques cuando lo creas necesario.
La vida está plagada de dudas y certezas, trato que aclares aquellas que te perturban.
Entiendo que en ciertas ocasiones mi presencia es absolutamente necesaria.
El criterio es mi cerebro.
Me gustaría dejar de ser quien te acompañe.
Escuchar la melodía de tu risa semejante al trino de los ruiseñores que se detienen en el dintel de tu ventana.
Ser cómplice de aquello que callas.
Por último me convertiré en delicado pañuelo que enjugue tus lágrimas.
No te preocupes más de lo necesario, no le otorgues entidad a aquello que carece de importancia.
Comprendo la necesidad de establecer pausas.
No te condenes al ostracismo en el que moran los entes sin alma.
Vive intensamente, me alejaré de tu lado cuando en tu rostro se dibuje una sonrisa.

http://www.youtube.com/watch?v=qo9lwuKVf…

ENCAJES Y PUNTILLAS

Habito en cualquier sitio, soy parte de tu vida.
Mi nombre es Palabra, no me llevo demasiado bien con el Silencio pese a que lo respeto profundamente, es quien pone los límites necesarios para que no me desborde, algo que no ocurre habitualmente cuando entre los interlocutores está presente el sentido común y la sensatez.
Me gusta estar en este salón, es distinto al resto de la casa.
La moradora lo ha decorado con calidez, los grandes ventanales tienen cortinas terminadas con puntillas y encajes de hilo blanco, sé que son un regalo de su abuela, abuela de manos habilidosas y rápidas que con una sola aguja tejieron esta red maravillosa semejante a una telaraña que recorta el paisaje marítimo.
Pese a que llueve, ella no dudará en salir en búsqueda de nuevas historias para compartir.
La llovizna comienza a desvestir los árboles, el otoño se manifiesta, las veredas son imperceptibles, están cubiertas de hojas rojizas y doradas, el agua impide que crujan bajo los pies del caminante.
Estaré sin su compañía por unas horas, la ausencia logrará silencios que no deseo.
Aprovecharé el tiempo para repasar parte de mi vida, estuve en todos lados, lados que fueron propicios y otros que preferiría olvidar por su contenido.
De los primeros, recuerdo con una sonrisa amarga a los seres que me utilizaron en momentos inapropiados, he tenido el filo de una daga cuando a través mío intentaron dañar a seres inocentes.
También evoco con una lágrima a los que me reprodujeron hasta el cansancio vulnerando los derechos de los otros, me multiplicaron hasta el hartazgo sin pensar por un instante de que manera me ubicaban en un discurso o en la nota de un diario.
Pocos acuden al sentido común al momento de pronunciarme, no ignoran que los daños pueden ser irreversibles.
No creas que mi vida es una queja constante, estuve presente en los momentos en que me dedicaste al amor apasionado, instantes que quedarán grabados en el alma de los enamorados.
Soy feliz cuando me transforman en canción, melodía sin fronteras que a todos abraza aún cuando el lenguaje parezca diferente.
Mientras espero el regreso de la dueña de esta casa, por debajo de la puerta deslizan un papel, la letra ilegible indica que un médico quiere me presente a una consulta.
No asistiré sola.
Luego de una prolija revisación me dice que las heridas que me han provocado son profundas.
Nos despediremos con una sonrisa y con la certeza que en otras ocasiones he pasado por idénticas circunstancias, de todas las luchas he salido sin mayores secuelas.
Cuando entramos a la consulta llovía torrencialmente, muchas lágrimas representaba el agua.
Ahora el sol brilla en lo alto, todo adquiere vida, aleja la nostalgia.
Los ciclamen nos saludan, en los balcones los geranios se mueven con la brisa.
Tengo una sola certeza, mi vida continuará solo si tu lo quieres.
Finalmente te pido un favor empléame con precisión, como si fueras el bisturí que con maestría usa el cirujano para salvar vidas.
No importa si el fuego verbal me envuelve, saldré indemne si las causas que me convocaron han sido justas, de lo contrario estaré condenada al silencio.
De ti depende mi vida.


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NONATO

Soy producto del amor que sienten mis padres, desde que se unieron buscaron perpetuarse trayendo vida a la vida.
Mi papá está agrandando la casa humilde que habitamos, agregará un cuarto para colocar la cuna que me regalará mi abuelo.
Hace pocos días a mi mami le fotografiaron la panza, allí vivo yo hasta dentro de pocos meses.
Toda la familia dice que soy un niño sano y muy bonito, tal vez me vean así porque me quieren desde que supieron de mi llegada al mundo.
Mamá trabaja lejos de mi casa, papá nos acompaña.
Como todas las mañanas caminan hasta llegar a la estación, durante el trayecto se refieren a mi con un amor supremo.
Puedo percibir que hace calor, el pañuelo que usa mami absorbe las gotas perladas de su frente.
Apuran el paso, viajaremos como siempre en el primer vagón, a la salida del trabajo comprará ropa para completar el ajuar que luciré cuando nazca.
En esta ocasión viajamos sentados, me gusta sentir las manos de mi madre acariciando el vientre, siento más amor del que podía imaginar.
A medida que la formación se detiene en las estaciones se desborda la capacidad de los vagones.
Faltan pocos minutos para llegar, mamá cuelga el bolso de su hombro, nos acercamos a la puerta.
El ruido es ensordecedor, escuchos gritos, lamentos, mamá no respira, ha llegado nuestro fin.
Hoy estoy con ella en el reino de los Cielos, desde allí cuidamos a mi familia, mi padre no tiene consuelo.
No me cuentan en las estadísticas, no consideran que era un niño por nacer.
Cerca de Dios, sentados en una estrella rezamos por todos, hoy hubiera cumplido un año.
No fue el destino quien impidió mi nacimiento, fue la desidia de muchos señores que no saben valorar las vidas humanas.
Papá con mamá te cuidaremos siempre, no llores sobre tierra árida, me enseñaste a ser fuerte aún cuando no me conocieras, desde aquí te transmito fortaleza.

VESTIDA DE VIENTO

Mi traje es etéreo, depende en que lugar me sitúe es el color que me adjudican, puede ser rosado como las luces del alba que indican la aparición de cada día, dorado cuando cada rayo de sol resplandece en el cielo diáfano.
Magenta o púrpura en el instante que la timidez de las estrellas enciende las noches de amor apasionado o dulce tertulia.
Plateado o crema como la luna que ilumina cada uno de tus sueños.
Negro en el momento que el plomizo de las nubes cubre el firmamento.
No siempre tengo el mismo estado de ánimo, suelo ser brisa placentera que atenúa los rayos del sol de los turistas que doran sus cuerpos en las playas.
A veces silbo fuerte, trato de controlarme, nunca requerido convertirme en tempestad que arrase con todo aquello que encuentre a su paso.
Trato de mantenerme a una velocidad constante, no excederme para no perjudicarte.
Me gusta cuando admiras la danza de las mieses del trigo en cualquier campo.
Asciendo rápidamente a la cúspide de las montañas, sigo el vuelo de los pájaros, los ayudo a mantener las alas desplegadas, con ello logro que desde donde te encuentras puedas observas las majestuosas escuadras que surcan los cielos.
En pleno ascenso juego con las nieves eternas, blancas figuras se movilizan de un lado hacia el otro, de manera casi imperceptible los espacios blancos se multiplican.
Conozco todos los paisajes, te he acompañado en todos tus viajes.
Puedo jugar contigo haciéndote correr detrás de la capelina que cubre tus cabellos o sentirme solemne acariciando con suavidad la copa de los álamos.
Disfruto de todos los sitios, sean poblados o solitarios.
Quiero contarte de un desierto que conocí hace tiempo, su nombre es Mojave, no se parece a las otras extensiones de ocres arenas que alguna vez visité.
Está rodeado de cadenas montañosas, dirás que todas las sierras son iguales, debo contradecirte, la falda de aquellas esta formada por piedras multicolores.
Patricio es ingeniero, necesitaba mi ayuda o la de mis herederos dado que le habían encargado instalar un Parque Eólico en la Ciudad de Tehachapi.
Necesitaba mi compañía para saber la intensidad que necesitaban los molinos de viento que brindarían energía a distintos poblados.
No imagines molinos de viento tradicionales como los que has visto en los cuentos, los eólicos son enormes estructuras metálicas, tienen varios brazos que debo agitar a determinada velocidad para que la energía llegue a una gran cantidad de ciudades.
Liz es una profesional de la zona recién recibida, su belleza no pasa desapercibida, será quien se encargue del mantenimiento de la obra una vez que Patricio regrese a su país.
Los he visto discutir en varias ocasiones, cuando ello ocurría mi misión era distraerlos, subía la intensidad de mi silbido, de esa forma debían regular la fuerza de los molinos.
El parque eólico fue debidamente cercado.
La sala de máquinas electrónica avisaría de cualquier desperfecto, a tales efectos se activarían comandos especiales.
Más de cien molinos eólicos fueron instalados en el parque, la inauguración fue un éxito, por fin la zona tendría energía limpia y a bajo costo.
Gigantes de plata con un ojo central se habían convertido en los reyes del desierto.
Liz había estado durante el montaje del parque, conocía la peligrosidad de acercarse demasiado a los gigantes.
Traté de alejarla con fuerza inusitada aún conociendo que podía dañar las estructuras.
Siguió avanzando hasta que desapareció de mi vista.
Diversas patrullas salieron en su búsqueda, vanos fueron los resultados.
Mis lágrimas se transformaron en lluvia copiosa, del ojo de uno de los molinos pendía la blusa de Liz, semejante a un pájaro de plumaje rojo.
Las alas quebradas impedían emprendiera el último vuelo.


http://www.youtube.com/watch?v=9Ng237K3I…

SOLO UNA HISTORIA DE AMOR

El mundo parece confluir en ese punto estratégico de la Ciudad de Nueva York.

El visitante novato no puede dejar de visitar los centros culturales, teatros, auditorios que se mantienen en constante actividad.

Variedad de espectáculos que cubren las expectativas conocidas o por conocer.

Las luminarias encandilan, propiciando que cualquier fantasía se pueda cumplir.

En un lujoso restó varios amigos armaron una recepción espontánea, la idea era no dilatar por más tiempo el abrazo y la conversación.

En pocas horas pasaron como flashes épocas de nuestras vidas en distintos rincones del planeta, el tiempo corría veloz.

Fue una noche de reencuentros y el placer de compartir con los amigos, amigos que la distancia circunstancial logran se fortalezcan los lazos que nos unen.

En esos instantes comprendemos que solo la adversidad nos podría separar.

Pese a que los subtes no me atraen de manera especial mañana conoceré la Estación Central.

Como dedos extendidos se abren los andenes que llevan a diferentes destinos, millones de almas utilizan este medio para transportarse con su bagaje de sueños y esperanzas.

Mi destino es incierto, solo deseo conocer la vida que existe bajo tierra.

Historias infinitas para recrear.

Elijo el último vagón.

Una pasajera oculta su  belleza juvenil debajo de un gorro de lana.

Desde el andén Dick la busca con la mirada.

Mirada intensa que dice demasiado sin pronunciar una sola palabra.

Repetiré el viaje para conocer la historia, Dick me cuenta que vive con su padre, este año ha ingresado a la Universidad, no está seguro de la carrera que eligió, lo hace para conformar a su padre, un hombre de gran fortuna que pretende sin pleno éxito digitar la vida de su heredero.

Cualquier episodio es motivo de discusión, padre e hijo son seres solitarios que no han aprendido a compartir.

Allison tampoco se dirige a un lugar en particular, en silencio ambos hacen el trayecto hasta el final del recorrido para luego regresar.

Esta noche él no llegará, Allison lo busca, preocupada consulta el reloj.

No tardará en contarme que pese a su juventud está peleando la custodia de su hija de cinco años, fruto de una relación con un artista que amenaza con llevarse la niña a otro país.

Me dice que está enamorada de Dick pese a que jamás ha intercambiado una palabra con el joven.

Es notorio que se trata de un amor a flor de piel.

Debo regresar, previamente le entregaré mi tarjeta personal, sabe que ha encontrado alguien en quien confiar, alguien que le brinda amistad sin preguntar absolutamente nada más que lo que ella quiera decir.

Han pasado tres años de aquel encuentro, hoy los evoco, pareciera que los he llamado con el pensamiento.

Abandono la escritura por un momento, del otro lado de la línea Allison me pide que viaje a Nueva York, tiene una sorpresa para darme, por lo tanto no quiere adelantarme nada por teléfono.

Imagino mil cosas, nada se parece a la historia que en una semana viviré.

Mis amigos tomados de la mano me esperan en el aeropuerto.

Siento felicidad al saber que Allison tiene la custodia plena de su hija.

Esta noche recrearemos el viaje en metro, seremos los únicos pasajeros del último vagón, en ese espacio intercambiarán las alianzas.

Mañana en una sencilla ceremonia unirán sus vidas para siempre.

Pocas veces he visto rostros cubiertos de lágrimas tan conmovedoras como esas que nacen en el corazón de dos que se aman.

http://www.youtube.com/watch?v=aqlJl1LfDP4

PERCEPCIONES

Días imprecisos en que me cuesta llegar al fondo de la cuestión, no importa si aquello que se percibe es pequeño o la mente logra que sobredimensionemos el efecto de todo eso que nos llega a diario.

No soy perfecta eso lo tengo asumido desde que me reconocí como un ser humano, con más virtudes que defectos.

Atesoro uno en particular y sé que ante las situaciones más adversas seré directa sin anestesia, sin artilugios que cambien las palabras por otras que se lean o escuchen  más o menos agradables.

Si me tuviera que comparar con un ser del reino animal sin dudas elegiría un pájaro, pequeño, con coloridas alas que al desplegarlas mostraran su magnificencia ante todos los que saben ver y no solo mirar.

He prestado mis oídos para escuchar todo de todos, fui concisa a la hora de brindar sugerencias, consejos no me atrevo a darlos dado que no los recibo cuando están cargados de doble discurso.

Me apasiona jugar con las letras sin calzarme el título de poeta, sería una torpeza de mi parte autocalificarme.

No todos tenemos las mismas percepciones y por suerte existe la diversidad de pensamiento, pensamiento que acepto sin dejar de lado mis convicciones, convicciones que se fortalecen día a día.

Convicciones que me hacen ser quien soy sin querer ser otra persona.

Estoy feliz con los logros obtenidos, el camino a recorrer es largo, sinuoso.

Ningún obstáculo me aterra, desde niña aprendí a compartir más allá de cualquier diferencia.

Puedo desparramar cariño en mi vuelo por ello no acepto traiciones de  ninguna especie. Una palabra mal dicha, una palabra pronunciada fuera de tiempo y espacio logra que despliegue mis alas propiciando un vuelo sin destino cierto.

Reconozco que todos acarreamos diferentes cargas, no es motivo suficiente para que el mundo gire alrededor nuestros, integramos ese mundo imperfecto, debemos mejorarlo en lugar de quejarnos si no estamos dispuestos a hacer nada.

Tus problemas son míos en la justa medida que pueda ayudar a resolverlos, cuando tienes actitudes déspotas y quieres que se escuche tu voz, mi respuesta será silencio o palabras vacías de contenido.

Todos tenemos importancia en la justa medida que no tratemos de invadir espacios que no nos corresponden.

Te sugiero que ejercites compartir con tus iguales, no necesariamente deben pensar de manera idéntica a la tuya, nadie está solo en el mundo, mundo que construimos cada día de nuestras vidas.

Destino que apenas viene dibujado en el momento de nacer, el resto es responsabilidad de cada uno de nosotros.

No avances cuando un cartel imaginario te diga hasta aquí te permito llegar.

El cariño no mengua si se respeta el espacio de los otros.

Estas letras no tienen destinarlo especial ni particular, son letras que quise dejar mientras emprendo un vuelo mágico que me permita gozar de la libertad, libertad por la que he trabajado todos y cada uno de los días de mi vida.

http://www.youtube.com/watch?v=rzC1mLta1YM

MIÉRCOLES DE CENIZA

Los festejos carnestolendos no podían haber sido mejores.
La gobernación se ocupó para que nada faltara en la celebración, no siempre se tiene la posibilidad de reunir a todos por medio de la música y las sonrisas.
El Rey Momo se merecía cada minuto que le fue dedicado en esta ocasión.
El tiempo acompañó, lejos de una noche gélida tuvimos la suerte de tener dos noches casi templadas.
Noches mágicas que en esta latitud no son como las noches que todos conoce, duran poco tiempo, el alba madruga esplendorosa para obsequiar la voluptuosidad del paisaje.
Nocturnos cortos donde la oscuridad no es plena.
Sobre la avenida principal a la vera de un mar casi planchado estaban estacionadas las carrozas que representarían a cada ciudad, no eran muchas tratándose de una provincia pequeña.
La banda municipal estaba ubicada de espaldas al océano, el cerro había sido iluminado en todo su recorrido con antorchas, fuego que flameaba según la dirección de la brisa suave.
La gobernadora fue breve en la inauguración.
Los primeros acordes, precisos, melodiosos convocaron a las participantes de la Guardia del Mar.
Bellas mujeres uniformadas con trajes de polleras cortas en tonos azulinos, en las cabezas portaban atractivos gorros terminados con plumas coloridas.
Piernas torneadas dibujaban el pavimento con el caminar.
Los aplausos se repetían.
La primera carroza recibió una ovación, precedidas por bailarines que danzaban al compás de los redoblantes.
Todos admiraban la construcción con las pocas flores que se encuentran en esta localidad.
La música envolvía los pensamientos, sin dudas atraía recuerdos de otros festejos.
El último móvil estaba ocupado por la reina de la ciudad principal, la representante no podía estar más bella, en comunión la brisa otorgaba movimiento a su exótico traje, una túnica de un color indescriptible.
Observadora pude notar que no estaba cómoda en el sitio asignado, era hermosa, merecedora de cerrar el desfile.
Noté una sonrisa ficticia, la mirada demasiado brillante no denotaba alegría ni emoción, diría perplejidad.
Asistieron invitados de todo el país, no es habitual un festejo en lugares con clima riguroso.
Hoy es miércoles de cenizas, mi vecina circunstancial fue elegida reina del carnaval.
No entiendo por qué prepara sus maletas, tiene un año para representar la provincia.
Su llanto me conmueve, mientras espera el camión de mudanzas la invito a tomar un café.
Quedo asombrada cuando me dice que su nombre es Sin alma, por un instante pienso que estoy siendo objeto de una broma.
No tardará en contarme la verdad, es un ser sin luz, opaco, triste, sin vida.
Trato de arroparla en un abrazo, la historia es demasiado fuerte.
Me dice que ella siempre quiso tener el brillo que tienen las estrellas cuando encienden en el cielo, el tema que le quita el sueño es que jamás ha sido sincera en ningún orden de la vida, designio que conoció al nacer, está destinada al olvido, no hace nada por remediarlo liberándose de las ataduras que la mantienen prisionera por propia elección.
Tengo sentimientos encontrados, por un instante creí que su postura podría cambiar para acceder a una vida común, una vida que le permitiera disfrutar de los episodios cotidianos.
Concertamos un encuentro para el próximo miércoles de ceniza, ella debe asistir a los festejos para entregar el cetro a quien la sucederá.
La despido con un abrazo silencioso, la veo partir, ruego que el año que viene tenga motivos para que su alma aprenda a sonreír y que entienda que lo importante es permanecer, más allá de parecer.


http://www.youtube.com/watch?v=Qb_jQBgzU…

SOLO RECUERDOS

Estuve de visita en la editorial de la revista que dirigí durante un buen tiempo.

Fui recibida con el cariño de siempre, con el respeto que supe ganarme en los años que trabajé en un sitio soñado.

Sin horarios.

No estar pendiente de la tiranía del reloj propicia que la imaginación vuele sin límites, pese a ello soy respetuosa de los horarios que terceros deben cumplir.

El encargado de seguridad me recibió con alegría, cortó un ciclamen para mi deleite, desde siempre todos supieron que una de mis debilidades son las flores, la otra es sabido que contar o escribir jugando con las letras.

La investigación, la búsqueda de una nota posibilitó que conociera diversidad de paisajes.

Viajes que me llevaron a conocer otros mundos.

Viajes de trabajo en los que supe dividir el tiempo para disfrutar de la majestuosa belleza de tantos lugares que he visitado.

Ríos caudalosos se llevaban con velocidad todos los pensamientos que opacaban o por ,llo menos intentaban quitarle luz al alma.

Luz que fue mi compañera gran parte del trayecto.

Viajes en los que jamás hubiera imaginado utilizar una balanza para pesar lo bueno y lo malo, la intuición logró que aún en los campos más adversos encontrara algún detalle que los hiciera placenteros.

Sin quererlo conocí los sentimientos más bajos que acechan al ser humano.

Sin quererlo lloré lágrimas ajenas, salí de todos esos episodios fortalecida.

Fui guerrera de las palabras, impuse pausas cuando el desborde de los otros intentaba aniquilarme.

Tuve siempre presente en la memoria el resurgir de las cenizas del Ave Fénix.

Nada es tan malo ni nada es tan bueno como para opacar con destellos fugaces la memoria.

Memoria que siempre está en estado de alerta, memoria que no confía en las adulaciones que solo embriagan por un instante..

Instante que se pierde en caminos insondables cuando falta una cuota de ecuanimidad de fortaleza, de aceptar la realidad aún cuando sea una dolorosa experiencia.

Hoy muchos de mis ex compañeros están gozando de sus merecidas vacaciones, los que esperan han podido llevar a sus hijos a la editorial.

Mientras espero la hora del almuerzo para reunirme con mis pares, admiro el paisaje, todos los días la naturaleza me brinda algo nuevo, ello sirve para regar con conocimientos la memoria.

Dos niñas están conversando mientras juegan, no es mi intención dispersarlas, me asombra el nivel que tienen para adecuar cualquier situación a la edad que tienen, son nenas que para sus interrogantes siempre encuentran la sencillez de una respuesta.

Tienen la sabiduría propia de todo aquel que no está contaminado  por hechos pasados, presentes o futuros.

Conversan sobre parásitos, al principio pensé en clases de biología pendientes.

Nada de eso, se referían a los seres humanos que en lugar de permanecer prefieren ser sin tener en cuenta quien queda en el camino.

Esas pequeñas no entienden la ternura de mi abrazo, en el que va implícito mi agradecimiento, esas dos nenas sin quererlo ni proponérselo me otorgaron una lección de vida.

Si quieres llegar y que te recuerden no olvides la palabra sabia de los más chicos.

http://www.youtube.com/watch?v=BOCKYL8CNxc

LENGUAS DE FUEGO

Diariamente camino por la playa, el clima en esta época del año permite que lo haga a cualquier hora.

Me gusta caminar apenas el horizonte se viste con las luces del alba, el entorne luce majestuoso.

No se puede explicar con palabras los colores que adquiere el cielo, rojizos, anaranjados, algo de gris que proviene de la noche a punto de escaparse a vivir su propio sueño.

Observar al sol emergiendo desde las profundidades del océano es un espectáculo majestuoso.

Pudoroso muestra la mitad de su rostro dorado, en pocos minutos se elevará para continuar el ciclo de la vida.

Los enamorados suelen quedarse hasta esa hora contándose sus secretos, renuevan caricias para continuar el día.

Casi siempre dejan una fogata que los proteja del frío intenso de las noches australes, noches diferentes, no son azules  potentes, tienen claro oscuros que otorgan estas latitudes.

Tengo por costumbre apagar cualquier vestigio de fuego, cuido la vegetación que viste a los fiordos, gigantes  suelen sumergir sus imaginarias piernas en las profundidades del agua.

Creí que estaba sola para llevar a cabo mi rutina cotidiana.

Algunas lenguas de fuego aún se elevaban indecisas.

Pude observar  la figura de una mujer, imposible calcular a edad.

Oculta detrás de una roca pude oír toda la conversación que mantenía con el fuego.

Pronunciaba palabras cargadas de una falsa dulzura, no tenía dudas que se asemejaba mucho a seres humanos que había conocido.

El fuego cansado de tanta charla la invitó a volver a la hora del crepúsculo.

La curiosidad me invadió, quería saber quien era la mujer de eterna sonrisa.

Mientras esperaba que el universo se vistiera de colores magentas, violetas y morados, volví a salir.

Otra fogata apenas encendida, la mujer sonriendo pese a que algunas lágrimas bañaban su rostro.

Desde mi refugio pude saber que era la representación de la mentira.

¿Cómo no me di cuenta antes?

Su monólogo era inquietante, en tramos perverso.

El fuego no necesitó demasiado para encenderse, la brisa hacía remolinos con la arena, figuras fantasmagóricas ascendían al cielo.

Por un momento pensé en auxiliar a la mujer, no pude o no quise o tal vez los tiempos no daban.

Nunca  antes había visto tan de cerca la geografía de la mentira.

Muda escuchaba el silbido del viento, en un instante las lenguas de fuego alcanzaron a Mentira.

Sentí piedad, rogué que su ascenso a los cielos fuera tranquilo, tan tranquilo como para propiciar el nacimiento de una nueva vida, sincera, tolerante.

Nada de eso ocurrió, las cenizas de  Mentira nunca tomaron vuelo, las cenizas murieron en la playa ahogadas por la eterna danza de las olas.

http://www.youtube.com/watch?v=auRUxPPqDcQ