PREMIOS Y LÁGRIMAS

Como redactora de la revista que dirige, Marcia hacía meses que tenía una idea para que la última edición tuviera una tirada que superara las expectativas del año anterior.
El mapa de ventas había crecido considerablemente.
Había llegado la hora de invertir para que la revista siguiera al tope de las publicaciones de papel.
Se abordaban temas de interés general, más el pedido de los lectores que la seguían desde una década atrás.
Para esta ocasión los preparativos comenzaron casi al inicio del año.
La consigna era premiar a escritores noveles con el propósito de difundir su obra.
El trabajo de selección fue ardúo en las distintintas sucursales latino americanas que concurrirían al evento final.
Todas las naciones estarían representadas.
El grupo de notables era reconocido a nivel mundial .
Durante meses leyeron poesías y cuentos, los nominados viajarían al sur argentino, sus obras serían publicadas, promocionadas a través de la editorial.
El tema era libre, ello propiciaba obtener cantidad que no es sinónimo de calidad.
Marcia leía cada trabajo elegido, eran perfectos.
No contaba con la sorpresa, a último momento llegaría a sus manos la obra de alguien a quien por prudencia no le colocaría género.
Los trabajos no eran malos, había que pulirlos para evitar las palabras que pudieran dañar a los millones de lectores que votarían registrándose en un sitio de la revista.
Pese a que el público tendría la última palabra, Marcia quiso traer de una ciudad lejana a alguien que merecía una oportunidad
Guillermo el dueño de la revista se opuso con tenacidad, la editora redobló la apuesta.
Fundamentó su pedido en aquello que todos, como seres humanos merecían participar, ella se haría cargo de la estadía de ese ser especial, estaba segura que podía hacerle mirar a aquel o aquella que está peleado con la vida que siempre hay tiempo para rectificar.
Guillermo dio por finalizada la reunión.
La editora envió los pasajes, incluían el alojamiento en un sitio soñado.
Personalmente recibió al personaje en cuestión en el aeropuerto.
Difícil definir a un ser que no tiene piedad, está acostumbrado al insulto chabacano, lo más triste es advertir que solo pelea con sombras que no existen en la realidad y son producto de una mente enfermiza, manipuladora que utiliza cada palabra como un puñal que no llega al objetivo elegido.
El edificio donde se llevará a cabo el evento ha sido restaurado, se cambiaron los panes de césped que la nieve había quemado meses atrás.
En los canteros erguidas flores muestran belleza, ofrecen diversas fragancias.
Las banderas colocadas en la entrada ondean al compás de la brisa.
Multicolores asemejan los pájaros próximos a desplegar sus alas surcando cielos diáfanos e infinitos.
Las autoridades se han colocado frente a la mesa en las que se apoyan los trofeos.
Bellos pájaros de cristal simbolizan las letras.
Música suave anima el festejo.
El escribano es aplaudido como si fuera una estrella más, en sus manos trae los sobres que traerán premios o lágrimas.
Aplausos para los galardonados, Marcia está ubicada al lado del ser que inivitó, la furia se convierte en vendaval al no recibir nada.
Arrasa con todo lo que tiene a mano, insulta con palabras que nadie hubiera querido escuchar, muestra sus miserias, se victimiza, vuelve a agredir a los asistentes, al jurado, a los premiados.
Marcia trata de tranquilizar a ese ser atormentado,que ha sembrado sentimientos encontrados.
Solo le dice: En tus manos tienes la posibilidad de cambiar, pronto tendrás otra oportunidad, diseña tu mundo, no lo hagas a tu imagen y semejanza, sufrirás,para llegar solo deberás aprender a conjugar el verbo compartir.

http://www.youtube.com/watch?v=THV0nfIHV…