Mi vida casi siete meses de ausencia producen en mi alma un dolor desgarrador,orfandad de besos dulces y cariñosos, esos besos que solo pueden intercambiar madre e hijo.
Abrazos que mueren en la nada, el destino decidió que nadie los recibiera.
Tu recuerdo es una constante en este corazón dolorido que a veces late de una manera que ouede ser escuchada por quienes me rodean.
No estoy sola, mi familia chiquita siempre está y aún no encuentro la manera de agradecerlo en su total dimensión. Repito siempre que daría aquello que no poseo para tenerte un instante tomado de la mano, sentir tu calor, tu sonrisa iluminado cada momento de esto que dejó de ser vida en el preciso instante que tus ojos se cerraron para siempre.
Quedan grabadas a fuego en mi mente la última palabra que pronunciaste, ese mamá tan dulce que la eternidad me impediría volver a sentir.
Imyyp que desde entonces los ángeles despelgaron sus alas para contenerte en el camino que te llevaría a yu última morada.
Dicen que todo sucede por alguna razón en especial sin embargo una madre jamás entenderá la partida temprana de un hijo, es por ello que siempre repito que los hijos no deben morir.
Quisiera volver a secar tus lágrimas cuando una travesura en bicicleta lastimaba tus piernas,
Los recuerdos se arremolinan vertiginosamente en mis pensamientos, no quiero que ninguno se escape.
Vivimos demasiado en poco tiempo.
Todas las madres aman a sus hijos no todas tienen la suerte de lograr la empatía que yo tenía con vos.
Me resisto a hablar en tiempo pasado por la sencilla razón que estás presente en mí.
Solo deseo que cuando sea el momento poder reconocerte en la cara de tantos ángeles que viven en el cielo.
Sé que así será, te veré en una hamaca, sostenidas por cuerdas de las flores que tanto ye gustaban.
Ignoro cuanto tiempo debe pasar, solo te pido que jamás olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=39DNaNAMKAU
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