SUEÑOS EN EL CIELO

Mi cielo vafa fía que pasa mi vida sin vos se asemeja a un calvario lleno de espinas.
Filosas espinas que desgarran el alma.
Como en los cuentos de terror que te gustaban el final es espantoso.
La enfermedad gue impiadosa, en pocos días te arrancó de mi lado, te vi padecer, soportar los exámenes que en nada ayudarían a una curación sino todo lo contrario,
Debilitado el organismo no respondía a ningún tratamiento así fuera el más invasivo, a medida que perdías fuerza trataba de transmitirte las mías contándote anécdota de cuando eraspequeño y saludable.
El dolor no pudo opacar tu brillantez innata, la tristeza de tus ojos tan enormes como bellos reflejaba el final que nadie quería.
Los lazos tan profundos que nos unían presentían el final inminente.
Con un hilo de bos me decías cyánto me querías.
Todos los hijos aman a sus madres, sin embargo nuestra comunicación eran distinta a cualquier otra tanto es así que en estado de coma pocas horas antes de irte dijiste que vivías con tu mamá, con la voz más dulce que cualquier ser humano pueda imaginar, era la voz de quien pronto se convertiría en un ángel.
Reprimí el llanto hasta que los médicos certificaron que te habías ido a los brazos de ese Dios en el que creías de una manera particular.
La mañana helada de agosto no pudo congelar mis lágrimas, rodaban sin cesar por mi rostro.
Mi vida se que mi llanto te lastimaba,
No puedo evitarlo.
Hace pocos dúas pude recordarte sin llorar estaba acompañada de una amiga a quien quisiste mucho,
Fyíste vos quien me dio fuerzas para que hablara sin la voz quebrada por las lágrimas, M trataba de disimularlas.
El dolor cada día se agiganta, ña ausencia es más notoria,
No es cierto que Dios me dejó aquí para cumplir una misión, la mía era cuidarte siempre.
Soñaba con traerte de vuelta a casa, no me importaba si era con el sostén de una silla de ruedas.
La fuerza del cariño mutuo ayudaría a tu recuperación.
El destino tenía preparada otra jugada maestra, dejarme sin vos aún a sabiendas que en soledad no soy absolutamente nada.
Sueño con nuestro encuentro en el centro del Universo, cada uno sentado en la arista de las estrellas más brillantes que estoy seguran acompañan ña eternidad de tu sueño.
Quiero, ansío que llegue ese momento,
Daría lo que no tengo por volver a abrazarte, mirarte como otras madres miran a sus hijos, como antes entendernos con un solo gesto.
No sé si falta mucho o poco, mi mayor anhelo es sentir el calor de tus manos, el sonido de un beso.
Siempre me pregunto si habrás sabido de la inmensidad de mi cariño, es algo que me desvela.
No me embarga el sentimiento de culpa, llos dos nos quisimos con amor de madre e hijo que afrontaban todos los temas.
Aún el las pequeñas divergencias el amor decía presente.
Por ello en cada letra que te dedico te pido que más allá de cualquier circunstancia nunca olvides cuanto te quiere ti mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=D5wJEqlediM