Buenos días
ser de luz.
Estoy en uno
de los lugares preferidos de mi refugio.
Si
estuvieras aquí, exclamarías con esa sonrisa hermosa, irradiando luminosidad,
estás en tu propio bosque.
Es cierto,
la tierra fértil más tus manos han hecho crecer las plantas de manera
considerable.
Mantengo las
hojas del ventanal abiertas.
El frío de días
anteriores ha huido.
Helios
filtra sus rayos dorados otorgando a las hojas nuevas un brillo especial.
Desde tu
ausencia a este espacio le llamo ventana al cielo,
La visión es
perfecta.
Sobre el saliente de la ventana coloqué un florero
de cerámica blanca.
No tiene
flores por ahora.
Seguramente
más tarde estará igual a su germano que
se encuentra a la derecha, conteniendo un ramo de flores de color azul.
Son especies
de mi jardín cultivadas por mis manos que deberían acariciarte cada mañana
cuando te despertaba con un beso.
De algo tan
sencillo he sido privada.
Ayer vino mi
estilista de siempre.
Si bien no
tenía el cabello largo, no era el corte de siempre.
Sucede que
los salones de peluquería fueron de los últimos en abrir sus puertas.
Muchos
atendían con las puertas cerradas.
En este
aislamiento sin fin concurrí a dos.
Como bien imaginás
no quedé conforme en ninguno,
Desde tu
ausencia me atiende en casa la misma estilista.
Conoce mi cabeza
tanto como yo.
Es madre de
un futuro filósofo por ello entiende como nadie el sufrimiento de no tenerte.
Hemos
trabado una linda relación.
Tratamos
temas profundos.
Ella como
otras personas desea lo mejor para los dos.
Le contaba
que cada noche te espero en mis sueños.
¿Por qué no
puedo verte como antes?
¿Tan lejos
estás?
¿Sabías que
quiero estar allí desde siempre?
De tanto
añorar una quimera no se transforma en realidad.
¿Sabrán
quienes me mantienen cautiva es temerario pagar culpas por episodios no
cometidos?
Cuando no me
siento del todo bien me digo a mi misma “ Qué
suerte ha llegado mi hora de partir”.
Utopías que
ni desean ser parte de esta realidad.
Si alguno
supiera el daño que produce el silencio supiera de sus consecuencias no
propiciaría, el absurdo que solo sufre quien lo recibe.
El viento se
lleva las palabras que no se dieron.
¿Hubo alguna
entre nosotros dos?
De haber
faltado alguna, hubieras contado cual es.
Una de tus
más sanas costumbres era señalar con prudencia extrema el error que se comete
sin premeditación.
Siempre
buscábamos la raíz del problema para que nada empañara la más hermosa relación
que nos tocó compartir en la brevedad del tiempo de aquello que difícilmente se
repetirá, en esta u otras dimensiones.
¿En cuál
estás?
Conociendo
tu alma sospecho que tantos meses de aislamiento no te tranquilizarían.
Se perdió demasiado
tiempo en banalidades.
En intentar
mostrar al mundo que éramos los mejores.
¿En qué?
¿En disponer
del tiempo de los demás?
Ayer escuchaba
a un delincuente que vive del porcentaje que cobra de los planes que se les da
a los más humildes.
Duce ser abogado.
Según su óptica,
ocupar tierras de terceros no es lo mismo que usurpar.
¿A quién
desea engañar?
Mi cielo
cuando me toque emprender el último viaje, quiero hacerlo desde aquí.
No quisiera
estar en ninguna institución médica sino en casa, rodeada por mis cosas.
Las que
supimos cosechar.
A Selene no
le gusta hable de ese tema que le parece remoto.
No lo es.
La muerte
está acechando en cualquier parte.
Desconozco
más detalles.
Solo sé que
cumplirá con mi pedido de incineración.
Puede ser
que nos encontremos alguna vez.
Por ahora
abrigo esa ilusión que permitirá darte todos los besos que tengo guardados y
estar juntos en otra dimensión donde ansío los finales no existan.
Te amo.
Te extraño
de manera irracional.
He de
pedirte una vez más, nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=mmbTHgFlvLI
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