Hijo de mis sueños llevo en mis retinas cada una de tus imágenes.
Jamás me cansaré de mirarlas.
En ocasiones creo estar entre la delgada línea que separa la cordura de la locura.
Sabées que a diario las miro les regalo caricias que se pierden en el vacío misterioso de no tenerte a mi lado.
Aún cuando no lo creasa las fotografías parecen diferentes pese a ser las mismas de siempre.
Mi corazón de madre percibe que los rasgos de tu rostro cambian y en esta desesperación que produjo tu ausencia que puedo o creo ver que la profundidad de tus bellos ojos pareciera que cambiara y con más ternura ruegan que pueda encontrar la paz que se niega a acompañarme.
Siempre fuiste un muchachito adorable, tu mirada tenía la capacidad de transmitir los más bellos sentimientos que afloraban entu corazón magnánimo o bien mostrar una dureza compasiva cuando algo no era de tu agrado.
Si tuviera que definirte cin pocos adjetivos no dudaría en decir que eras puro sentimiento.
Sentimientos que no solo notaba to sino aquellos que alguna vez te amaron y sabían leer el fondo de tu corazón.
He conocido chicos de tu edad pero ninguno capaz de transferir con la mirada auelllo que sentía.
No eras perfecto como no lo somos ninguno de los terrenales que habitamos la tierra sin embargo tus ojos decían todo sin necesidad de pronunciar una sola palabra.
No niego la existencia de otros humanos con las mismas cualidades simplemente expreso que no tuve la oportunidad de encontrar a alguien que fuera tan expresivo como vos.
Ese virtuosismo que no tengo duda exista no he tenido la oportunidad de encontrarlo.
Te extraño como jamás pensé se pudiera pensar que ocurriría.
Solo los seres dotados de la magia de esa luz puedebn parecerse a vos.
Camino por cualquier parte buscando tus ojos, solo siento horror y una pena inconmensurable cuando un latigazo imaginario lastima esta soledad que no deseo y me devuelve a la realizad logrando que aumente la intensidad del dolor de tu ausencia inexplicable.
Suelo conformarme pensando que fuiste elegido para acompañar a Dios en los caminos celestiales,
De ninguna manera conformarse es aceptar no tenerte.
Quizás la sabiduría inexorable del tiempo me enseñe a comprender la existencia de otras vidas cstos misterios el humano no ha podido reconocer.
Tal vez el dolor que después de más de un año no encuentra respuesta me indique que debo elegir de todos los caminos conocidos el que lleva a la resignación.
Por ahora hijo de mi vida no está en mis planes encontrar ese sendero que pocos tienen la posibilidad de transitar.
No creas que espero tu regreso pues tengo asumido que eso es una utopía que jamás se convertirá en realidad tangible.
Como una fiera enjaguada que necesita estar en su hábitat salvaje se que mi única esperanza es volver a reencontrarnos.
El camino es largo y tortuoso,
Muchas ves me siento como un inválido que con ansiedad esperar volver a caminar y con esfuerzas logra su cometido.
Siento que el tiempo logrará liberarme de los escombros que hoy me ocultan y sin invisibles abte la insensibilidad vestida de egoísmo que no les permite ver más akká de algún interés mezquino.
No quiero tener la potestad de juzgarlos, no es mi tarea descalificar las miserias humanas, cada quien sabe que un Ser Superior a su debido momento será quien juzgue la palabra pronunciada con desdén que lleva al destrato involuntario.
Mi único sueño es encontrarte más allá de la eternidad del tiempo.
Estoy segura que tu luz será tan poderosa para impedirme que equivoque el camino, lo demás es invisible a la vista cuando se ha perdido al hijo que durante nueve meses estuvo dentro de nuestras entrañas.
Ante el misterio de la cida lo demás carece de importancia,
Confío en vos y en algún momento compartiremos os destellos de la misma estrella titilando en el cielo.
No importa cuanto tiempo insuma volver a tenerte entre mis brazos.
Mientras esperamos que ello ocurra solo te pido que jamás olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=3VSQbGVHXlc
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