FLORES PARA TU ALMA

De acuerdo a la religión judeocristiana el alma, del latín ánima es la que poseen todos los seres vivientes, pertenezcan al reino humano, animal o vegetal
Se afirma que Dios la creó durante el Génesis con el objetivo de multiplicar los seres vivientes.
Para ese entonces no tenía morfología asignada,
Se sabía que cada ser vivo poseía alma.
Los avances de la fisiología y neurología, indicaron que en el alma nacen los sentimientos, los gustos, las atracciones, entre otras actitudes que poseen los seres vivos.
Todas las religiones aceptan el alma cono el motor de cualquier ser que tenga vida propia o ser viviente.
En Grecia los pensadores como Aristóteles o Platón tenían idéntico concepto para identificar el alma.
Agregaban que aquella se perdía cuando la muerte llegaba, produciéndose la famosa migración de las almas a otras dimensiones.
Sé que tu alma no solo es investigadora sino andariega y al dejar suelo terrenal, nadie la retuvo en la tierra para incomodarte,
Tu alma se elevó junto al espíritu de un ser valiente, al que hoy se me ocurrió colocarle flores para un alma valiosa, solidaria y pletórica de luz.
Conociéndote inquieto, intuyo que tu alma también es viajera.
Quizás un pedacito de ella, quedó aquí en la tierra para que pudiera enlazarla con lazos muy fuertes a la mía.
Hasta encontrar un tallador que pudiera hacer su trabajo en mi alma, propiciando de esa manera que sigas elevándote hasta la eternidad.
Muchas veces me pregunto si será fácil nuestro reencuentro.
Me han dicho quienes estudian Teología que son nuestros seres queridos quienes nos reciben en ese otro plano al que quiero llegar con el único objetivo que me cuentes tus travesuras de estos casi más de dos años.
Necesito comprender que te has adaptado a tu nuevo hábitat.
¿Tendremos lugar para los dos?
No te preocupes por estas lágrimas que derramo mientras escribo.
No puedo evitarlas cuando recuerdo que ayer con muchísima crueldad me dijeron “Poe más que llores tu hijo no va a volver”
Enriendo que es así, pese a ello considero que nunca se deben perder las formas, menos al hablar de algo tan delicado como es la muerte de un hijo.
Desde siempre supe que los muertos no regresan cuando se van.
Hay que cuidar el lenguaje cuando se hace referencia a algo tan sagrado como es la pérdida del ser que más se amo.
En ese momento sentí tus alas tibias desplegadas en la ternura de un abrazo.
Como antes me pediste “No llores má”.
No puedo prometerte que no lo haré, es una manera de desahogar la angustia que me produce la violencia verbal.
Me hacés falta. Con vos era todo más fácil.
Tenías el don de desdramatizar cualquier situación,
Te amo, por ello vuelvo a pedirte que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=8WA3L0ffe2Q