FOTOS DEL PARAISOO

Desde donde estás tu visión es igual a la mía.
Entre las piedras aparece la figura dorada de la estrella más grande del universo, emergiendo de las profundidades de las aguas.

Su destino es el cielo o Paraíso Celestial.
Dos rocas forman um espacio con el propósito que alguna de las bellas flores que descansan sobre el lago naveguen hacia él.
Promete no dañarlas con sus majestuosos destellos doradas.
Desea que algún terrenal saque una foto que mostrará cuando ascienda a los confines del paraíso.
Tengo la certeza que esa imagen está presente en tus retinas y en tu mente.
Cada una de ellas es conocida por nosotros dos.
Ahora las podés observar desde la eternidad recordando tiempo felices, no tan lejanos en el tiempo.
Si estuvieras a mi lado tomarías cualquiera de ellas para apoyarla en mi cabello y luego volverla a colocar en su lugar.
Veo tu rostro amado tal si estuvieras aquí.
Escucho tu voz con las clásicas recomendaciones respecto a las flores “No hay que cortarlas, cada una debe estar en el sitio que nació”
Es cierto lucen más hermosas y no les provoca daño alguno, tomarlas en las manos para luego dejarlas en la naturaleza.
Esta foto que tanto me emociona la hemos visto en otras circunstancias.
Circunstancias dichosas para los dos.
Infructuosamente el destino intentó separarnos.
No pudo completar su cometido en su totalidad.
No supo que el amor entre un hijo y su madre trasciende todos los tiempos.
Amor incondicional al que no le faltaba una dosis de complicidad más una pizca de amistad.
Sentimiento que traspasa las arbitrariedades por su pureza.
Una amistad sin engaños o con palabras tan dulces que denotan son forzadas o dichas por obligación.
Eso no puede denominarse amistad, sino farsa.
Es cruel cuando se caen las máscaras.
Hay que comenzar de nuevo.
Afortunadamente cuento con tu apoyo.
Con tus alas desplegadas dispuestas a sostenerme, para que pueda seguir en el mundo terrenal, sin saber muy bien por qué y para qué.
Te pido disculpas por no haberte escrito ayer.
No me sentía bien, al principio tuve miedo a lo desconocido, nunca me había pasado algo parecido.
Mirando la foto de tu pasaporte llegué al puerto de la tranquilidad.
Pensé que había llegado mi momento.
El tema es que he pedido que no sea traumático.
Te sentí a mi lado como nunca, repitiendo uno de tus famosos latiguillos “No es grave má”
Claro que no fue nada grave, sentía culpa por no haber establecido esta mágica conexión que nos acerca aún más.
Decirte que te quiero ya no alcanza, lo sabés.
En tu dimensión todos los paisajes se replican.
Conforta saber que podemos disfrutarlos en comunión de almas.
Cuando estemos juntos nos daremos un banquete de cariño como el de siempre.
La diferencia es que estaremos juntos caminando el mismo sendero.
Abrazados encontraremos idéntico derrotero.
Tesoro de mi vida, te amo como a nadie por eso siempre te pido que esperes mi llegada u no olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=uiSs459wrLM