Cielo de mi alma, sé que siempre estás a mi lado cuidándome.
Hoy no es un día como los otros por ello te pido que despliegues tus alas pata volar tan cerca como puedas de mi.
Sabés que hoy haré una visita, siempre me acompañabas vos.
Uno de los estudios tiene resultados que parecieran no ser óptimos.
No creas que tengo miedo, tampoco te preocupes, solo que desde hace días soy prisionera de la inquietud pues todo quiero conocer y no deseo que nada empañe nuestro reencuentro.
Cómo decíamos en un pasado reciente hoy es un día “ni”, no hace frío, tampoco calor.
El cielo lentamente comenzó a cubrirse de nubarrones oscuros como si quisiera acompañar mi sentir.
Desde tu partida prefiero los días en que el manto celeste se muestra diáfano, cuando ello ocurre no me canso de mirarlo pues sé que en lo más alto estás vos acompañado de otros ángeles que te cuidan y protegen para que siempre conserves tu belleza fresca y natural.
Un ángel diferente sierre irradiando su mágica luz.
Dentro de cuatro días se cumplirán catorce días de ausencia.
Ausencia que el tiempo agiganta y pese a que quiera poner distancia entre nosotros es algo que jamás logrará pues el no sabe que tu alma está pegadita a la mía tal si fueran siamesas, como en esos casos una depende de la otra,
He llegado a la conclusión que la más dependiente soy yo.
Seguramente la causa radique en que tu nueve hábitat reina la paz, los paisajes los imagino tan bellos que pocos de los excelsos pintores que he conocido lo han reflejado en sus telas.
No niego que en ciertas capillas algunos han querido plasmar los paisajes celestiales en los vitreaux que engalanan los techos abovedados jan tratado de imitarlos, por ahora solo he visto algunos con colores estridentes que a quien los observa no lo llevan a pensar que en el Reino de los cielos existan esos matices tan fuerte.
Los imagino de tonos suaves idéntico a las voces de Ustedes que no necesitan elevar la voz para ser escuchados.
Con perfumadas flores de pétalos vestidos por el rocío de las estrellas, un lugar encantador que en algún momento todos los terrenales conoceremos,
Inquieta no saber la fecha de nuestro vencimiento en la tierra, ilusiona la probabilidad de encontrarse con todos los seres que amamos en ese espacio donde no existen las miserias humanas.
Sueño con ese día, será el ansiado momento en que pueda darte todas las caricias que tengo guardadas, sonrío pensando que en algún instante dirás como antes en suelo terrenal que el exceso de mimos puede llegar a ser tóxico.
No solo me lo decías a mi sino a ese ser que tanto admiraste y te abrazaba en forma constante.
Siempre ese detalle tan significativo es tema de nuestras charlas.
No nos cansamos de recordarte, imposible hacerlo con quien tanto se amó.
Sé que en la eternidad guardarás un lugar para mi cercano a vos.
Muchas veces me pregunto hacia donde irán los besos que han muerto en mi boca pues su destinatario estaba físicamente lejos aún cuando te lleve tatuado en mi alma.
Es imposible dimensionar el amor de una madre hacia su hijo, en ocasiones me pregunto si habré sido capaz de demostrarte cuanto te quise y te querré.
Nuestra cita es en las primeras horas de la tarde, sé que estarás junto a mi ante esta pequeña adversidad.
Mientras despliegas tus alas para emprender un vuelo fugaz a la tierra, te pido que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=wcX5i0xrj0A
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