He de viajar en la máquina del tiempo con el propósito de arribar a un lugar donde también tiene espacio la eternidad.
En esta ocasión no voy a conocer a ninguna deidad, griega, romana o nórdica.
Tampoco estaré en la búsqueda de pintores, poetas o pensadores de otros siglos.
Viajaré al centro del Universo con mi vestimenta favorita que es la de una mamá que extraña de una manera difícil de dimensionar a su hijo que partió a otros planos.
Quisiera que en ellos tuvieras la posibilidad de cumplir tus proyectos.
Tenías muchos y muy buenos.
Sos un visionario.
Adelantado al tiempo que te tocó vivir, aún cuando esa vida se sesgara prematuramente, suniéndome en la peor de las oscuridades.
Sirio del que resulta difícil emerger sin ayuda extemporánea.
Quiso el destino que esa necesidad a cubrir esté en tus manos, por ello aún sigo de pié.
El Universo es una réplica del suelo terrenal, por lo tanto no me resultará una tarea excepcional encontrarte.
Tengo la certeza que el perfume de tu piel será mi guía constante.
Cuando arribe al centro del Universo estoy segura que estarás esperándome con el mismo amor de siempre.
No hará falta emitir palabras.
Como siempre nos entenderemos con las miradas.
Te pudo perdón si observaras que mis ojos se nublan por efecto de las lágrimas.
Será la reacción a la imposibilidad de darte un beso o acariciarte como en el ayer no tan lejano.
Importa que te veré de cerca.
Embellecido por las luces doradas que emanan del centro del Universo.
Regresaré a mi lugar con el alma calma por haberte podido ver.
Como tantas otras veces lloraré por no haber podido cumplir el objetivo principal, darte un beso como cualquier mamá hace con su hijo.
Pronto mi sueño se convertirá en realidad.
Te amo tanto como te extraño.
Una vez más te ruego no olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=UtB9YMn4Mis
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