TODO GIRA EN TORNO A VOS

En la estación aeroespacial está todo preparado para que pueda abordar una nave que me lleve a recorrer el Universo.
¿Te asombró el entrenamiento que he recibido?
¿Conocías mi emprendimiento?
Quiero llegar al punto exacto donde estás.
Todo gira en torno tuyo.
Pese al vértigo, nunca dudé en mi elección.
La necesidad de verte es tan inmensa que nada me asusta.
¿Podrás reconocerme?
El amor entre un hijo y su mamá, logra que todas las utopías, se conviertan en realidad.
Imagino tu rostro cuando percibiste mi derrotero.
Tengo tiempo para escribir, establecer una vez más estas conexiones mágicas.
Conexiones que solo reflejan un cariño que crece día a día.
Conexiones que traen pequeñas dosis de paz a mi alma herida, por tu ausencia, tan injusta como temprana.
Cuando termine este relato, entraré a una sala, donde junto a otras mamás nos vestiremos con el atuendo que utilizan los astronautas.
Bajo ningún concepto queremos ser como ellos.
Hombres con sabiduría y experiencia.
Queremos mostrarle al mundo terrenal que un grupo de mujeres es capaz de emprender cualquier travesía para cumplir sus sueños.
Mi traje es de color celeste.
Es un mito que sean todos blancos.
La gama de colores es tan infinita como el espacio que recorrerá, la nave de los sueños.
Todas tenemos el mismo objetivo, ver por un instante a nuestros hijos.
Quizás podremos acercarnos tanto como para acariciarlos y darles un beso.
Es triste guardarlos para una fecha desconocida.
¿En algún instante pensaste, llegaría a vos?
Anhelo que me acompaña, desde hace casi treinta y siete meses.
Cuando ví la publicación, no dudé en contactarme con las organizadoras.
Mujeres que como yo hemos pasado la más trágica de las circunstancias que el destino tenía previsto para cada una de nosotras.
¿Cómo será gravitar en el espacio?
No temo, solo tengo curiosidad.
Saldrán varias naves espaciales.
La capacidad es acotada.
Viajaremos tres madres junto a una instructora.
No podemos equivocarnos.
Tampoco desperdiciar segundos que en el espacio no se miden.
Solo sentiremos el reloj de nuestros corazones, palpitando un poco más acelerado ante la inminencia de desplazarnos entre los planetas.
Conoceremos a todos.
Desde el más pequeño al más relevante.
¿Se parecerá este viaje a los nueve cielos retratados por el poeta florentino Dante Alghieri, en La divina comedia?
Aquel quería llevar a su amor al Paraíso.
En mi caso deseo encontrar a ser que más amo en la vida.
¿Has visto desde otro lugar las estrellas y constelaciones?
Por más diminutas que sean, todas tienen una belleza especial.
¿Has tenido la posibilidad de viajar abrazo a un cometa?
¿Cuál fue tu sensación?
Tenemos muchos temas para conversar.
La tierra gira cansina.
La observamos en todo su esplendor.
Parece preocupada por los embates que a diario recibe de los seres que no piensan en el otro, no dudando en maltratarla.
Pesa más la soberbia que la razón.
Reconozco tu luminosidad entre varios planetas.
Puedo adivinar la placidez de tu sonrisa a la que sumo la belleza de ti mirada.
¿Podré sumergirme en ella como ayer?
No puedo calcular la distancia.
Atravesando cada uno de los planetas, es fácil divisar, un sitio donde reina la claridad.
Estoy segura que es el Reino de los Cielos.
Las alertas de la nave comienzan a sonar.
Una voz metálica se expresa en varios idiomas.
Cuando utiliza el nuestro, es imposible no conmoverse.
Esa voz nos comunica que podremos pasar a cierta distancia de la Esfera Celestial.
Advierte que ese territorio solo es habitado por los elegidos de Dios.
Muchos ángeles, despliegan sus alas.
Necesito creer que desean acercarse a las naves que nos transportan.
Con los rostros constritos regresan a su lugar.
El sonido del silencio duele cada vez más.
Otra vez nuestro proyecto de verlos ha quedado trunco.
Puede morir este sueño, nunca la esperanza de volver a intentar cumplir con nuestros anhelos.
Tesoro estuve demasiado cerca de tu luz.
No he podido visualizarte.
En ocasiones el destino es mezquino.
No te preocupes.
Valió la pena el intento.
¿Cuándo será la próxima vez?
Mi cielo, no tengo esa respuesta.
Tengo la certeza que puede cristalizarse en cualquier segundo de esta vida que me toca vivir desapasionadamente.
¿Sabés que te amo un poco más que ayer?
Nunca perderé la capacidad de soñar.
Menos el anhelo de verte corporizado.
Soy una mamá sedienta de ver a su hijo.
Te pido que tengas paciencia.
Prometo agotar todas las instancias para llegar a tu lado.
No me alcanza sentir que estás en cada célula de mi ser.
Tesoro como siempre te pido que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.


https://www.youtube.com/watch?v=huu8Bn4IDYc