DETALLES

Buenos días luz de esta oscura realidad.
Hoy esta conexión se establece más tarde pues tuvimos un corte de energía eléctrica.
Uno más.
Los usuarios tenemos necesidad de conocer la hora de restablecimiento del servicio para en forma coordina comenzar a dejar funcionar todos los aparatos que existen en un hogar.
¿Por qué lo hacemos en etapas?
El servicio es prestado por una de las tantas empresas dirigidas por incapaces.
Cuando regresa aquel, no toman los recaudos necesarios para no dañar los equipos de una casa.
Infinidad de veces la energía ha llegado con más voltaje del acostumbrando quemando aparatos.
¿No tienen aparatología para medir esos desperfectos?
Sí.
¿Por qué no los usan?
No debería pensar mal.
Las evidencias que no son pocas me llevan por ese camino.
Las empresas reconocen y abonan al precio actual que nunca se sabe cual es, aparatología dañada.
Solo que hay que retirar los mismos en la cadena de negocios B.
Nunca hacerlo en la cadena J pues de esa manera es a exclusivo cargo del cliente.
¿Recibirán algún retorno bendito por el beneficio que otorgan a B?
Las irregularidades ocurridas en nuestro bello país, sumada a cadenas de corrupción que nunca terminan de despedirse, me llevan a pensar no del todo bien.
Es temible la complicidad del usuario saben que fulanito vota, comprobado a nivel judicial, pero lo volverían a elegir.
No es el momento apropiado para realizar reflexiones de ese tipo.
Nuestros contactos no tienen mácula.
Para establecerlos hemos utilizado el lenguaje del amor existente, entre un hijo y su mamá.
La mayoría de las veces, por no decir siempre, palabra conectada con aquello que puede resultar espectral, me lleva a buscar entre tus cosas que siempre, formarán parte de las mías, detalles.
Pequeños o grandes.
No tiene importancia definirlos.
Nos unen más allá de la eternidad.
Son de nuestra exclusiva pertenencia.
Nadie puede vulnerarlos.
Son nuestros.
Transforman los seres en unidad.
Solías tomarme fotos de manera sorpresiva, sabiendo que huyo de las mismas.
¿Debo ocultar algo?
No.
Las vistas son el reflejo de momentos compartidos.
Verlas en soledad profundiza las heridas del alma.
Son las únicas para las que no existe sanación.
Hurgando en los recuerdos, cargué tu celular.
Necesitaba verte.
Leer tos notas pensando que podría sentir el clic de la llave para recuperarlo pues te habías olvidado de una extensión de tus dedos.
Entre fotos de la naturaleza que olían a tierra recién regada, con flores punto de abrir sus pimpollos, encontré una de las fotos que me tomaste.
En aquel entonces el rostro pertenecía a una mujer feliz por tener un hijo como vos.
Juro que nadie ha manipulado tu móvil.
No lo permito.
Es tuyo y solo podemos compartir el pasado que dejó de ser reciente los dos.
Encontré esta toma.
Comparada con la devolución del espejo cuando lo utilizo no tienen nada que ver con esta vida hostil que me toca transitar por capricho del destino y sus amigotes que nunca me escuchan cuando expreso, el suelo terrenal dejó de ser mi hábitat.
¿Por qué?
Nada me detiene aquí.
Menos la seguidilla de palabras carentes de raciocinio que dicen que los mortales debemos cumplir una misión.
¿Cuál?
¿Por qué en lugar de ser abstractos no ejemplifican para que podamos comprenderlos?
¿Mentirían una vez más?
¿Qué los lleva a subestima nuestro intelecto?
¿Creen incapaces, a las mamás angustiadas por la ausencia de sus hijos?
Ustedes nunca quebrantarán el sentimiento maravilloso que nos une, aún cuando ellos no esté ni corporizados ni visibles?
¿No advirtieron los recreamos en nuestras almas?
Como te contaba esta imagen de mi rostro está plagada de líneas que no se si otros advertirán pues al respecto nada me han dicho.
Cada una de ellas que marca mi rostro es un signo de dolor.
Un adivinador me dijo que cuando ellas se completen partiré junto a vos.
Sé como denominás a esos personajes.
Utilizas una de las palabras de nuestro segundo idioma, aceptado por la Real Academia Española de Letras.
El lunfardo define a esos personajes como “Chantas”, equivalentes a mentirosos sin intenciones dolosas.
Son soñadores de sus propios sueños.
Para identificarlos usan giros idiomáticos diferentes a los nuestros.
No son maliciosos.
Habitan el mundo de las entelequias.
Un espacio donde todo es posible.
¡Quiero estar allí para verte!
Ese ser simpático al que todos tratan con desdén, abrió el camino de mis esperanzas.
Me faltan pocas líneas en el rostro para completar la metamorfosis.
Deseo con el alma ello ocurra.
Será el momento de partir a tu lado.
¿Pueden ver esos detalles en mi cara quienes me miren?
No me perturba.
Ante la pregunta, respondiendo que solo podrán hacerlo quienes sepan mirar con los ojos del corazón.
Ignoro cual es la verdad de esta historia.
Nunca quise destacarme entre las demás representantes de mi género.
Eso lo saben quines me conocen de verdad.
No tengo motivos para aparentar aquello que no soy.
Mi derrotero sos vos.
No te preocupes, guardé tu celular en la funda que le habías comprado y la odiosa muerte no te permitió usarlo.
Me faltan algunas cosas del día de tu muerte.
Entre ellas el documento tipo tarjeta que obra en poder de otras manos.
¿Podría haberlo pedido?
Sí.
No lo hice espero un acto de grandeza de quien lo tiene.
Siempre pido ser cremada con tu documento.
Quiero las cenizas nos vuelvan a unir.
Al principio tenía tu pasaporte vencido.
Se extravió dentro de mi refugio.
Llorando di vuelta el mismo.
No quería fallarte.
Seguramente has visto en que manos está.
No son las mías.
Deberé conformarme con ser incinerada llevando en mis manos un documento también vencido de tu pertenencia.
¿Es extravagante mi deseo?
De ninguna manera.
En esos documentos que acreditan tu identidad está tu foto.
Para otros no tiene valor.
Para mi es único tener tu imagen antes, durante y después del final.
Tesoro de mi alma, sabes que en pocos días se cumplirán cincuenta meses de ausencia.
¿Cómo el destino ha sido tan cruel permitiendo estemos separados tanto tiempo?
Te extraño de manera demencial, lo sabés.
También conocés el deseo de concretar la más grande de mis utopías.
Hace un par de días conversando alguien a quien respeto, me contó que existen atajos para abreviar el tiempo de llegada a la inmensidad.
No te preocupes.
Nunca los tomaré.
Sé de tu rechazo a esas prácticas.
Jamás vulneraría tu memoria.
Impaciente esperaré mi turno para partir de manera natural.
Mientras tanto no dejaré de pedirte no olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=luwAMFcc2f8