En compañía de Laura recorrimos una pequeña exposición de flores y arte.
Las especies no están presentadas como e la conocida muestra de Escobar, cuyo predio es enorme dado que se presenta todos los dueños de invernaderos de la zona y año a año se van sumando más.
Laura tiene la particularidad de conocer casi todos los mercados de flores y aquellos que le llaman la atención por su originalidad sabe que me fascinarán.
Es la ventaja de conocer el gusto y sensibilidad de los amigos, esos hermanos de la vida que Dios nos pone en el camino.
Los artistas que se presentan a esta altura del año no tienen mucha variedad de flores pues nos estamos acercando al invierno.
Pese a esa pequeña adversidad con lo que tienen arman unos arreglos tan originales como bellos.
Laura se adelanta unos metros ha reconocido entre uno de los artistas a un amigo, mientras lo saluda quedo prendada de un macetón blanco con tres puezas de coloridas flores.
En una de sus esquinas montada sobre una estructura de caño aparece una regadera inclinada como si estuviera regando las flores.
Un juego de luces logra que el lo que debería ser agua sean pequeñas estrellas que se posarán sobre los pétalos de aquellas.
Me presenta al autor de esa obra de arte, le pregunto si está en venta, la respuesta es un no que me anuda el alma.
Nos invita a tomar un café para luego mostrarnos otras piezas de su autoría.
Mientras conversamos hago referencia a vos, ante mi emoción que se produce cada vez que te evoco, Laura continua la historia.
La actitud del artista es conmovedora.
Con los ojos velados por las lágrimas que vanamente intenta retener.
Me dice que ese arreglo es mío, personalmente lo instalará en el lugar de la casa que elija.
Concertemos una cita para el día miércoles.
Hijo de mi alma ese arreglo lo compré pensando e vos, quisiera poder enviártelo al cielo pero será difícil que lo reciban.
Lo colocaré en la parte exterior de la ventana de mi dormitorio que da al jardín.
El propósito es pedirte que cuando puedas bajes y traigas estrellas desde tu cielo para que nunca le falten a las flores.
Te prometo no esperarte despierta.
Entiendo que por ahora no me permiten verte.
Cada estrella que traigas o envíes renovará mi fe de poder reunirnos prontamente.
No quiero ser desamorada con mi familia chiquita pero cada día que pasa es más grande la necesidad de estar a tu lado.
No creas que adelantaré los tiempos.
Sé que quizás mis pensamientos van más rápidos que la posibilidad del destino para cumplir un deseo.
Te extraño y te quiero más que siempre por eso te propongo mientras esperamos reunirnos que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=PNwmHHs9N_4
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