ATARDECER

Minutos antes que el cielo se vista de rosados intensos púrpuras y magentas, salgo a caminar.
No tengo destino definido.
La idea es aprovechar la brisa de una tarde casi otoñal en pleno estío.
¿Podrías indicarme en qué sitio te encontraré?
¿Será hoy?
¿Mañana?
¿Nunca?
Con el alma estrujada por el silencio, elijo ir al bosque.
A medida que avanzo las siluetas de la ciudad comienzan a desdibujarse.
El trino de los pájaros con suaves melodías acompañian, mi derrotero.
No es demasiado lejos.
¿Recordás cuando asido de la mano te llevaba a jugar en ese lugar mágico?

Horas lejanas en el tiempo.
El perfume a hierba anticipa un espectáculo natural pocas veces visto.
La estrella mayor del universo renuncia a pintar el firmamento de colores dorados.
La fusión con la salida de la luna los transforma en anticipo de penumbras anteviendo a la noche.
El lago de aguas quietas, adquirido el mismo matiz que ahora tiene la bóveda celeste.
Algunas aves aletean al compás del silbido del viento.
¿Regresarán a sus nidos?
¿Por qué no has vuelto a casa?
¿Conocés mi sed por verte tan solo un instante?
Momento sacro propiciando la llegada a tu mejilla de ese beso que guardo en mi mochila.
Entre los añosos árboles, cuyas ramas parecieran acariciar el cielo, se dibuja el perfil de una mujer bellísima.
¿Será Eos camino a la esfera celeste?
¡Es ella!
¿Cómo he podido reconocerla?
Es simple.
Pequeñas gotas de rocío comienzan a vestir algunas flores.
¿Madre ce los cuatro vientos, se llora siempre la ausencia de un hijo?
¿Alcanzan las lágrimas para toda la existencia?
Seguramente es así.
Cada mañana despierto con el rostro cubierto de lágrimas, añorando a mi hijo querido.
¿Hasta cuando seguiré contando ausencias?
¿Por qué duelen de manera indescriptible?
¿Es necesario atravesar semejante martirio?
¿Cuáles son los cargos que podrían imputarme?
¿La pena será perpetua?
¿A quien le cuento de mi padecimiento?
¿No saben que mi hijo sufre al verme derruida?
¿No escuchan?
Ningún mortal sale ileso de semejante tragedia.
¿Cuál ha sido el error, por mi cometido?
¿Comprenderán en algún momento que no es mi deseo continuar transitando suelo terreno?
¡Eos te envidio!
Cada noche pdés reunirte con tu hijo, acariciarlo, abrazarlo o simplemente observarlo!
¿Has visto a mi heredero?
¿Pudiste contemplarlo?
¿Cómo se siente, estando en esos sitios desconocidos?
¿Podrías contarle de mi amor irrestricto?
Fijo la mirada entre los árboles.
Eos ha llegado a ese punto del universo donde todas las mamás que sufrimos la peor de las pérdidas quisiéramos estar.
¿Cuándo conoceré los días que faltan para llegar al infinito?
Pesa la espera sin sentido.
Tesoro deseo estar con vos para siempre.
En el camino encuentro demasiados escollos.
Los sortearé a todos y cada uno.
Por favor no olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=w_eoZEnS3M0