AROMA DE JAMINES

A diario trato de desenmarañar los laberintos que tengo en el alma.
En ocasiones con tu ayuda lo logro otras me siento sin poder encontrar el camino exacto por el que debo transitar para encontrar tu carita sonriendo desde el cielo como diciendo vos podés más.
Latiguillo que me repetías cuando notabas que estaba más triste que de costumbre.
Por naturaleza soy una terrenal que no reparte sonrisas, tengo mi mundo al que muy pocos tienen acceso, entre ellos cuento a mi familia chiquita.
Cuando estábamos todos me sentía protegida.
La soledad me ha demostrado algunas fragilidades que tiene mi carácter yantes de tu partida no se notaba o directamente no habían existido.
Recuerdo que muchas personas me decían tenés un carácter arrollador, avanzás sin medir consecuencias.
Sigo avanzando pero pensando y razonado un poco más.
Me gusta caminar por este sitio tranquilo.
Todas las casas son lindas, no hay edificios que impiden ver la luz del sol.
La mayoría son edificaciones bajas con amplios jardines, el césped pareciera una mullida alfombra que invita a caminar sobre ella, en los canteros las flores son un estallido de colores y fragancias.
Muy cerca de aquí existe una propiedad prolija, sin grandes ljos.
Pocas son las personas que no se detienen a ver una antigua planta de jazmines.
Como si conociera que todos van a quedar sorprendidos por la cantidad de flores que tiene.
Metros antes de llegar se puede sentir la exquisita fragancia de las flores inmaculadamente blancas.
Ello me lleva a recordar una anécdota de tu niñez,
Tenías una tortuga que habíamos encontrado en la calle, era grande.
La veías bella, preguntabas por qué tenía el caparazón de tantos colores.
Te expliquen que ese ejemplar seguramente había escapado del lado de su dueño ya que por aquel respiran y pintarlas es dañarlas.
Meses después la tortuga finalizó su vida.
Tu primera reacción fue buscar a los gritos y llorando a tu abuelo a quien le pediste que la sepultara y sobre ella plantara un jazmín.
Costó hacerte entender que no era época de jazmines.
Te conformaste con la planta que tu abuelo eligió.
Cuando encuentro algo que me gusta inexorablemente está asociado con vos.
Es un orgullo que seas mi hijo, sé que no te puedo ver, pocos saben que puedo mirarte con los ojos del alma.
Te amo hijo de mi vida, te extraño más por ello como siempre te pido que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

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