Wednesday, November 23, 2016
EL LLANTO DE UN PICAFLOR
Todas las estaciones del año tienen su encanto.
El otoño viste de ocre y rojo todos los paisajes con la complicidad de viento desnuda lentamente a los árboles mostrando troncos rugosos o la fragilidad de sus ramas descubiertas casi siempre a punto de quebrarse.
Verano, suele ser tórrido los terrenales buscan saciar el calor a la orilla de cualquier océano o bien buscar la sombra de arbustos y especies arbóreas.
Los frutos en ocasiones impiden ver el verde follaje.
Los más exacerbados regalan a la naturaleza más cantidad de aquellos que lo que pueden soportar su ramas a veces no están acostumbradas a semejante peso,
Los labriegos se levantan antes del amanecer portando canastos para cosecharlos.
Invierno suelen ser crudos, practicamos deportes invernales, nos fascina una nevada.
Las noches gélidas y despejadas agregan luminosidad al firmamento cuando se encienden las estrellas.
A finales de esta estación perdí lo más valioso de mi vida, un ser de luz nacido en primavera, la estación preferida por chicos y no tanto.
No solo florecen las especies más perfumadas sino que a diario escuchamos el trino de los pájaros.
Caminaba por la plaza y me detuve a ver un árbol repleto de flores pequeñas, posado en una de las ramas un pájaro de bello plumaje no cantaba, emitía un sonido extraño similar al llanto terreno.
Me acerqué despacio, no quería asustarlo.
Mi imaginación me llevó a compararlo con esta etapa inesperada de mi propia vida.
El hermoso ejemplar quizás estaba perdido, desorientado, desprotegido por no poder llegar a su nido.
Como aquel me siento en esas condiciones con la diferencia que no he perdido la orientación para llegar a un nido vacío que llora tu ausencia.
Ignoro si en tu nueva morada existen las estaciones que dividen el año en cuatro trimestres.
Mis sueños dicen que en la eternidad distante todo es apacible.
Ñas aves celestiales no lloran regalan bellas melodías a los ángeles que habitan ese espacio al que en algún momento todos llegaremos.
Espero tener la gracia divina para encontrarte sin mayores dilaciones.
Necesito que tus alas rodeen mi cuerpo en un abrazo gigante.
Mientras mis pensamientos vuelan hacia vos no me cansaré de pedirte que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=Es0W8gYDC6Y
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