Transito una semana especial.
Recuerdos excelentes se mezclan con otros que no debo ni quiero olvidar.
¿Sabías que el tiempo acelera su paso cuando de ausencias se trata?
¿Por qué sin desearlo debo enfrentarme a espacios no queridos?
¿No son suficientes las heridas que me han proferido?
Poco importa.
Quienes partieron hacia la desconocida como enigmática eternidad no tienen la probabilidad de regresar.
¿Es injusto?
Desde mi perspectiva, sí.
Los gratos momentos compartidos no alcanzan cuando la realidad te marca una y otra vez que los designios incompatibles del destino han elegido para mí una soledad no deseada.
¿La merezco?
No lo sé.
¿Quién pude arrogarse el mandato de juzgar a un igual?
Otro enigma difícil de descifrar.
Intento en estos días ordenar los recuerdos.
¿Podré lograrlo?
Como tantas otras cosas lo ignoro.
Solo tengo en claro que necesito a todos los ángeles que te antecedieron o precedieron en el camino.
No quiero agobiarte.
Solo expresarte que es terrible estar condenada a la soledad carente de cualquier sentido.
¿Hasta cuando soportaré?´
Preguntas sin respuesta.
Como bien imaginás, mi estilo conservador impide que tome fotografías con la nueva tecnología.
Cientos de veces tomé imágenes con una cámara profesional que recibí como regalo en una fecha muy especial.
No puedo expresar, con palabras o adjetivos entendibles, la sensación de levar a revelar las imágenes capturadas por una lente que pareciera tener vida propia.
¿Podrás recordar alguna de las ocasiones que no fueron pocas en las que retraté no solo tu sonrisa sino la profunda belleza de tu mirada?
¿Sabe el destino o quien sea que esos momentos únicos nadie me los podrá arrebatar?
Con la mueca de una sonrisa no puedo evitar rememorar un tiempo que pasó.
¿Podrías ayudarme a resolver estos interrogantes carentes de respuestas?
¿Por qué partieron hacia otros planos desconocidos por los terrenales?
¿Quién sea el hacedor desconoce el absoluto desamparo que me acompaña desde entonces?
No me alcanza mirar una y otra vez fotografías del ayer pletórico de felicidad.
¿Saben ellos que la mochila impuesta por el destino es difícil de cargar?
No es mi deseo atosigarte con tantas preguntas.
Sos el único que conoce mi verdadera esencia.
En nombre de ella siempre acudo a vos.
Es espantoso sentir el desamparo que nadie podrá ocupar.
¿Dónde están?
Quiero conocer ese mundo mágico que transcurre en otros planos.
¿Existirá?
No son suficientes las imágenes capturadas por la lente de una cámara fotográfica.
¡Los quiero tener junto a mí!
¿Es demasiado grande mi petición?
Tal vez sí.
Los senderos de la vida son tan misteriosos como injustos.
¿Por qué se han ido?
Sabe Dios que los necesito aquí.
Junto a mí, la existencia tendría otros matices, lejanos a la soledad que me mantiene como prisionera.
¿Qué me faltó hacer?
Daría aquello que no poseo por tenerlos nuevamente a mi lado.
¿No puede ser?
Como a muchos terrenales no me gusta estar sola.
Sería necia si no reconociera el aporte amoroso de mi familia chiquita.
Ellos como siempre n estas fechas me acompañan con pudoroso silencio.
Saben que no son los mejores días de mi existencia.
Recibo un amor incondicional.
Saben que te quiero tener a vos.
Sonriendo como en el ayer.
Deberé acostumbrarme a las ausencias no deseadas.
¡Qué fea sensación!
A tu lado no había escollos que no pudieran superarse con amor del bueno.
No pudo ser.
Quiero que sepas que no caigo en el abismo ancestral gracias a tu presencia angelada.
¿Sabés que sos el pilar fundamental para que siga, sin saber muy bien por qué y para qué?
Mi tesoro, te amo más allá de los recuerdos fotográficos que he capturado en imágenes.
Llega un instante en que eso solo no alcanza para seguir transitando la existencia.
¿Por qué todo sucedió así?
Lo sé.
Debo seguir esperando para cristalizar mis utopías.
Mientras el tiempo, transcurre con lentitud, solo puedo pedirte que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=X0J8bUpFjRI
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