TATUAJES MÁS ALLÁ DEL CIELO

Son tan parecidos en pensamiento y alma que cualquiera podría confundirlos con hermanos, más precisamente gemelos.
Cuentan que estos últimos tienen la particularidad de sentir aquello que le ocurre o ocurrirá al otro.
En este relato los protagonistas por ahora no se conocen.
Una hombre y una mujer al que el común de la gente diría entre estos personajes no hay ni habrá química o piel.
El destino desde su lugar sonríe, hará lo posible o imposible para juntarlos o enfrentarlos, todo ello según desde dónde se observe.
En la playa de moda, los dueños de los diversos puestos agradecen la bondad del tiempo.
Mar planchado asemejando una pileta.
Alguna ola lánguida decide morir en la playa.
Hernán ayudará con el armado de mesas.
Coloridas sombrillas intentarán desviar los luminosos rayos de Febo.
Ardiente va dando color a las pieles.
En las carpas, las familias se protegen del viento.
Eliana camina .
Deja sus pies pequeños de diosa pagana marcados en la arena.
Anteojos enormes ocultan la belleza de su rostro.
Después de ingerir un generoso café, Hernán se prepara para abrir su espacio.
Un ser superior lo dotó de magia en las manos.
Creativos tatoo se reproducen en tobillos, nucas, pechos , manos y cualquier espacio de la geografía de un cuerpo para alojar los recuerdos.
Eliana posee una silueta inmaculada, un pequeño pareo no logra ocultar la diminuta biquini ni la esbeltez de su cuerpo.
Está decidida, de las vacaciones quiere llevarse un recuerdo.
Le pedirá al artista que tatúe un cielo en su antebrazo izquierdo, deja librado a la creatividad del tatuador todos los detalles.
No siente el dolor que producen las agujas cargadas de tinta indeleble.
El tatuaje lo llevará para siempre.
Martín no ha tenido una buena noche.
El Casino hizo estragos con su cuentas, como siempre apostó fuerte, confundiendo el juego con la vida.
Repara inmediatamente en Eliana, imposible no hacerlo.
Es bella y misteriosa.
Pareciera inalcanzable.
El barman le recomienda un café cargado con el único objetivo que se despeje.
Redobla la apuesta, su cuerpo soporta un martini.
Más que pedir exige al tatuador que deje en su cuello las imágenes del tatoo de Eliana.
Esa mujer lo perturba, no puede explicarlo.
No será fácil la conquista, Eliana es hábil, jamás mostrará su juego ante un desconocido, aún cuando de sentimientos se trate.
Han pasado varios años.
Los integrantes de este relato se han olvidado de muchos detalles de unas vacaciones que los tuvieron como protagonistas.
Otra playa.
Vidas consolidadas.
Recuerdos complejos.
Corazones latiendo al unísono.
Un solo cielo para cobijar ese amor reprimido.

http://www.youtube.com/watch?v=3eT464L1YRA&feature=relmfu