Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana fría con tibios destellos de sol
iluminando todos los espacios.
Quiero recoda uno de los tantos viajes, realizados para
recorrer nuestro amplio país.
Poseedor de los cuatro climas.
Seleccioné el de hoy pues es apto para visitar en esta
temporada, dado que en verano es una zona calurosa.
En aquella ocasión viajamos en auto, con el propósito de
vivir nuevas experiencias, atravesando una de las rutas más pintorescas que
tenemos la suerte de poseer.
Viajamos en dos tramos para descansar y llegar a la Ciudad
de Oberá, pródiga en plantaciones de
yerba mate y té que se exportan en tiempos normales al resto del mundo.
Antes de llegar a esa ciudad la autopista perfectamente
cuidada, aparecen todas las tonalidades de color verde, en la vegetación.
Es necesario aminorar la marcha ya que una sucesión de
lomadas comienza en ese espacio.
Cinta asfáltica a la que vos decías tienen jorobas, en
realidad son lomadas que suben y bajan constituyendo un atractivo especial.
Eras el encargado de filmar el paisaje pocas veces visto en
otros lugares del orbe.
Deseábamos plena libertad, alejados de los viajes
contratados donde se ve tanto en tan poco tiempo, que al final del viaje queda
la sensación de haber visto muy poco.
Al conocer por otros
viajes anteriores la provincia, optamos
por o utilizar medios de transporte que insumen menos horas pero
impiden, conoce cada ciudad, con la ventaja de no tener los horarios de los
viajes contratados.
Produce orgullo, sentí la belleza de la patria en un espacio destacado de nuestros corazones.
Las lomadas del camino están rodeadas a ambos lados por
campos extensos y conjuntos de pinos de considerable altitud.
Mundo donde se puede oír el canto de los pájaros, renovando
sus melodías provocando placer ante la magnanimidad, de la naturaleza sin fin.
El tiempo estaba de nuestro lado, ello permitió los días
fueran inolvidables, en cada pueblo original.
El contacto permanente con la naturaleza, produce gratitud.
Si bien es necesario recorrer varios kilómetros, vale la travesía, sinónimo de
libertad.
Nuestro destino final, en el que pasaríamos varios días, eran las Catarates del Iguazú,
sumadas a los deportes acuáticos que
siempre fueron objeto de tu fascinación.
Nos alojamos en un hotel con piscina.
Pensamos estaría cerrada por la época, las temperaturas
altas nos obsequiaron la gracia, de
usarlas en pleno otoño.
Esos recuerdos traen nostalgias, pareciera hace poco que pasó, sin embargo tu ausencia temprana,
me traer a la realidad.
No se trató de un
viaje reciente sino que fue de los últimos realizados, meses antes de tu
partida.
A esta altura de los acontecimientos, no tengo en claro, si
es bueno o no recordar.
Parra cualquier madre, el hijo ausente está siempre a
nuestro lado.
Lo llevaremos en nuestras almas, aún cuando no podamos velos
corporizados para regalarle los besos postergados que siempre se guardan, con
la ilusión intacta, puedan convertirse
en realidad.
Destino caprichoso ante tragedias de esta naturaleza
inesperada e impensada.
Deseo con fervor aparezcas en mis sueños para contarte del
amor que has sabido inspirar.
Mi precioso ser de luz, hoy encontré unas letras emparentadas con esta conexión,
con la esperanza sean de tu agrado.
“Yo fui la más callada
Autor: Julia de Burgos
Yo fui la más callada
de todas las que hicieron el viaje hasta tu puerto.
No me anunciaron lúbricas ceremonias sociales,
ni las sordas campanas de ancestrales reflejos;
mi ruta era la música salvaje de los pájaros
que soltaba a los aires mi bondad en revuelo.
No me cargaron buques pesados de opulencia,
ni alfombras orientales apoyaron mi cuerpo;
encima de los buques mi rostro aparecía
silbando en la redonda sencillez de los vientos.
No pesé la armonía de ambiciones triviales
que prometía tu mano colmada de destellos:
sólo pesé en el suelo de mi espíritu ágil
el trágico abandono que ocultaba tu gesto.
Tu dualidad perenne la marcó mi sed ávida.
Te parecías al mar, resonante y discreto.
Sobre ti fui pasando mis horarios perdidos.
Sobre mi tú seguiste como el sol en los pétalos.
Y caminé en la brisa de tu dolor caído
con la tristeza ingenua de saberme en lo cierto:
tu vida era un profundo batir de inquietas fuentes
en inmenso río blanco corriendo hacia el desierto.”
Tesoro ha llegado el instante de decirte cuanto te amo y
extraño.
Es difícil continuar en espacios rechazados.
¡Este no es mi lugar!
El mío hace mucho está a tu lado.
Preciso escuchar la calidez y calidad de tu voz anunciando
has llegado a casa.
Anhelos que chocan con la pared sombría de la soledad.
No saber dónde estás produce angustia.
No me has relatado como es tu hábitat.
Desearía elimina tus temores.
Recrear el camino de las entelequias hasta lograr muten a
realidad.
Te amo y extraño de la misma forma.
No se vivir sin tu compañía.
Falta mi otra mitad.
Es demasiado pesada la mochila que debo arrastrar.
Es hora de conseguir la liberación parra estar juntos en la
eternidad.
Hijo querido, te pido ayuda para reunirnos en tu enclave.
Como lo hago a diario he de repetir una vez más mi
solicitud, por favor nunca olvides cuanto te quiere mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=XbGy99E0Cpw