VIDA

Buenos días cielo.
Después de muchos días grises, desapacibles e intempestivos, en el que los mortales observamos la destrucción de la vida, ha salido el sol.
Brillante colgado del firmamento añil, apareció sin ser convocado.
Conociendo, su existencia era absolutamente necesaria con el propósito de demostrar la vida existe.
No podría explicarlo con palabras.
Sentí, tal vez entre las penumbras a las que he sido condenada, sin conocer la causa, por fin aparecía
In destello dorado de esperanza.
Probablemente sea una entelequia como tantas otras que deseo se conviertan en la más dulce de las realidades.
Es espantoso desarrollar la existencia en esa oscuridad densa, donde no se sabe que podemos encontrar.
Viajé al mundo de las fantasías buscándote.
¿Podré encontrarte en esta oportunidad?
Otro dilema sin resolución.
No alcanzan mis ansias de estar a tu lado para siempre.
No un instante para verte corporizado.
Tampoco ese segundo fatal donde todo se desvanece enfrentándome con crueldad al día a día donde no deseo permanecer.
Quiero sepas mis musas dibujaron un encalve especial.
La estrella mayor del universo asomando por el horizonte.
Coloridas flores esperando para secar las esferas de rocío adornando sus pétalos.
Ellas no saben que eran las lágrimas de Eos, quien las vestían con gotas de cristal.
Quise perpetuar ese momento.
Aroma y color sostenidos en los tallos verdes para alegrar la vista de quienes no han perdido la capacidad de soñar.
Manifestación de vida.
Efímera.
Vida al fin.
Esa que no tuviste para que pudiéramos continuar asidos de la mano sin relojes marcando el destino.
No pudo ser.
Situación inesperada que me llevó a conocer el interior del volcán donde Hefesto en territorio de Vulcano afilaba en la fragua las armas que serían utilizadas en guerras por la obtención del poder.
No es nueva esa adicción.
Desde el nacimiento de la raza humana, casi todos quieren ser más poderosos.
Eliminan al adversario sin códigos.
La suma del poder los enceguece.
¡Cuán ignorantes son!
Por más que acumulen soberbia y necedad, al momento de partir se irán desnudos, tal cual arribaron a la vida terrena.
¿Qué esperan del otro?
Trato de nos escucharlos.
Detesto que ninguno haya leído a lo largo de su existencia un libro de oratoria para saber expresarse.
Son procaces,
los gestos, llegan a ser casi rayanos a la obscenidad.
¿Es más poderoso aquel que grita más?
¿Nadie les enseñó que de dos lugares no se regresa?
La muerte es uno de ellos, el otro la ridiculez.
¿Creen que de esa forma desmesurada captarán más seguidores?
Observadora de la realidad sin ser dueña de verdades absolutas, les hago llegar mi opinión.
Las actitudes comparables a un burdel si se trata de una mujer, o las de un malevo, producen el efecto contrario al buscado.
¡Rechazo absoluto!
¿No han probado cambiar el discurso por algo que intenta parecerse a ello?
¿Hacia donde dirigen sus pasos cuando tratan a la sociedad como si carecieran de neuronas?
¿Cuál es el camino de la mentira?
¿La caída veloz de las máscaras?
¿Saben que nada inspiran?
Ni rechazo ni piedad.
Querido espero sepas disculpar me vaya del eje principal de estas conexiones.
No puedo evitar reaccionar ante la necedad.
El paisaje con el so, asomando en el albur no merece me vaya con mis musas al segmento de las pasiones terrenales.
Cuando observo las flores en su total esplendor, te imagino a mi lado contemplándolas.
¿Por qué todo se hace difícil para quien sueña aún estando despiertas.
¡Deseo estés donde la vida florece!
No importa si es de una forma desconocida.
Tengo la certeza de adaptarme a las circunstancias si me premia con la posibilidad de darte un beso.
¿Por qué altiva la muerte te tomó como si fueras su presa más codiciada?
¿Necesitaban tanta luz en la oscuridad?
Mañana es un día demasiado duro para mí.
Hubieras cumplido años.
No pudo ser.
¿Quién establece esos mandatos?
¿No han comprendido a lo largo de estos casi cincuenta meses de ausencia, nunca me daré por vencida?
¿No son demasiados mil quinientos once días sin que pueda darte un beso o un abrazo?
¿No llegan a comprender que sos quien me otorga las fuerzas para seguir aún cuando deseo dejar todo aquí?
¿Cuál es mi función en la tierra?
Quiero conocer las manifestaciones de vida, en ese espacio enigmático donde te han destinado.
¿Creerán voy a enarbolar la bandera blanca de quienes se sienten vencidos?
Jamás lo haré.
Sería reconocer la muerte del ser que más amo en esta vida y en las que lleguen.
Mi hijo es el pilar que me sostiene.
Quisiera fuera el interlocutor para ayuarme a partir.
Nada debo hacer en suelo terrenal.
Mi vida a partir de tu ausencia trágica no tiene asidero, acá.
¿Por qué insten en mantenerme cautiva?
¿No he dado muestras cabales de mi no pertenencia al mundo terrenal?
¿Intentan desafiarme?
¿Por qué?
¿Para qué?
Tesoro de mis entrañas, no sé si hay vida aquí.
Necesito imperiosamente conocer esa en la que se ha convertido en tu hábitat.
¿Hay espacio para esta mamá?
Romperé los eslabones de estas ridículas cadenas.
Nadie podrá detenerme.
Te pido me esperes, también nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=h05ceOFEig4