Friday, February 17, 2017

TODOS LOS CAMINOS LLEGAN AL CIELO





Viajar en el tiempo me llevó a buscar en la biblioteca un ejemplar sobre mitología griega.
Pasé por alto aquellos con los que tuve la oportunidad de conversar cuando era transportada por la máquina del tiempo.
Comprendí que existían en el Olimpo otras deidades a las que me faltó conocer personalmente.
Nunca dejé de preguntarme quien cuidaba que llegara a destino y tuviera un regreso placentero exento de riegos para una mujer que osa viajar al pasado lejano en absoluta soledad.
Soledad ambigua dado que siempre sentí en mi alma tu compañía sagrada.
En esa instancia surge la figura de Hermes deidad griega que cuida a los viajeros, las fronteras, los pastores que transitan pir los senderos más peligrosos llevando su rebaño a destino.
También es el dios del pensamiento de la astucia, el guardián de la guerra.
Homero en su obra le adjudica otros mitos tales como apoderarse del ganado ajeno con el solo objetivo de cuidar a sus dueños.
En la mitología romana se lo conoce como Mercurio con idénticas cualidades.
El poeta griego le adjudica a Hermes un matrimonio con Iris aún cuando nunca se pudo probar su estado civil.
Un detalle que carece de importancia ya que corresponde a la privacidad que los Dioses del Olimpo cuidaban con tanto recelo que a quien pretendía perturbarla era sometido a los peores castigos.
Se le atribuye a Hermes no solo la capacidad de proteger a los caminantes sino todos los caminos por pequeños que fueran.
Solía afirmar que todos los caminos conducen al cielo.
Tuvo una vida apasionante quienes lo veneraban creían fervientemente en sus palabras.
Los detractores llegaron a tratarlo con los peores adjetivos.
Hermes un hombre astuto corresponda a los mentirosos con una sonrisa digna de quienes han sido dotados con astucia e inteligencia exacerbada.
Al tratarse de un mito las opiniones pueden ser divergentes.
Personalmente prefiero estar entre los que de haber vivido en aquellas épocas doradas de la cultura griega lo veneraban.
Mi condición de mamá que ha sufrido la peor tragedia como es perder un hijo adorado me lleva a pensar que además de vos que te has convertido desde que no estás en el pilar de mi vida para que pueda seguir sin saber muy bien para qué o por qué, alguien más cuida de mí cuando asciendo a la máquina del tiempo con el solo objetivo de verte por un instante y así poder cumplir el sueño de reflejarme en tu bella mirada.
Me costará la vida que me queda verme privada de algo tan sencillo como darte un beso al despertar o acariciarte hasta que el sueño aparezca contándote mil historias para que tus sueños sean tan pacíficos como plenos de paz y armonía.
Dentro de once días se cumplirán diez y ocho meses de tu ausencia temprana.
Es difícil despertar cada mañana sin tenerte.
Los días carecen de sentido.
No me alcanza con ver tus fotos cada día, no es justo que deba recorrer con mis dedos el monitor de la computadora para acariciarte.
Son caricias frías que no tienen la respuesta que sueño.
Los días sin vos van pasando sin la emoción de verte correr para darme un abrazo apurado.
Me perturba saber ¿Qué no hice para que siguieras a mi lado?
No siento culpa pero evidentemente algo faltó.
No sé que es u ello me produce un desasosiego difícil de explicar con palabras.
Sé que por la comunión de nuestras almas.
Comprendés mi estado de ánimo.
No puedo desearle ago tan sencillo como la felicidad a las personas que quiero pues sería una hipocresía.
Tu partida borró de mi vocabulario esa palabra.
Todas las noches le pido a Dios que me permita soñarte.
De esa manera podría cumplimentar mi más caro sueño.
Puede ser que tenga que esperar un poco más.
¿Cuánto más puede esperar una madre para ver a su hijo en estado onírico?
¿Será que Dios no me escucha?
Me has convertido en un ser paciente.
Lograste que equilibrara cin ayuda médica mis estados de ansiedad.
En ocasiones me digo a mi misma “no puedo más”
Sin embargo sigo pues abrigo la esperanza del reencuentro.
Hermes es también la deidad más antigua de los sueños.
No dudaré en rogarle su ayuda para concretar mi más ferviente deseo.
Te quiero más que nunca, te extraño cada día más.
La eternidad no puede separar a una madre de su hijo, no en mi caso específico.
Es larga y dolorosa la espera por ello siempre te reitero que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=TUGJj7mMJWc

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