Sunday, December 09, 2018

NOCTÁMBULA





Cada noche la veo caminar.
Presumo se dirige a la costa por la cantidad de pájaros nocturno sobrevolando el firmamento cargado de nubes amenazantes.
Nadie conoce su rostro.
Evita cualquier contacto con quienes vivimos cerca del mar.
Debe ser una mujer hermosa.
Posee una figura espectacular.
Viste ropas oscuras.
En su mano izquierda porta un arreglo, realizado en metal,
La forma resulta difícil de definir con precisión.
Porta en esa estructura tan singular, rosas rojas.
Algunos pétalos se desprenden antes de llegar a destino.
Decido seguirla, desde una distancia prudente.
No detiene su marcha.
¿Qué pensamientos atraparán su mente?
Da la impresión de estar demasiado sola.
¿A quién llevará las flores rojo punzó?
En pocos minutos el enigma será develado.
Continua caminando displicentemente.
Observo está descalza.
Comienza a internarse en el mar.
Acelero mis pasos con el propósito de tomarla del brazo.
Al principio demuestra resistencia.
El llanto no demora en bañar su rostro.
Sin dejar de sujetarla buscamos, un sitio donde podamos conversar.
Por fin, encontramos una roca sobre la arena lejos de las olas que no dudan en mostrar su cresta espumosa que en segundos morirá en la playa.
Le ofrezco uno de los tantos pañuelos que me regalara, debe secar sus lágrimas.
¿Por qué me seguiste?
Es su primera pregunta aún acongojada.
Necesitaba ver tu rostro.
Son cesar su llanto, expresa no desea vivir.
Poseo idénticas sensaciones,
No lo revelaré.
Pasa a contarme su historia.
Encuentro semejanzas con mi realidad,
Probablemente en algún momento pasaré a contarla.
Cuenta con la precisión de un cirujano una historia terrible.
“Caminaba con su pequeña hoja, por el borde de la playa.
Apenas dejaba el agua mojara los pies de aquella.
En ningún momento soltó las manitas de la nena.
No advirtió la marea comenzó a subir rápidamente.
Cuando quiso tomarla en sus brazos para protegerla el agua, con fuerza inusitada la arrebató de sus brazos.
La búsqueda pese a las inclemencias del tiempo comenzó inmediatamente.
Los resultados fueron infructuosos.
Durante días el cuerpo de la niña fue buscado, jamás apareció.
Todas las noches, lleva tosas rojas.
Las arrojar al mar, un símbolo que aún no puede abandonar”
No dudé en abrazarla.
Brindé palabras de aliento a esa mujer desesperada.
Nadie mejor que yo, para comprender ese momento tan traumático plagado de sufrimiento.
Cuando noté calma, la invité a regresar.
En el camino preguntó ¿Por qué tu mirada es tan triste?
Brevemente relaté tu ausencia.
Comenté comprendía su estado anímico.
Luciana exclamó ¡Creí ser la única mujer sobrellevando una pérdida tan dolorosa!
Cuando llegamos a su casa, no demoró en invitarme a pasar.
Concertamos el encuentro para otro día.
Regresando a mi refugio, mis pensamientos, como ocurre habitualmente, re tienen a vos.
¿De dónde saqué energía para ayudar a esa mujer maltratada por el destino?
Seguramente desde donde estás podés transmitir las fuerzas que no poseo desde tu ausencia.
¿En qué espacio radica la virtud de los entes que con toral impunidad nos arrancan nuestras mejores obras?
¿Tienen conciencia del dolor inexplicable al que nos someten?
¿Tiene algún sentido preguntarles?
Mi tesoro como has podido observar, esa noche el cielo cubierto por la espesura de las nubes a punto de derramar su carga, acompañó a dos mujeres absolutamente solas.
Dos mujeres que perdieron a sus hijos de manera tan temprana como inesperada.
Luciana continuará arrojando flores al mar.
En mi caso seguiré escribiendo para demostrarte lo mucho que te amo.
¿Sabés que tengo imperiosa necesidad de depositar en tu mejilla un beso?
¿Cristalizarán mis utopías?
¿Por que demora tanto mi anhelo de reencontrarte pronto?
Dudo de los milagros.
Jamás presencié la concreción de alguno.
Igual que vos, no creo en aquello que no es perceptible a la vista.
¿Considerás será posible reconozcas a esta madre?
Regresarán los días felices, con cielos despejados, surcados por coloridas aves del Paraíso Celestial.
Con alborozo los ángeles que te acompañan, unirán sus alas desplegadas como si estuvieran aplaudiendo.
No es mi intención dejar de soñar con ese momento.
Te pido una vez más, nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.


https://www.youtube.com/watch?v=MPvS0g2papI

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