RELOJ DE ARENA

Buenos días hijo querido.

Te saludo en una mañana cálida para esta época del año.

Un invierno indefinido.

Jornadas algo frías y otras propias del estío.

Todo se debe al calentamiento global.

El futuro será semejante a las puertas del averno.

Estuve caminado por varios locales de una galería  que se inauguró hace pocos días.

En sus vitrinas se pueden observar diversos relojes de arena.

Los de mayor antigüedad, tienen sus columnas de madera tallada para sostener a los dos recipientes por donde circula la arena. Marcando las horas de la jornada, fueron los primeros en aparecer, para que el hombre supiera orientarse de acuerdo a la cantidad de arena que había en el recipiente inferior.

Al mediodía cuando aquel estaba cubierto de granos de arena, era necesario, dar vuelta el reloj con el propósito, aquella circulara en dirección opuesta.

Los más  modernos contienen el elemento, de los relojes, a pedido de los clientes esa fina arena se tiñe de varios colores, eliminando su esencia principal.

Tu abuela materna tiene uno en el que los frascos están contenidos por la base y las columnas de madera tallada, trabajo de un artista quien, tallaba maderas nobles, otorgándoles un aspecto señorial.

Hoy se utilizan como adornos.

Prefiero los relojes digitales.

Salí del local sin comprar nada.

Solo de aquellas épocas so de mi agrado los relojes de pie con péndulo, cuya cuerda se activa con delgadas cadenas.

Son más bonitos que los de arena.

En el comercio pedí permiso para fotografiar uno de los relojes de arena, para que fuera la imagen de esta conexión.

Para le fecha elegí frases y citas de autores reconocidos, quienes en sus letras aluden a los relojes de arena.

Las dejo en nuestro lugar de encuentro, cotidiano, con la intención puedas acceder a su contenido.

 

““La revolución de las tallas grandes que ha estado ocurriendo últimamente es increíble, pero también está creando este «otro» estándar de belleza en el que tienes que ser un reloj de arena, tienes que ser súper sexy y feroz para mostrar tus curvas”.

Beth Ditto.

 

“Los relojes de arena nos recuerdan, no sólo cómo pasa el tiempo, sino a su misma vez en el polvo en el que algún día nos convertiremos”.

 Georg Christoph Lichtenberg.

 

“Nuestras vidas no son más que motas de polvo que caen entre los dedos del tiempo. Como las arenas del reloj de arena, así son los días de nuestra vida”.

 Sócrates.

 

 “Cuanta más arena se haya escapado del reloj de arena de nuestra vida, más claro deberíamos ver a través de él”.

Nicolás Maquiavelo.

 

“La vida es como un reloj de arena pegado a la mesa”.

Anna Nalick.

 

 “El amor es como un reloj de arena, con el corazón llenándose mientras el cerebro se vacía”.

Jules Renard.

 

 “Como un reloj de arena con una cierta cantidad de granos de arena dentro, Dios ha designado tu vida para que dure solo una cierta cantidad de días, y no tienes ni idea de cuántos hay en la presencia de Dios”.

Patrick Madrid.

 

 “No espere para decidir qué es importante y qué vale la preciosa arena en su reloj de arena”.

 J.T. Sawyer.

 

“Lo irreal es el amor que tenemos; es como mirar un reloj de arena vacío, sin principio ni fin”.

 Soroosh Shahrivar.

 

“El reloj de arena se agota”.

 Christopher Pike.

 

 “El avaro está contando sus piezas de oro, sin darse cuenta de que la muerte, tiene dos símbolos claros: un reloj de arena y una horquilla”.

 Arturo Pérez-Reverte.

 

“Tal vez la felicidad era un reloj de arena que ya se estaba agotando, los granos se inclinaban, se zarandeaban unos a otros. Quizás fue un estado de ánimo”.

Paula McLain.

 

“Para el verdadero maestro, el reloj de arena del tiempo aún debería tener polvo de oro”. 

Douglas William Jerrold.

 

 “La muerte es solo el momento en que tu reloj de arena se queda sin arena. Eso es. Le pasa a todo el mundo eventualmente. Todo lo que cualquiera de nosotros puede decidir es dónde cae la arena”.

 Ryan Winfield.

 

“Un médico a veces puede parar la guadaña de la muerte, pero no tiene poder sobre la arena del reloj de arena”.

 Hester Lynch Piozzi.

 

 

Tesoro de mi existencia solitaria, te amo y extraño cada día más.

¿Podrías llevarme con vos?

Recuerda mi querido ser de luz y amigo más fiel, deberás pasar nuevamente por mis sueños.

Es la única posibilidad que poseo, para entregarte todos los besos, que tengo acumulados para vos.

¡No permitas marchiten!

Te pido ayuda para cristalizar la utopía de estrecharte en un abrazo sin fin.

Mis manos reclaman reiniciar las caricias interrumpidas por el autoritarismo del destino en complicidad con Cronos, representante del tiempo.

En el viaje de regreso deseo acompañarte.

Ha llegado el momento de construir mi morada, en una estrella cercana a tu hábitat.

Carece de sentido estar en suelo terreno.

Es muy difícil estar en un espacio donde no se desea permanecer.

He cumplido con todas las misiones encomendadas.

Nada me ata a este suelo tóxico.

¿Qué hice mal?

¿Qué más debía hacer?

¿Cuándo vendrás en mi búsqueda?

¿Hasta cuándo permaneceré cautiva en la tierra?

¿Nadie conoce que el espacio de una madre, está junto a su hijo querido?

Te acuné en mis entrañas, durante nueve lunas y sus soles.

Jamás pensé tu estadía en la tierra fuera tan efímera.

¿Por qué si estábamos juntos, no nos llevaron a los dos?.

Es una crueldad despertar cada mañana sin tenerte?

¿Saben esos entes el significado del amor más puro e incondicional?

Preciso como el agua estar a tu lado, otra vez.

¿Alguna vez sintieron empatía hacia el hijo deseado y querido?

Mi ángel guardián, como todos los días, he de reiterar, mi pedido, generado en el amor que supiste sembrar en mi ser, por favor nunca olvides cuanto te quiere,

Mamá.

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=R4qKqVgZoJ0&t=33s