Tuesday, November 06, 2007

LISTA INTERMINABLE

Desde lejos no se ve, pasé por aquí y se me ocurrió saludarte, no me ves, soy parte de una lista que integran miles de nombres, mi papá me dijo que todos esperamos tu voluntad.
La verdad no le entendí mucho porque soy chica, pero hay otros que son más grandes que yo.
Para la sociedad somos un número, pero no creas que somos fríos, a mi me gustaría estar en mi casa jugando con las muñecas, pero no puedo.
Otros señores y señoras pasan las mismas penurias que yo.
Ayer escuché a un médico decirle a mi mamá que si no llega un corazón para transplantarme mi vida se apagará inexorablemente (esta palabra tan larga me la enseño mi abuelito).
Soy chica, dicen que me iré junto a los ángeles a jugar en el cielo.
Te cuento a mi me gustaría quedarme acá, jugar con mis hermanos.
No me gusta que mi nombre lo hayan cambiado y ahora sean dos letras, NN, peor ser un número.
Estoy en un lugar lejos de mi casa esperando, espero que alguien se acuerde de darle comida a los pajaritos que tengo enjaulados.
Ellos me despertaban por la mañana, un día me enfermé y no pude acudir a la escuela, me dolía el pecho, creí que era por querer a tanta gente, pero no, mi corazón estaba cansado, se negaba a latir dentro de mí.
No quiero que mis papás se entristezcan, necesito que me ayudes, mi mamá me dijo que para que me sane deberá partir otro niño, eso me asusta.
Estoy en una habitación muy fría, me colocaron un barbijo, apenas puedo caminar, cualquier cosa me agita.
¿Sabés una cosa?
Hoy estuve con una señora, como yo estaba en una silla con rueditas, tenía todo el cuerpo amarillo, pero igual esperaba una órden de no se quién para curarse.
Me contó de sus nietos, tienen mi edad, ella les cocinaba cuando llegaban de la escuela, los amaba, uno de sus hijos pidió dar una parte de su cuerpo para que la abuelita siguiera viviendo.
Unos señores se opusieron como si fueran dueños de la vida o de la muerte.
Todas las noches rezo, por mi y por ellos, o por ellos y yo.
En tus manos está la decisión, para que yo y muchos dejemos de ser un número, tengo un nombre bonito, no te voy a decir cuál es, puede ser cualquiera.
Mi papá me regaló un osito de peluche, con él me divierto.
Anoche soñé que para todos los que estamos en este edificio tan lindo que tiene un corazón en la puerta, llegaba la solución.
Dale, vos podés, pensá en que todos los que esperamos, queremos seguir disfrutando de la vida, cerca de Dios, por ahora no quiero volar al cielo.
Gracias soy un número, aún me queda un suspiro, te lo regalo.
Ayudame.
Miki

No comments: