ALPES JAPONESES

Buenos días hijo querido.

Te saludo en un día invernal.

En ciertas provincias del país ha nevado.

No solo en nuestra  querida Ushuaia sino en las meridionales de nuestra querida patria, tan maltratada por algunos funcionarios, quienes solo por redito político no permiten su generoso suelo,  sea trabajado para extraer del fondo de la tierra las riquezas que guarda.

Tenemos el segundo yacimiento más grande del mundo de gas no convencional, del que se extrae petróleo.

Los famosos intereses geopolíticos, mantienen paralizadas las obras y el trabajo para importar a precio internacional gas y petróleo de países centro americanos.

Vivir con lo nuestro sería beneficioso para todos, excepto para algunos negocios.

Sigyenlos cantos engañosos de las sirenas respecto a las vacunas.

Se han perdido demasiadas.

Festejaron como si hubieran escalado el Himalaya la llegada de la vacuna veinte millones.

Alguien debería avisarles, faltan cerca de ochenta y ocho millones para vacunar a toda la población.

Esa parte no se cuenta.

Hoy comenzaron las clases en la Provincia de Buenos Aires.

No porque quisieran sino que las encuestas electorales no arroja los números esperados.

¿Podemos viajar juntos a la isla de Japón?

Nos encontraremos en algún lugar del universo.

Allí abordaremos la máquina del tiempo.

Esta vez cumpliré mi sueño de darte un  beso, al que seguirán, michos otros.

En esta ocasión no solo caminaremos por las calles bordeadas  con árboles de cerezo. Con sus flores delicadas.

Recibiremos el estío en esa isla encantada.

Viajaremos hasta, los alpes  japoneses que dividen la isla de Nagano.

Por suerte el monte Fuji, no está en erupción.

La última vez que despertó fue en el año dos mil catorce.

Hubiese sido una conmoción verlo activo, arrojando al viento cenizas y al mar, ríos de lava rija encendida-

¿Estará Hefesto afilando las armas en la fragua, colocada en  las entrañas del volcán?

Los picos montañosos llegan a medir hasta tres mil doscientos metros.

En la temporada veraniega los escalamientos, alegran a quienes practican el alpinismo.

Otros, deportes acuáticos.

Por la falda de las montañas se deslizan plateadas cadenas de agua alimentando el espejo de agua, en esta temporada sus aguas son peligrosas.

Es todo tan ordenado,  nada queda librado,  al azar.

¿Te parece saciemos nuestra sed en ese pequeño restó, debajo de sombrillas de paja?

Para acompañar las bebidas, nos traerán exquisitos

bocaditos. Recién preparados.

Hace mucho no compartíamos,  un aperitivo juntos.

Noto tristeza en tu bella mirada:

¿Querés contarme qué te pasa?

Produce angustia el velo de lágrimas a punto de caer por tu rostro amado “Te extraño mamá.

Me duele no poder contestarte todas las preguntas que a diario formulás.

Mami quisiera esta siempre aquí para acompañarte, en todo aquello que pudieras necesitar.

Te acompaña mi prima, antes lo hacía yo.

Mami, olvidate de los momentos pasados hace días.

No tiene sentido te preocupes, recordá, antes lo pasé yo.

De la isla de Japón, me atraen, tanto el orden como la limpieza.

  ¿A vos mamá?”

Son varias cosas que podría  elegir.

En primera instancia los árboles de cerezo.

La pulcritud y educación de los ciudadanos,

Los paisajes japoneses.

El virtuosismo mostrado al mundo después del terremoto que afectó principalmente la central nuclear de Fukushima.

Muchos científicos murieron por efecto de la radiación a la que se expusieron para salvar la mayor cantidad posible  de compatriotas,  fue logrado a costa de sus propias vidas.

Ese es un acto de inteligencia e inmensa generosidad.

Recuerdo cuando las delegaciones deportivas, participaron

de los Juegos Olímpicos  en la Ciudad de Buenos Aires, dejaban sus habitaciones ordenadas, pese a que había personal dedicado a esa función.

Esos detalles siempre se tienen en cuenta.

Marcan la diferencia.

“Sí, madre de ello se habló

En todo el mundo, en el mío también.

Mamá querida, no puedo quedarme más tiempo.

Debo regresar a mi hábitat.

No te angusties, siempre estoy con vos.

He prometido a mi alma que es la tuya cuidarte hasta el final

Desconozco la fecha.

Continúo siendo tu hijo de siempre.

La muerte no me dio dones especiales.

Tengo los mismos de antes, sumado a los valores que me transferiste vos.

Mamá, nunca olvides cuanto te quiere tu hijo.”

No mi precioso tu amor es parte del mío.

Necesito verte otra vez.

Sin necesidad que uno de los dos deba emprender el viaje en forma separada.

Es imperioso, la muerte deje de jugar a las escondidas con mis sentimientos  y los tuyos.

Puede seguir desafiándome.

Atajos no voy a tomar.

Tiene una personalidad siniestra.

Dejó de asustarme hace mucho tiempo.

Juega con mi esencia.

No soy eterna en algún momento me iré,  nadie podrá detener mi marcha.

Mi derrotero sos vos.

Ella lo sabe.

Entiendo nunca ha tenido la fortuna de ser madre, por ello se lleva hijos que no nacieron de su vientre.

No es valiente su actitud.

Hace tiempo debió dejarme partir.

No lo hace pues no conoce la felicidad que siente una madre al abrazar a su hijo hasta que duelan los brazos.

Nunca la deben haber amado,  como te amo a vos.

Desapasionada siempre viste de luto.

No debe ser fácil  sentir el rechazo de todos, s los terrenales y humanos.

Tampoco hace mucho por la humanidad.

Te amo tesoro de mi alma.

Fue agradable estar con vos en la isla de Japón.

Espero la máquina del tiempo, pronto me lleve cerca de tu hábitat, para estar juntos eternamente.

Deseo recuperar la sonrisa y estar en paz al lado de la persona más  bella que conocí y decirle:

 “Te traje a la vida para que vivieras”

Hijo amado, siempre, en estos enlaces que nos unen un poco más cada instante, he de pedirte no olvides cuanto te quiere tu mamá.

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=gHjKtBZslz4