PERFILES

La semana pasada participamos de la despedida de tres colaboradores de la revista, han sido destinados a cubrir las vacantes que se produjeron en otros países de habla hispana donde se distribuye la misma.
Ernesto, el dueño de la editorial me pide que haga los casting, desea cubrir los puestos a la brevedad para que las ausencias no sean notorias.
Nos conocemos desde hace años y confía que elegiré los mejores seres humanos para que se sumen a la labor.
La prueba que deben sortear es sencilla, se les otorgará a quienes pretenden cubrir las vacantes una consigna para que escriban sobre la misma, de esa forma elegiremos a los mejores, aún cuando sabemos que cada uno tiene su propia impronta ya que cada ser humano es único e irrepetible.
Desde el ventanal de mi escritorio observo el paisaje, día diáfano, el sol está a mitad de camino de regalar sus rayos dorados cuando arribe al punto más alto.
Pareciera está suspendido entre el agua y el cielo.
Con imaginación notaríamos las gotitas de agua que tiene su cara en el momento de emerger.
Esa luz que regala tibieza es el momento indicado para que las flores con movimientos casi imperceptibles de sus pétalos quiten las gotas de rocío que logran cada noche hacerlas más bellas.
Las gaviotas saldrán de los nidos, siguiendo a los barcos pesqueros.
Coloridos esperan con el propósito de comenzar una jornada, a veces en el puerto los despiden sus mujeres deseándoles que las entrañas del océano entreguen aquello que quieran sin modificar la riqueza ictícola del lugar.
En planta baja me anuncia que hay una docena de aspirantes.
Le pido al conserje los haga pasar al salón y los invité con café y alguna delicadeza para paliar la ansiedad.
El grupo es heterogéneo, hay mujeres y hombres de todas las edades.
Nuestra empresa no discrimina ni pone topes a la edad, necesitamos personas con imaginación.
El grupo sabe que hay cinco vacantes por ende habrá una preselección que prefiero no auditar, estaré presente en el momento que esos hombres y mujeres dejen volar la imaginación.
Ernesto más otros integrantes de la empresa serán los encargados de la elección.
Esta tarde se elegirán los cinco que conformarán la planta de la empresa.
En las últimas horas de la tarde, cuando el crepúsculo tiñe el firmamento de púrpuras y rosados, me entregan la lista de los que estarán en la redacción.
La planilla contiene solo cuatro nombres los demás han sido descartados.
Insisto hasta que me permiten convocar a una joven mujer que en ningún momento quitó los auriculares de sus oídos, daba la imagen de las que todo lo saben, ignorando sus propios límites.
Convenzo a Ernesto, Aylen puede modificar su conducta literaria, pulir sus escritos, nada es difícil si uno se lo propone de verdad.
La cito al día siguiente, entró golpeando puertas, preferí pensar que era el viento,embolsado lograba que los cristales temblaran.
Le comento las metas que tiene la empresa, le hablo de su sueldo, que por cierto es interesante y me dice que ella es la mejor, la intolerancia no le permitirá comprender.
Traté de ayudarla , entendió que hay ciertas reglas que deben respetarse, entre ellas valorar a los otros sin creer que al mundo le ha sido adjudicado un nuevo ombligo.
Un portazo será la respuesta.
Por ahora la editorial funciona muy bien, un poco sobrecargada de trabajo, hubiera hecho falta un integrante más.
Hemos atravesado otros temporales, actitudes desubicadas.
La revista es récord de venta en los sitios que están los nuevos directores.
En este lugar soñado nuestra meta es trabajar en paz.
Descartamos a los que sin atributos quieren sobresalir.
Seguimos en la búsqueda del perfil que nos falta, si tienes humildad que no es lo mismo que sumisión, encontrarás nuestro contacto en la contratapa de la revista.
Gracias a todos Ustedes existimos, no duden en llamar.

http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=J502…