RENUNCIA

Mariano siempre trabajó en el sector maestranza del municipio.
Ama lo que hace, jamás midió consecuencias, su lema era servir a la comunidad que le había brindado la posibilidad de obtener su licenciatura en letras.
Lector insaciable, devoraba libros, de cualquier texto, rescataba enseñanzas.
En muchas ocasiones para fin de año recibía un reconocimiento por ser el mejor compañero.
Como todos su carrera comenzó desde el principio, no le importaba escalar posiciones, solo quería terminar sus estudios.
En un año más recibiría su título.
Mañana gélida.
Los automovilistas circulaban con precaución, la nieve era tanta que todos debían tener las cubiertas encandenadas.
Mariano se abrigó más que otros días, la ventisca impedía tener visibilidad plena.
Atento con su moto pala liberaba la ruta.
Todos lo conocían, respetaban las señales de tránsito.
Se despidió de sus afectos.
Un conductor a velocidad no permitida chocó en forma violenta el tractor que tenía incorporado el suplemento para despejar la ruta.
Mariano fue despedido del habitáculo.
El servicio de emergencias llegó con la rapidez que el caso ameritaba.
Tendido a un costado del pavimento parecía que el Señor pronto acudiría en su búsqueda.
Oxígeno, cuello ortopédico, inmovilización total.
Largos días en terapia.
Afuera esperaban los seres queridos y sus compañeros que se produjera un milagro.
Todos elevaban sus oraciones.
Nadie se animaba a darle la noticia, no era necesario, el joven había perdido sus piernas, una vez más se había salvado una vida.
La recuperación fue larga, el muchacho jamás se rindió ante la tragedia.
Recibió el titulo con las notas más altas.
El aplauso cerrado de quienes lo amaban y sus compañeros fueron el broche final, el afecto le importaba más que cualquier medalla.
Aprendió a caminar con prótesis, se ayudaba con muletas que luego cambiaría por bastones.
Consiguió que el intendente de la ciudad lo nombrara en la secretaría de cultura, no deseaba faltar más, nada de abusar de las licencias por enfermedad.
Renacía cada día en contacto con sus semejantes.
Mañana será jurado de un concurso literario, condiciones no le faltan.
Lee todo el material que llega.
Imposible elegir uno solo, casi todos son buenos.
Hoy han llegado dos escrritores a la meta final, la votación es divida, será él quien deba desempatar.
Pide un receso.
Redacta la renuncia.
Ha conocido la hstoria de los dos concursantes, no puede elegir a uno, Gustavo es eximio en las letras, los escritos llegan a taladrar el alma.
Agustín no tiene la humildad de los grandes, quiere obtener el premio como sea, si es necesario degradará no solo al jurado sino a sus pares.
Mariano no tolera esos desplantes.
Prefiere irse.
De nada servirán las palabras del intendente, no venderá su alma al diablo por nada del mundo.
Antepone los valores a la codicia que opaca a ciertos semejantes.
Se retira en medio de aplausos.
El concurso se declara desierto.
Las voces de descontento se alzan.
Mariano toma el micrófono, explica que no puede elegir a uno de los participantes, los motivos son entendibles, uno de los concursantes tine una vida plácida, el otro está peleado con la vida.
Solo un hombre de bondad infinita resolverá el diferendo.
Todos se entregarán a su veredicto.
Mariano está en paz con su conciencia, jamás de los jamases venderá su dignidad.

http://www.youtube.com/watch?v=vnMMHepfYVc