CENTINELA DE TU AUSENCIA

Buenos días luz de mis ojos.
Es preciso derrame todas las lágrimas contenidas con el propósito de aumentar el caudal de ese mar imaginario que une por siempre a una madre con su hijo.
Desde la tarde de ayer estoy en estado de conmoción.
Quiero suponer que desde ese sitio tan enigmático como imposible de otorgarle cierta credibilidad en mis pensamientos vacilantes, todo aquello que sucede a mi alredor carece de importancia.
¿Puedo relatarte mi experiencia?
En las primeras horas de la tarde del día de ayer decido ir hacia tu encuentro.
¿Recibe esa denominación?
Lejos de encontrar respuestas a cada uno de mis interrogantes, solo encontré más vacilaciones.
No te enojes.
A ese sitio donde supuestamente descansan las almas yacientes o como en tu caso las cenizas, se acostumbra a llevar flores.
Compré dos ramos de la especie que has observado con antelación.
Sé que no te agradan las flores cortadas de sus plantas.
¿Será por que su destino es la muerte cuando comienzan a marchitarse?
¿A esa condición se debe tu rechazo?
Es tan grande mi turbación que no puedo encontrar las palabras exactas para definir mi estado emocional.
Anoche conversé telefónicamente con alguien que como muchos otros te quiere de verdad.
Es cierto.
Hubo una pausa después de tu muerte.
¿Quién la impuso?
No lo sé.
Tal vez la necesidad imperiosa de reencontrarme con mi espíritu me llevó a aislarme.
¿Fue una decisión equivocada?
Es posible.
En ciertas circunstancias un terrenal desea no compartir el dolor con nadie.
Como te contaba, creo que ayer me acerqué un poco a esta dolorosa realidad que deseo no exista,
Estábamos delante del monumento.
Nunca antes había tomado exacta dimensión de la cruz que todos llaman mayor.
Es de color blanco inmaculado.
En un momento, duró solo, segundos. Los álamos parecían inclinarse para abrazar la estructura de piedra.
Protegerla.
¿De quién?
De los terrenales nefastos que abundan.
De la nada aparecieron dos palomas oscuras, sobrevolando la cruz.
Esas especies por su tamaño suelen tener un vuelo pesado.
Ayer sus alas desplegadas las hacia semejantes a gaviotas.
Las mismas que siguen a las embarcaciones buscando sustento o emprenden vuelo en escuadra perfecta.
Esas palomas eran absolutamente plásticas en su vuelo.
Una visión que no olvidaré mientras tenga signos vitales.
En ese instante para que tu hermano de la vida no se quebrara, decidí ahogar el llanto.
No hacía falta para expresar el dolor.
No puedo disimular los gestos.
No alcanzo a comprender porqué las urnas que contieen las cenizas de todos los que han partido vaya a saber con qué destino, pueden estar bajo esa mole de prístina piedra.
Es un sentimiento horrible.
A nadie le deseo pase por estas instancias tan dolorosas como inolvidables.
Dejamos las flores.
La florista me obsequió un clavel rosa fuerte.
Acompañaba los dos ramos de flores blanquísimas.
¿Por qué perturba tanto visitar un cementerio?
He recorrido otros a efectos de conocer los monumentos.
¿Para qué tanta inversión que solo ven los que quedan con vida?
¿Puedo creer en una religión que permite esos delirios?
¿No es verdad que la muerte inoportuna hace que todos los que han partido sean iguales?
¿Qué sentido tiene tanto mármol?
¿Las edificaciones lujosas no deberían ser prohibidas por quienes dicen ser los representantes de dios en la tierra?
¿Me gustaría que advirtiera que todos esos actos tan unidos con el comercio, producen mi más profundo rechazo.
¿Cómo no quieren esté inmersa ante un mar de dudas cuando me toca presenciar esos absurdos?
¿A quienes favorece mostrarse con más o menos alcurnia?
¿No ha llegado la hora de cambiar paradigmas vetustos?
¿Cuál es la diferencia existente entre los seres sin vida?
Tengo la certidumbre que rechazarías esos actos inescrupulosos,
¿No siente vergüenza al lucrar con la muerte?
¿Hasta donde llega la ignorancia.
¿Por qué si ese ser superior a quienes todos alaban por su humildad, permite esas demostraciones de poderío?
¿No han aprendido a honrar a sus muertos?
¿No han comprendido que de la nada venimos y hacia ella volvemos?
¿Poseen pompas y circunstancias quienes han perdido la vida?
¿Tienen la posibilidad de volver al mundo de los terrenales con esas edificaciones tan obscenas?
¿Por qué se trafica con los sentimientos?
Tesoro se que coincidís con cada una de mis expresiones.
Llamaría a tu ira lo observado por mí ayer cuando quise acercarme más a tu esencia.
¿Equivoqué el camino?
Es posible.
Los humanos nos equivocamos con frecuencia.
De los errores se aprende.
No quiero adquirir más conocimientos sobre este tema específico.
No hace falta enterrar más la daga en el ama para remover las heridas sangrantes.
Detesto las demostraciones de poder.
La mentira contenida en ciertos libros supuestamente sagrados.
Si los dioses de cualquier religión se fueron sin alarde ni ostentaciones, porque todo esto.
¿Reviven los uertos con tanta exhibición de mármol?
¿Dónde han quedado los valores y sentimientos?
Tesoro, espero que esas aves que no suelen estar en los cementerios, puedan arrancar las vendas que algunos tienen en sus ojos.
La vida es simple.
¿Debe el final ser tan complejo?
¿Tan falso como fatuo?
¿No deberían predominar los valores?
¿Cómo han convivido en la vida terrena con quienes partieron?
Por favor, los seres que se han ido quien sabe adonde no pueden disfrutar de ciertos lujos terrenales.
Lo bueno se da en la vida terrena, no en la muerte-
¿Podrían dejar de finfgir sentimientos inexistentes?
Mi alma, te añoro más que nunca, por favor no olvides cuanto te quiere tu mamá.

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