Buenos
días mi tesoro.
Te salido en
una mañana similar a la de ayer.
Antes de
seguir con esta conexión quiero sepas cuánto extraño no poder darte un beso
cada maña.
Estás cerca
de las estrellas.
Muy lejos de
tu mamá.
¿Cuál será
la distancia que me separa de mi hijo querido y mejor amigo.
Es mi utopía
en este mundo donde sobran las entelequias invitarte a un viaje imaginario.
El destino
propone viajemos a Roma para la inauguración del Coliseo, un anfiteatro enorme.
Coloso de
piedra, imaginado por el emperador
Vespasiano
Tito en el año setenta y dos de la era cristiana.
Pensado para
ofrecer espectáculos de todo tipo. Especialmente teatrales por la maravillosa
acústica que posee desde cualquier espacio que ocupe quien lo visita en sus
grada.
No siempre
los pensamientos originales se continúan en el tiempo.
El último
emperador a quien se le atribuye haber incendiado Roma, solía efectuar fiestas exóticas.
Desde la
pelea en la arena de las fieras hasta la lucha de gladiadores, donde él decidía
quien perdería la vida.
Bajando el
pulgar.
Una
atrocidad.
Como siempre
digo hay terrenales y humanos.
Nerón
no califican
para más que para ente.
Siempre
acompañado de mujeres hermosas, bebiendo hasta la última gota de licor para
luego degradarlas.
A partir de
sus delirios ell Coliseo volvió a ser
aquello para lo que había sido diseñado, un sitio para disfrutar con la
familia.
Si fuera
posible me gustaría visitarlo hoy. En el estado que quedo después de haber
atravesado. Dos guerras mundiales y alguna escaramuza.
Sentada en
sus gradas, por todos lados se escucharía tu voz expresando “Te quiero mamá”
Desde tu
ausencia, el tiempo se detuvo hace casi seis años, donde se derramaba bienestar
y felicidad.
Nada de ello
poseo ahora.
Quiero darte
el beso de cada mañana.
Compartir y
leer juntos la poesía de un famoso
autor, inspirada en el Coliseo.
Contiene
algunas faltas de ortografía.
En su época
no eran tales.
¿Te parece
compartirlas?
“El coliseo
[Poema -
Texto completo.]
Edgar Allan
Poe
¡Símbolo de
la Roma antigua! ¡Suntuoso relicario
de sublimes
contemplaciones legadas al
tiempo por
difuntos siglos de pompa y de poderío!!
Al fin,
después de tantos días de fatigante
peregrinaje
y de ardiente sed,—sed de corrientes
de la
ciencia que yace en ti,—yo, hombre
transformado,
me arrodillo humildemente entre
tus sombras
y bebo del fondo mismo de mi
alma tu
grandeza, tu tristeza y tu gloria.
——
¡Inmensidad,
y edad, y recuerdos de antes!
Silencio y
desolación y profunda noche! Os
percibo
ahora y os siento en toda vuestra fuerza.
¡Oh
sortilegios más eficaces que aquellos que
el rey de
Judea enseñó en los jardines de Gethsemaní!
¡Oh encantos
más poderosos que los
que la
Caldea encantada arrancó jamás a las
tranquilas
estrellas!
——
Aquí, en
donde cayó un héroe, cae una columna!
Aquí, en
donde el águila teatral brillaba,
cubierta de
oro, el oscuro murciélago
hace su
aquelarre de media noche. Aquí, en
donde la
cabellera dorada de las damas romanas
flotaba al
viento, se balancean ahora el
cardo y la
caña. Aquí, en donde el monarca
se inclinaba
sobre su trono de oro, el ágil y
silencioso
lagarto se desliza como un espectro
hacia su
casa de mármol, al pálido resplandor
del
creciente lunar.
——
Pero, oíd.
Esos muros, esas arcadas revestidas
de hiedra,
esos zócalos musgosos, esas columnas
ennegrecidas,
esos vagos relieves, esos
frisos
ruinosos, esas cornisas rotas, ese naufragio,
esa ruina,
esas piedras grises, ¡ay! ¿es
esto todo lo
que queda de famoso y de colosal?
¿es esto
todo lo que las horas corrosivas han
perdonado,
todo lo que ellos nos han dejado al
Destino y a
mi?
——
«No. No es
todo,—me responden los ecos,—no
es todo.
Voces fuertes y proféticas se levantan
para siempre
en nosotros y en toda ruina
a la
intención de los sabios, parecidas a los
himnos de
Memnon al Sol! Reinamos en los
corazones de
los hombres más poderosos; reinamos
con
despótico imperio sobre todas las
almas
gigantes. No somos impotentes nosotras,
pálidas
piedras. Todo nuestro poderío
no ha
desaparecido,—ni toda nuestra gloria,—ni
todo el
prestigio de nuestro alto renombre,
ni todo lo
maravilloso que nos circunda, ni
todos los
misterios que moran en nosotros,—ni
todos los
recuerdos que se prenden en nuestros
flancos como
un vestido, envolviéndonos
con un manto
que es más que la gloria!”
¡Cuántas provoca
el poeta con sus letras!
Por fin el
anfiteatro, es utilizado para aquello que fue pensado.
Un lugar que
además de poseer una acústica extraordinaria, permitía disfrutar de obras de teatro.
Espectáculos
Musicales o
circenses.
Hoy,
semideruído, por el paso del tiempo, es
un lugar obligado para visitar por parte de los turistas.
Trazando
paralelismos, imaginariamente, ambos protagonizaríamos nuestra propia historia.
Desde tu
nacimiento al final.
No faltarían
detalles pintorescos en la misma.
Nuestra
vida, pasó por todos los estadíos.
Los buenos y
aquellos que trajeron el dolor de la ausencia.
Poseería
creatividad.
V en barco o
pequeñas lanchas, paisajes, vuelos en avión, Siempre juntos los
dos,
contándole al mundo tengo el mejor hijo y amigo.
Sería una
obra donde la madre pudiera llenarlo de
besos a su hijo querido con el amor más puro que puede existir.
Te extraño,
no puedo vivir sin vos.
A diario
recibo tu energía para seguir donde no deseo estar.
Tengo la
certeza que esperarás mi llegada.
Anhelo
rememorar el ayer para siempre.
No regresar.
Vivir a tu
lado es mi prioridad.
Te extraño,
no deseo mueran más besos.
Todos están
a tu disposición.
Te pido
vengas por ellos y así podré tan solo darte la cantidad que desees.
Mo es bueno
vivir con tanto dolor.
Cerca de las
estrellas, muy lejos de mí.
No dudes,
llegaré por el medio que elijas.
menos aquel
que pueda vulnerar tu memoria.
¿Podrías ser
mi guía ?
Hijo
querido, siempre he de pedirte no olvides cuanto te quiere, mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=Za4aVQ5HDek
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