AVES DEL PARAÍSO

Buenos días mi cielo, te saludo en una mañana radiante.

Semejante a las que amanecen en primavera, igual que las flores  ornamentales atribuidas a tu hábitat.

Son originarias de Sudáfrica.

El nombre científico es Strelitzia.

Prefiero denominarlas, tal cual se conocen popularmente.

Aves del paraíso, por la forma de sus flores.

Al abrir parecen un pájaro con las alas desplegadas a punto de emprender vuelo hacia el edén celestial.

La planta llega a medir más de un metro veinte de altura,

Entre su follaje crecen varas semirígidas, sosteniendo esas aves de colores naranja violeta o azul.

Utilizada en arreglos florales importantes.

¿Es factible encontrarlas en el lugar donde estás?

El nombre es poético, si existen en otro plano solo pueden aseverarlo, quienes ya no transitan por suelo terreno.

¿Será la flora que Dante Alighieri, describía a Beatriz?

¿Al verlas,  has recordado la planta enorme que teníamos en la primera casa de esta ciudad?

Hace unos meses pasé con tu hermano de la vida por el frente.

Lo han modificado.

Al piso superior le han agregado otro.

No está el cerco primitivo.

Ahora es diferente, con láminas de metal que impiden ver el jardín.

No es de mi agrado pasar por allí.

Los recuerdos vividos lastiman casi tanto como tu ausencia.

Uno de tus hermanos de la vida quería conocerla.

Estoy tan solo a tres cuadras de esa vivienda.

Prefiero evitar esa calle.

Imposible no evocar cuando salías en bicicleta cantando.

Mostrabas al otro tu felicidad, la sonrisa cautivante.

Un ser de luz como pocas veces conocí.

Ninguno de aquellos vecinos  llegaría a pensar tu vida fue tan corta.

Las añoranzas instaron para que la imagen encabezara este enlace.

¿Has percibido cada uno de tus presagios se va cumpliendo?

¿Por qué podías avizorar las vueltas del destino jamás imaginado por mí?

¿Dónde nació tu sapiencia?

Con calma, poco antes de partir güiste señalando, los episodios  que me tocarían vivir.

No cometiste ningún error.

¿Cómo no admirarte si fuiste capaz de ver más allá de tu muerte?

El padecimiento producto de la soledad, solo encuentra paliativo en los recuerdos compartidos.

Profiere lastimaduras al alma la evocación constante.

Inevitablemente, no puedo ni quiero alejarte de mi pensamiento.

Estás vivo en mi ser.

Compartimos sentimientos y pensamientos.

Sos la compañía que muchos desearían tener.

¿Podrías describir  con tus propias palabras, cómo es el sitio en  dónde te encontrás?

Es curioso de la vida solo espero me lleve la muerte.

No se trata de una contradicción sino de anhelos profundos.

Solo vos conocés el peor dolor.

¿Por qué nos separaron?

¿Por qué debo seguir donde no deseo estar?

¿Quién se arroga el poder de asignar el principio o el final?

Siempre he sido respetuosa que poco tiene que ver con la sumisión.

¿Entonces por qué debo soportar el sometimiento de continuar?

¿Qué más debo agregar para que mis ganas de dejar suelo terreno, sean tenidas en cuenta?

Es una ofensa al intelecto, todos los días de esta realidad, no solo sean rutinarios sino que estén robotizados.

Solo me acerca al ser humano  el amor incondicional que tengo hacia vos.

¿Cuándo estaremos juntos?

¿Ocurrirá alguna vez?

Si no sucediera ¿Qué sería de mí?

¿Acaso debo descartar la ilusión de darte un beso?

Necesito sumergirme en tu mirada para hallar paz.

Las ausencias amadas no se pueden suplantar.

No se trata de cambiar figuritas.

Deseo verte para decirte cada día te amo un poco más.

Mi sueño estar juntos como antes.

Conservar la capacidad de soñar.

Edificar proyectos acompañada de tu presencia.

Planear nuevos

viajes.

Rememorar trayectos conocidos.

Ir en  búsqueda de otros no conocidos.

Asombrarnos compartiendo la alegría  de pequeños descubrimientos.

Explorar el alma para darnos cuenta, lo bello de estar con el hijo querido.

Cambiar el rictus amargo por una sonrisa indeleble.

¿Resulta exagerado pretender vivir en la normalidad del ayer?

No quiero más esta existencia llorándote.

¿Existe resolución?

Por supuesto.

No es nada complicada.

Solo tienen que dejarme partir.

No dilatar más el final.

Mi hijo no merece estar solo.

¿Quién seca sus lágrimas?

¿Han preguntado si realmente desea estar lejos de sus afectos?

Un ser tan sociable como él, necesita ayudar al otro para sentirse útil.

No insistan en hacer pierda su esencia.

¿Qué hace en el tiempo que hasta el momento no sé cómo llega, a  medirse?

Somos dos condenados a la soledad en espacios diferentes.

Sería más llevadero si estuviéramos juntos por el resto de la eternidad.

Aves del paraíso, adornen la morada del ser que más quiero.

Amante de la naturaleza, sabrá cuidar la hermosura de aquellas.

Hijo  mío, conocemos nuestros sentimientos mutuos.

Te ruego me ayudes a llegar.

Es evidente,  con mis súplicas es poco aquello que logro.

No es mi deseo tener nada material.

No hace falta cuando solo se desea dar y recibir amor maternal interrumpido por la tragedia.

Dejen volvamos a ser.

Te amo tesoro de mi alma, nunca dejaré de solicitarte, no olvides cuanto te quiere mamá.

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=KaO0KVwitQI&t=13s