ETERNIDAD

Nuestro lenguaje es muy rico por la variedad de vocablos que contiene con el propósito de denominar cada cosa episodio o circunstancia con el nombre correcto.
A medida que transcurrió el tiempo muchas palabras se fueron perdiéndo sin saber a ciencia cierta por qué ocurrió.
Se atribuye al uso constante de las computadoras el haber acotado nuestro léxico.
Salvo valiosas excepciones los jóvenes de hoy no se acercan demasiado a la lectura que sin dudas es le medio que enriquece nuestro lenguaje.
Muchos a cada afirmación o negación de algo le agregan un suave insulto.
No solo lo he observado en los adolescentes sino en adultos que quieren pasar por tales y no se dan cuenta que cuando peinan canas el uso constante de determinados vocablos los deja en ese lugar que es el único que no se puede regresar
Pensar no es difícil la dificultad aparece cuando alguien quiere expresar sus pensamientos, la dificultad aparece cuando aferrados a un lenguaje tan acotado, nuestro interlocutor nos mira azorado sin saber que quisimos decir.
La vida me llevó a pasar por trances que ni remotamente pensaba pudieran ocurrir.
Desde que te fuiste debí incorporar a mi léxico la palabra eternidad.
Suena poética cuando se pronuncia se transforma en horror cuando sabemos que es algo inalcanzable para el resto de los mortales.
Si bien comprendo el significado no puedo aceptar que entre mi hijo adorado y su mamá se interponga la eternidad.
Sé que allá lejos estás bien o pensando así me conformo.
Desde el mismo instante que partiste tu rostro se transformó.
La palidez, los ojos hundidos se transformaron en el color que tienen los bebés al nacer.
Ese rosado que no se puede comparar con otro matiz parecido.
Tu rostro trasuntaba paz.
Parecías que dormías con placidez.
Pocas veces te había visto en ese estado de absoluta tranquilidad..
Quise retratar tu belleza marmórea, por suerte privó la razón deciémdo guardar esa imagen tan bella no solo en mis retinas sino en cada centímetro de mi piel.
Jamás hubiera vulnerado tu privacidad, fue ese instante que ante el inmenso dolor que produce la muerte del ser que se trajo a la vida se va haciendo que por segundos su madre pierda la cordura y quiera retratar el comienzo de la eternidad.
Ese instante era de nosotros dos, como fue todo el tiempo que viviste, siempre lo hicimos en comunión de almas.
Es durísimo saber que ese hijo que parece dormido no lo está.
Es trágico saber que nunca más lo veremos físicamente a nuestro lado.
Puedo asegurarte que siempre estas conmigo, no solo en fotos sino de una forma que es difícil describir.
La eternidad es el comienzo del fin, algo que no se puede medir con el tiempo habitual.
Está ahí.
A ella puedo decirle que a nosotros no logró separarnos.
Es cierto que no te veo, solo puedo visualizarte con los ojos del alm.
Nuestro amor es incondicional por ello como siempre te pido que nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

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