Buenos días
mi alma.
Mañana gris.
Desde hace
una semana no se ven los dorados rayos de Helios.
Cuando el
cielo está diáfano creo tendré más posibilidades de verte para transmitirte
todo mi amor.
De manera
permanente estás en mi mente.
En un
paisaje rocoso donde se percibe la soledad.
Solo
gaviotas acompañan ese estadío que jamás debiste atravesar.
Mi gran
utopía acaba de nacer.
Poder estar
sentada a tu lado en ese lugar tan parecido a la eternidad.
Es hora de
conocerla. Nada debo hacer aquí.
Sé, soy reincidente con las palabras.
Grafemas
repitentes.
Algunas
personas estiman es por haber aceptado nunca más estarás a mi lado.
¡Desvarían!
Siempre he tomado la aceptación como el olvido.
Posiblemente
nada tengan que ver entre sí.
A los que de
manera frecuente suelen decirme soy cabezona,
los invito antes de calificar a otros con total liviandad, piensen tan
solo por una fracción de segundos
¿Cómo reaccionarían ante la muerte de un
hijo?
Si alguno
posee la respuesta me gustaría puedan transmitirla a través de los comentarios
que posee este espacio.
¿Podrían
resignarse a la muerte de uno de sus hijos?
¿Cuál es la
manera de hacerlo?
La
desesperación por no tenerlo puede ser que me haya quitado la capacidad para
desmenuzar los hechos y luego sacar conclusiones.
Abro mi
corazón a la opiniones vertidas, con
buena intención.
Solo seré
selectiva con quienes quieran transmitir
sus frustraciones.
Todas serán
analizadas con el respeto que merece el tiempo de los demás.
Los
comentarios de los contactos que a diario permiten esté cerca del ser que más
amo en la vida, solo los leo yo.
Ofrecí
resistencia feroz, cuando mi médica de cabecera
sugirió tratamiento psiquiátrico.
Siempre la
respuesta fue negativa.
No insistió
pues es sabia.
Veía estaba
cayendo en un abismo.
Con
inteligencia pidió una inter consulta , regalándome la birome, para que fuera
to quien le pusiera la fecha a ese pedido.
Esperé más
de un año para tomar la decisión.
Ella sabe
que no creo en el vano palabrerío de los psicólogos por haber conocido parte de
la carrera.
Conoce mi
carácter no es fácil.
La
determinación era absolutamente de mi potestad.
Noté
pensamientos extraños que jamás había tenido.
Era el
momento de convocar a la especialista.
Fue frontal
desde la primera consulta.
Hablamos de
los distintos duelos que se sufren mientras se transita la vida.
Fue contundente
y precisa.
Sin utilizar
vocablos decorados, sus palabras fueron determinantes para quién nunca ha sido dócil al decir “Todos los duelos
que suelen asolar a los seres humanos, se pasan.
Los
pacientes pueden recuperarse.
El de un
hijo jamás”
Puedo
expresar con orgullo, hoy puedo considerarla como una amiga, con la distancia
que debe existir entre paciente y profesional.
Sus
principios están basados en estudios aprobados por las neurociencias.
Si me tiene
que llamar la atención lo hace.
Es firme
y dulce a la vez.
Si la mayoría
de los seres humanos fuera un pequeño porcentaje parecido a la Doctora LL,
viviríamos de una manera diferente.
Es de las
elegidas que piensan el otro no es una cosa.
Los trata
como humanos o terrenales, según, corresponda.
Estoy segura
que entre muchos profesionales , estuvo tu mirada, a la hora de colocarla en mi
sendero.
Nada es
casual.
Muchas veces
cuando expreso mi necesidad de vos, ella con su sonrisa pletórica de sabiduría
expresa
“Su hijo está aquí.
Se percibe
el amor existente entre los dos”
Es un orgullo
escuchar a alguien que no te dice “Estás reteniendo, a tu hijo, no dejás, se vaya ni eleve su
alma.
¿Qué dicen?
Como si
fueras un bebé, acuné la urna con tus cenizas entre mis brazos.
Cuando el
carrito de golf, que nos acercaba a ese destino que visito muy poco, acompañada
por tu prima, el empleado del cementerio esperaba entregara la urna de noble
madera.
Quedé
mirándolo, pero solo veía una sucesión de imágenes compartidas entre los dos.
Me pidió
permiso para sacarla de mis manos.
Secuencia de
una película de terror.
Estaba entregando
a un respetuoso desconocido, las cenizas del ser que más amé en la vida y
seguiré queriendo, aín, cuando no sepa
si de verdad, en algún pasaje del universo nos volveremos a encontrar.
En ese
instante que ninguna madre debe pasar.
El dolor
sobrepasa la tragedia de la pérdida.
Nunca debió
suceder.
A quien sea
les pido me dejen morir.
No quiero
amor por interés.
Preciso
tenerte a vos que eras puro equilibrio.
Nadie me
enseñó a vivir sin vos.
Detesto la
soledad.
No quiero
más palmadas en el hombro.
Casi al
final del camino te das cuenta cuando aparecen ciertas impurezas.
Sabés a qué
hago referencia.
El silencio
es una estupidez cuando no está argumentado.
Siento he
sido utilizada.
Nada es
gratuito.
Nunca he
pretendido que lo sea.
Duele
ganarse el cariño de un ángel para luego nunca vuelvas a verlo.
De existir dios,
espero mire los errores del otro.
Nunca he
sido perfecta.
Jamás he pretendido
serlo.
Han cambiado
las reglas del cariño en todos los órdenes y reinos.
Hijo amado a
vos te paso ahora me llegó a mí.
No lo pensé.
Todo se
llega a develar.
Tu
sacrificio fue entregado a los vagabundos.
Sé, llegás a comprender.
Te amo más allá de los actos miserables, por
ello te pido nunca olvides cuanto te quiere mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=V0uspqu7yOM
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