MARIPOSA NOCTURNA

Buenos días alma mía , te saludo en una mañana difícil de interpretar.

Para hoy se esperaba una baja significativa de las temperaturas, no ocurrió.

Mientras buscaba la correspondencia en el buzón, encontré una especie de postal impactante por su simbología.

En papel brillante  sobre fondo oscuro , en la esquina de una mesa de herramientas, una vela encendida a punto de apagarse.

La cera de la misma había formado una figura parecida a corazones unidos.

Aparentemente el lugar estaba sin ocupante, sin embargo una mariposa nocturna vigilaba la fuente de luz.

Imaginé  por su apariencia estaba descansando luego de haber aleteado alrededor del pabilo encendido con la intención de apagarla, evitando un desastre ígneo.

Cansada de aletear, quedó dormida en el mismo sitio en donde la vela, lentamente se consumía.

Las velas de distinto tamaño se utilizan para ceremonias religiosas.

También como objeto decorativo.

Por falta de luz. Ante un corte de energía.

Personalmente no son de mi agrado, por el peligro que significan,

Tuve una mala experiencia con un sahumerio encendido, sobre el que cayó una toalla, produciendo un humo feroz.

El revestimiento del techo de ese ambiente está compuesto por listones de madera angosta.

Tal cual son  los baños finlandeses.

A partir de allí, en mi refugio las velas no existen, menos los sahumerios, para su reemplazo están los difusores ambientales.

¿Qué hice con los candelabros de hierro forjado pintado de color negro?

Los regalé.

 Nunca más en mi refugio , nada artístico que produzca fuego.

Quien los recibió estaba encantada con la forma de las velas.

Eran de color verde agua.

En la textura tenían palabras escritas en uno de los idiomas de los países asiáticos.

Por la forma de los grafemas podría afirmar corresponden a Turquía.

Sorprendía verlos escribir en épocas de la guerra establecida con Grecia.

Comienza a escribir el final de la palabra,

Todo un arte.

No hago referencia a la actualidad porque no los he visto escribir.

En aquel entonces lo hacían de esa manera.

Puntualmente cuando luchaban por la independencia de Anatolia, territorio pretendido por ambos países.

En la actualidad se ha perdido el arte de enviar manuscritos.

Hoy se hace todo a través de las redes de manera pública o bien a través de WhatsApp.

Ello ha acotado, un poco más la forma de expresarse que tienen la mayoría de los jóvenes.

He accedido a escritos redactados por chicos de colegios secundarios y son dignos de lástima.

Hasta el momento no encontré ninguno sepa expresarse correctamente.

Quizás sea demasiado pretenciosa.

Para vos el móvil no era  una extensión de tus dedos.

Lo usaste mucho al final realizando trasplantes  de chip entre los de ambos, dado que en mis contactos tenía aquellos que te faltaban a vos.

Regresando a los símbolos como son las velas, tomé como un presagio la mariposa nocturna aparentemente dormida.

Recordé cuanto te gustabas cuando eras un niño sostenerlas entre tus dedos para luego dejarlas en libertad.

¿Fue un presagio?

Todo lo relaciono con vos.

De haber estado juntos no hubieras permitido encendiera ni velas ni sahumerios.

Dos objetos sobrantes de acuerdo a tu criterio tan práctico.

Gemelos de pensamiento, hasta los gustos eran similares.

Nunca encendería una vela ante tu retrato.

Te enojaría, pese a que somos respetuosos de las creencias de los demás.

Pretendemos recibir idéntico tratamiento.

Tu luminosidad, fuente inacabable de sabiduría, es suficiente para mí.

Generoso entiendo las derramás, sobre aquellos que tienen dudas más intensas que las mías y no saben cómo arribar a un buen final.

Espero puedas hacer lo mismo durante mi acceso para encontrarme con vos.

Cuando despierte la mariposa nocturna, le pediré, vuele hacia tu hábitat y en su idioma susurre en tu oído mis deseos de darte muchos besos y abrazarte, hasta que duelan los brazos.

El comienzo de cada mes es tortuoso, llega a recordarme, nos acercamos sin pausa al sexto aniversario de  tu muerte.

Una locura, imposible de digerir.

Menos pedir comience el proceso de admitirla para luego aceptarla.

Jamás lo haré.

Es inaceptable tener un hijo muerto.

No es compatible con el hecho,  de consagrarnos madres.

En ese momento sentís el mundo no tiene arbitrariedades.

La mayor fortuna descansa en tus brazos, en el momento de acunarlo o convocar al sueño.

Ser testigo del crecimiento de un hijo no se puede describir.

La felicidad se instala a nuestro lado.

Cuando comienzan los proyectos,  sos parte de ellos.

Pedís la concreción de los mismos.

Siempre en tu cara había una sonrisa, reflejada en  tu mirada tan bella como profunda.

Todo eso no está.

No es factible vivir sin el afecto que despertó el amor incondicional.

Se extraña al hijo y al mejor amigo.

¿Qué hice mal?

¿Qué faltó para vivir tanto horror?

Comprendo todos están ocupados para ayudar en la resolución de tantos dilemas.

Nunca tienen tiempo para una mamá desesperada por la ausencia del ser más querido del mundo.

¿Nadie pudo prestar ayuda en estos casi seis años?

¿Por qué nunca están?

Entes extraños, los que resuelven llevarse una vida joven.

Si comprendieran el daño proferido, elegirían a sus víctimas entre los que han vivido demasiado.

Personalmente no entiendo nada.

¿Por qué no me llevaron a mí?

Estábamos juntos.

Seleccionaron mal..

Hijito querido,  te amo más allá  de la eternidad.

No existen barreras delimitando el amor.

Como siempre a mi ser luminoso le pido nunca olvides cuanto te quiere mamá.

 

https://www.youtube.com/watch?v=DX7u6MDewrE