AMAPOLAS PARA TU CIELO

Buenos días precioso hijo.

Te saludo en otra jornada idéntica a la de ayer.

Alivio y lluvia necesarios para alejar las altas temperatura por un tiempo breve.

Seleccioné imágenes de amapolas para tu cielo.

Hace mucho tiempo se podían conseguir las semillas para obtener plantas que crecían sin cesar.

Los científicos descubrieron que aquellas contienen alucinógenos y en nuestro país está prohibida su venta.

Elegidas por muchos dado que crecían con rapidez y los tonos eran variados.

Útiles para ornamentar rincones del jardín.

Alguna vez en los parques de los abuelos maternos las vimos crecer.

Tienen el tallo largo y por cada uno despierta una flor de ocho pétalos, en el centro están las famosas semillas prohibidas, no obstante es posible verlas en jardines interiores donde las autoridades solo pueden ingresar con ciertos requisitos.

En ciertos países  no solo se multa a los dueños sino que pueden terminar en prisión.

Generalmente ocurre en aquellos donde la democracia esta disfrazada de autoritarismo.

No todos los que tienen amapolas las utilizan para el tráfico de estupefaccientes .

Son pensamientos que han quedado postergados en el ayer.

Todos los colores de la paleta de un pintor se hallan en los pétalos de la flor que elegí con la intención, puedan elevarse al Jardín  del Edén.

Te pienso y no puedo aceptar tu ausencia por ello estas conexiones son sagradas para mí

Recordé, mientras seleccionaba la imagen, una canción interpretada por una cantante griega, cuya voz es un cristal, esperando en tu hábitat puedas oírla, acompaño  este enlace  con una poesía de una escritora referente,  a las flores de amapola.

Aquí la dejo para disfrutarla juntos como ayer.

 

“La amapola de la raya

 

Autor: Carolina Coronado

 

 

 

Siempre al tender mi vista por el llano

 

del ámbito campestre que me encierra,

 

he visto el horizonte lusitano

 

lindando con los prados de mi tierra;

 

y he dibujado con mi propia mano

 

su hermoso valle y su cercana sierra

 

y he tomado las dobles amapolas

 

que ni son portuguesas ni españolas.

 

Una corona roja que mecía

 

la fresca brisa del humilde caya,

 

de una amapola que nació en la raya

 

el nombre de ambos reinos confundía;

 

yo la tomé con súbita alegría

 

y deshojando su corola gaya

 

las hojas hice tremolar al viento

 

haciendo por su vida un juramento...

 

Juramento de dama que en las flores

 

deteniendo pueril su vaga idea

 

con la más olvidada se recrea

 

suspendida admirando sus colores;

 

juré que porque nacen las mejores

 

plantas sobre el arroyo que serpea

 

uniendo a Lusitania con Castilla,

 

iba,  a llenar la raya de semilla.

 

¡Oh qué placer reproducir la planta

 

y verla florecer en primavera

 

a la orilla de plácida ribera

 

que con sus gotas puras la abrillanta!

 

¡oh ya veréis entre sus brotes cuántas

 

amapolas, nos da la venidera,

 

blanda estación, cuando ilumine el llano

 

nuestro sol español y lusitano!”

 

Querido hijo sigo extrañándote.

Deseo aparezcas en mis sueños para darte un beso. Acariciarte como antes.

Quedarme acurrucada en tu abrazo fiel.

Tu hermano del alma está paseando por Turquía.

Curiosamente como yo admira el mar Bósforo debe ser por ser el espejo del cielo.

Por otra parte cruzando caminando un estrecho se llega a las aguas del Mar Negro.

Tan oscuro como el fondo de los abismos ancestrales de los que muchas veces pudiste rescatarme.

Hijo querido, no deseo seguir aquí.

Carece de sentido permanecer en un espacio donde me siento incómoda.

Es duro despertar cada mañana sabiendo no te encontraré

Te amo con la misma intensidad que te extraño.

Mi alma te pertenece completamente.

No sientas miedo por las hilachas que tiene, fueron generadas por el dolor de no tenerte físicamente.

¿Nos veremos nuevamente alguna vez?

Te pido como siempre en cada contacto mi mayor utopía, por favor nunca olvides cuanto te quiere, mamá.

 

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=Q6usZENfd9I