Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana límpida. Ningún celaje empaña el
cielo celeste como el océano que tanto disfrutaste, deslizándote sobre sus
aguas cual experto nadador.
Siempre fue el
territorio de Poseidón el espacio que te cautivó, durante tu breve estadía en
suelo terrenal.
Anoche se repitió un sueño conmovedor.
Estábamos vacacionando en tierra brasilera.
Mientras te esperaba en la costa, junto a la rivera de un
mar curiosamente calmo.
A tu lado aparecieron transparencias de gotas de agua
formando gotas a la que tus brazadas,
otorgaban figuras diversas que solo yo, podía contemplar.
En pocas ocasiones nadabas de espalda, dejando los dorados
de Febo, acariciaran tu bello rostro, adquiriendo un tono suave en la piel.
Desearía regresar en el tiempo para volver e revivir tantos
momentos compartidos.
Aquello que no hacían imaginar la tragedia se precipitaría
hambrienta, llevándote a ese lugar enigmático., al que aún no tengo acceso,
privándome, del anhelo de darte un beso como en el ayer cada día más lejano.
Conocen los arbitrios del destino es mi mayor utopía, estar
juntos para siempre u así puedas sentir la intensidad del amor maternal.
Continuo sin saber ¿Por qué
pasó?
Ni en los sueños más delirantes, imagine me faltarías.
Te extraño hijo querido.
Es un duelo que solo se detendrá cuando deje de palpitar mi
corazón.
¿Podrías ayudar a ese
evento para que llegue rápidamente?
No es mi deseo seguir en territorio hostil.
Tu ausencia no se puede soportar.
Desmiento a quienes dicen que el duelo pasará.
Quizás ocurra con otras pérdidas familiares, jamás con un
hijo que se acunó en el vientre durante nueve lunas y sus soles.
Sería desagradecida si negara tengo pinceladas de paz, como
ayer cuando acompañé a tu prima a buscar el resultado de una biopsia y al ver
su cara radiante, adiviné todo había salido bien.
Durante los cuarenta días anteriores me mostraba fuerte para
que ella soportara el calvario de la espera.
Solo quien atraviesa circunstancias difíciles comprende a qué
hago referencia.
Mis musas contaron que en el mar las gotas en su elevación.
Mostraban gratitud en sus transparencias, formando figuras nunca antes vistas.
Los pensamientos comenzaron a descansar, luego de varios
días de espera.
Instantes donde pensás la suerte estuvo de su lado y en la
mano de los cirujanos intervinientes.
El abrazo fue esperado, el terror había huido dando lugar a
las sonrisas y lágrimas de alegría.
¿Por qué ambos fuimos alcanzados por el episodio más trágico
de nuestras vidas?
Mi deseo es acompañarte en la eternidad.
¿He de lograrlo alguna
vez?
Encontré un poema de autor oriental definiendo las gotas de agua de manera
magistral.
Lo dejo aquí para que puedas leerlo en tu hábitat.
“La gota de agua y el océano
Autor:Omar Khayyam
La gota de agua del mar,
desprendida y solitaria,
en playa inhospitalaria,
triste, se puso a llorar.
El Océano al sentir
tan tierna lamentación
de aquella separación,
la piedad le hizo sonreír.
-«Hijo mío, entre los dos
hay una sola unidad,
y sobre esta inmensidad
no hay más grandeza que Dios.
«Entre tu cuerpo y el mío
nunca la extensión verás:
nadie medirá jamás
la inmensidad del vacío».
Asiste la razón al escritor cuando menciona la inmensidad
del vacío.
Desmembrada, me
siento al no tenerte.
Las hilachas de mi alma todavía pueden sostener a la tuya,
pegada junto a la mía.
No alcanza tesoro.
Preciso verte corporizado sonriendo a tu mamá que te ama de
manera indescriptible.
Las disquisiciones se van acumulando sin que exista nadie capacitado
para aclarar este panorama oscuro en el que transcurre, mi tiempo errático.
¿Cuándo estaremos juntos nuevamente?
Es difícil vivir sin vos.
¿Qué ocurriría si el reencuentro no se produce?
Solo tu mano me puede llevar al destino certero.
Sos mi único objetivo.
Mi búsqueda no cesará.
Te necesito para que indiques he tomado el camino correcto.
Solo confío en vos.
Ser de luz, ilumina mi sendero para llegar a la meta son
errores.
Poco importa los pasos que deba dar para poder abrazarte.
Delego mi vida en vos.
Sis la persona que más amo en esta vida y en otras.
No puedo cometer un error a la hora de encontrarte.
No entregues tu memoria y recuerdos ni a Mnemosine o Perséfone.
Otras almas pueden ocupar tu lugar.
Te amo querido hijo, esperando me reconozcas a mi llegada
solo me resta pedirte por favor, nunca olvides, cuanto te quiere, mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=Y8HOfcYWZoo
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