Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana cálida.
La imagen que antecede a este contacto maravilloso, la
tomaste vos en la provincia mediterránea
de Córdoba en el paraje Cascada de Cóndores.
Nuestro alojamiento estaba frente al salto de agua, el verde
de los cerros, se abría para dar paso al canto de la cascada de agua, tiñendo
la superficie del río con su verdor.
Recuerdo como si fuera hoy, nadabas en ese lugar sin acercarte al salto de agua,
dado que allí la profundidad es notable,
y los barcos de la patrulla marina impiden acercarse a la cascada, dado que
tiene pozos que son peligrosos para cualquier nadador.
Sentada en mi silla playera, observaba cada uno de tus
movimientos.
Sentía placer cuando salías
del territorio de Poseidón, ya que temo a cualquier superficie acuática.
Respetuoso de las recomendaciones, jamás avanzabas a lugares
vedados para nadar.
No es nuevo, siempre he tenido, terror al agua y las
alturas.
Paseando con tu abuelo materno, por la costanera de la
ciudad balnearia de Mar del Plata, la construcción de la escollera carecía de
barandas, elegí deslizarme por las
piedras para caer en la arena y no llegar a la bajada que utilizan los turistas
que se halla más adelante.
Para mí, es mejor estar en tierra firme.
El canto del agua de la cascada de agua es encantador.
Muchas veces las gaviotas sobrevuelan el lugar.
Sitio ideal para descansar, lejos del bullicio de la ciudad.
Al arribar al hotel pedimos ser alojados en una habitación
frente a la cascada, para observar las luces nocturnas que cambian el tono del
líquido elemento,
Las playas son
diferentes a las de la costa atlántica, tienen rocas y piedras en su
recorrido y en ese tramo son angostas.
Fue uno de los lugares más lindos que conocimos.
De haber tenido la potestad, hubiera detenido el tiempo en
ese año, cuando solo reinaba la felicidad.
Disfrutábamos, todos los momentos que pasábamos juntos cada
momento del día.
Los arbitrios del destino decidieron otra existencia para nuestras
realidades, Pasadas las once de la mañana, regresábamos al hotel para cambiarnos
y cerca de las trece horas ingresar al comedor el hotel con el objetivo de
almorzar.
Si el tiempo acompañaba volvíamos a la cascada, de lo
contrario alquilaba un auto para recorrer otros parajes de la provincia.
Viajes inolvidables, perdurando en la memoria y en el alma.
Tampoco he regresado allí ni a los lugares caminados en tu
compañía.
Territorios prohibidos desde tu ausencia temprana.
Decisiones inesperadas que he tenido que tomar.
Para la fecha seleccioné algunas frases de autores
reconocidos para compartirlas con vos, por ello, las dejo en nuestro lugar de
encuentro cotidiano.
“«Hay un mensaje oculto en cada cascada. Dice, si eres
flexible, ¡caerte no te hará daño!». Mehmet Murat ildan.
«No te sientas triste
por tus lágrimas, ya que las rocas nunca se arrepienten de las cascadas». Munia
Khan.
«Los búhos ululan en
Si bemol, los cucos en Re, pero el agua canta con la voz del arroyo. Ella
construye su nido detrás de las cascadas para que el agua sea una canción de
cuna para los más pequeños. Debe ser donde lo aprendan». Karen Joy Fowler.
«Ten cuidado al
cruzar por encima de la cascada, es un lugar fatal». Karl Meltzer.
«Hay esperanza en el
fondo de la cascada más grande». Patrick Ness.
«No tienes el poder
de hacer arcoíris o cascadas, puestas de sol o rosas, pero tienes el poder de
bendecir a las personas con tus palabras y sonrisas. Llevas dentro de ti el
poder de hacer el mundo mejor». Sharon G. Larsen.
«El guerrero conoce
el efecto cascada. Paulo Coelho.
«No hay mejor lugar
para encontrarse que sentarse junto a una cascada y escuchar su música». Roland
R Kemler.
«Sueña el sueño
imposible y el mundo no te hundirá, te elevará. Este es el truco. Esta es la
danza chamánica, en la cascada. Así es como se hace la magia. Lanzándose al
abismo y descubriendo que es un lecho de plumas». Terence McKenna.
Tesoro de mi realidad solitaria, te amo y extraño con
intensidad desmesurada.
Jamás pensé no tenerte.
Somos los mayores quienes debemos partir.
Ven a mis sueños.
Debo entregarte los besos aletargados que guardo para vos.
Conservo la ilusión de abrazarte como antes.
Quiero recibas todas la caricias, guardadas durante más de
siete años.
Preciso me ayudes a llegar a vos rápidamente.
La tierra no es un lugar apropiado para mí.
Deseo llegar sana sin el tóxico que significa trasladen el
destrato recibido a mi persona.
Tengo la tranquilidad, de haber procedido por humanidad
cuando ciertas situaciones no las puedo controlar.
Quiero sepas que la única pérdida trascendente en mi vida
fue tu partida.
El resto jamás lo entenderé y no permitiré a nadie use tu
memoria a la hora de buscar excusas que escapan a mi comprensión.
Es más, las entiendo dado que hay seres, que se dejan
manipular.
En el mundo de los adultos todo es posible.
Derramé lágrimas de impotencia, no son parecidas a las del
calvario de tu partida.
Expresé aquello que debía, si no se comprendió, solo puedo
decir que un Ser Superior será el encargado de juzgar.
No es esa la causa, por la que a diario te pido ayuda para
irme cerca de tu hábitat.
¿Por qué mi búsqueda entre las estrellas, fracasó?
Reitero el suelo terreno no es para mí.
Tengo la obligación de cuidarte en el plano que estés.
Hijo por el amor existente entre nosotros, una vez más, te
pido, nunca olvides cuanto te quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=Zx9Gqicp3CQ
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