Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana templada para este otoño demorado.
Deseo compartirte un sueño, sin poder precisar el horario en
que ocurrió.
Del reloj de parad salían, las manos del tiempo, ese que
marca todos los instantes de nuestra vida
terrena.
Cronos la deidad
griega no descansa un solo segundo.
Su misión es hacerse notar, en cualquier espacio.
Quien lo mira, se encuentra, observa una persona a la que es
imposible calcularle la edad.
Su vestimenta es una túnica de un color que alguna vez fue
blanca, está´ con hilachas que
parecieran en cualquier instante, se cortarán.
Calza antiguas sandalias de cuero marrón.
De cabellera y barba larga, parece inofensivo.
Sé le pregunté por vos
tratando resolviera mis disquisiciones.
Lejos de hacerlo solo mira, esbozando la mueca de una
sonrisa.
Cuando pregunté por qué sus manos, salían de mi reloj,
expreso era para recordarme, siempre está entre todos los terrenales.
No quiere nos olvidemos de él.
¿Cómo olvidar su existencia, si eternamente está entre
nosotros, aún, cuando quiera pasar inadvertido, está?
Pese a que no goza de ningún sentimiento, desearía saber por
qué se arroga la potestad de decidir nuestra llegada o partida.
Resulta desagradable, estar en sus manos.
Jamás congeniaré con su presencia.
Es el responsable de haberte, arrancado de ni lado, cuando
comenzabas a edificar tus proyectos, los que murieron antes de cristalizarse.
Lo trato con respeto.
Cronos, para mí es un ente despreciable.
Trabaja, con otro autoritario, los designios del destino.
Oscuro como las noches sin luna.
Ambos viven en las sombras.
El sonido del viento, logró despertarme.
Llegó en el momento preciso que en estado onírico, pudo
sacarme del estado de letargo, para estar consciente, concluyendo que pese a no
visualizarlos, siempre están.
El reloj apareció con el cristal lastimado y unas manchas,
semejantes a la sangre.
Tendré que pasar por la joyería y dejarlo para su arreglo.
Es probable que al quitar sus manos de aquel, haya dañado el
mecanismo.
Pese a que era temprano salí a caminar, como lo hago todas
las mañanas.
Sentía grotescas, pisadas detrás de mí.
Al darme vuelta para mirar si me estaban siguiendo y dos
manchas se desvanecieron rápidamente.
Para la fecha seleccioné citas y frases de autores
reconocidos, quienes aluden al tiempo.
Las dejo, en nuestro espacio de encuentro, con la ilusión
puedas acceder a ellas, hermoso hijo, amigo fiel.
“El tiempo es la cosa más valiosa que una persona puede
gastar
(Theophrastus)
El amor es algo eterno, el aspecto puede cambiar, pero no la
esencia.
(Jeff Zinnert)
Amas la vida? Pues si amas la vida no malgastes el tiempo,
porque el tiempo es el bien del que está hecha la vida
(Benjamin Franklin)
Los que aman profundamente nunca envejecen, pueden morir de
vejez pero mueren jóvenes Arthur Wing Pinero)
El amor es la energía: ni se crea ni se destruye.
Simplemente es y será siempre, dando sentido a la vida y dirección a la bondad.
El amor no morirá jamás.
(Bryce Courtney)
Todas mis posesiones por un momento más de tiempo
(Isabel I)
El pasado nos limita, pero el futuro nos atemoriza. El único
lugar seguro es el presente
(Isaac López)
Tu tiempo es limitado, así que no lo malgastes viviendo la
vida de otro… Vive tu propia vida. Todo lo demás es secundario (Steve Jobs)
El amor es el espacio y el tiempo medido por el corazón.
(Marcel Proust)
Si dejas que pase el tiempo sin hacer nada, pronto te darás
cuenta de que solo vas a vivir una única vez
(Anónimo)
El tiempo es la divisa de tu vida. Es la única divisa que
tienes, y solo tú puedes determinar cómo será gastada. Sé cuidadoso y no
permitas que otras personas la gasten por ti
(Carl Sandburg)
No es un amante quien no ama para siempre .
(Eurípides)
Un hombre que se permite malgastar una hora de su tiempo no
ha descubierto el valor de la vida.
(Charles Darwin)
Cada momento que paso sin ti es un momento de tiempo
perdido.
(RR Tolkien)
Qué insensato es el
hombre que deja transcurrir el tiempo estérilmente “
(Goethe)
Tesoro de mi existencia, te amo y extraño cada día con mayor
intensidad.
El amor que genera un hijo luminoso como vos, es
incondicional.
Recuerda querido debes pasar nuevamente por mis sueños.
Es la única manera de poder entregarte el cúmulo de besos
que tengo guardados para vos.
Añoro estrecharte en un abrazo interminable.
No niegues a mis manos los deseos de acariciarte como antes.
¿Cuándo vendrás a buscarme?
No es agradable permanecer donde no se desea estar.
¿Has encontrado una estrella cercana a tu hábitat?
Allí estableceré mi morada definitiva.
Te pido ayuda para llegar a tu lado prontamente.
Es difícil seguir en este camino extenuante, sin tu
presencia.
¿Podrías auxiliarme en estas circunstancias?
Como es usual en estas conexiones maravillosas, que tanto
nos unen, he de reiterar mi solicitud, por favor, nunca olvides cuanto te
quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=D9zIFsizgrU
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