Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana primaveral.
Apenas comenzó a brillar Helios en el horizonte, caminé
hasta la plaza de la ciudad.
Anoche el viento al cambiar de dirección, soplaba con
fuerza.
Este episodio se vio reflejado hoy en la plaza del
municipio, una alfombra de hojas rojizas cubría los senderos de la plaza.
Un placer visual para mí.
Los trabajadores no habían llegado pues era demasiado
temprano. Circunstancia que permitió, utilizara uno de los bancos que se
encuentran en aquella con el propósito
de reflexionar sobre temas relacionados con vos.
Solitario el banco esperaba imagino para no sentir en sus
maderas cuidadas el peso de la soledad.
Las hojas del añoso árbol crujían bajo mis pies.
Mis musas susurraban era la mejor canción escuchada en esta
temporada.
El banco esperaba el paso de los chicos acompañados por sus
madres para llegar a las escuelas que circundan la plaza.
Mientras tanto disfrutaba de estar allí, junto a mis
pensamientos, desde tu ausencia relacionados con vos.
Tal vez una pareja elige,ese sitio paradisíaco para renovar su amor,
O también ancianos que esperan la apertura de las canchas de
distintos juegos para practicar aquellos de su preferencia.
Cada uno tiene un abanico lúdico para elegir, pasando sus
momentos de ocio después de haber consagrado, una vida entera al trabajo digno.
Tan diferente al hoy, donde
hombres, mujeres y niños que deberían estar en las escuelas, acompañan a
sus padres a cortar calles exigiendo el aumento de los planes sociales,
impidiendo el tráfico sea normal.
Quienes llegan a sus trabajos no puedan hacerlo, ni tampoco
una ambulancia pueda llevar a un paciente a una unidad asistencial.
El caos es total.
No sé a quién favorece esa actitud temeraria.
Tampoco los comercios pueden abrir sus puertas para trabajar
con normalidad, pues en los grupos hay seres violentos.
La semana pasada hubo un acampe en plena Avenida 9 de Julio.
Poco pueden hacer las autoridades, ante semejante dislate,
dado que llevan niños y bebés para evitar el personal de seguridad actúe disuadiéndolos.
Todos y cada uno debería estar trabajando, los niños en la
escuela y los bebés en sus cunas durmiendo.
El mundo de la incoherencia se instaló en la Ciudad de
Buenos Aires. Los periodistas preguntan el motivo de los acampes a las mujeres
y la respuesta es siempre la misma “Si no venimos nos cortan los planes”
Los planes que son el diez por ciento de la población son
pagados por todos los argentinos, no por el gobierno.
Los adolescentes tienen el vocabulario tan acotado que los
maestros y profesores, quedan asombrados, por el desinterés en la educación.
Culpas repartidas entre el alumnado y los padres que no
obligan a sus hijos a leer un libro en lugar de estar como zombis, pendientes
del celular.
Falta mucho para comenzar a mejorar.
Exaspera la falta de reacción de quienes nos representan.
Hoy quiero dejarte unas letras que tienen que ver con el
inicio de esta conexión.
“BANCO DE PLAZA… UN PEDAZO DE HISTORIA
Autor: Boris Gold
Si hay alguien que puede
Hablar con soltura,
De tantas historia
Que tiene y tendrá,
seguro que nadie
Con más fundamento,
El banco de un parque
Los podrá…contar.
Receptó el llanto
De aquella muchacha,
Que pidió al cielo
Que lo haga volver,
A aquel que promesas
Prometió a montones,
Y nunca al malvado
Lo ha vuelto…a ver.
Qué triste se puso
Cuando en ese banco,
Lo vio a ese joven
Que temblando escribió,
Una triste carta
Dirigida al cielo,
Y a Dios preguntando
Porque…la llevó.
Historias muy hondas
Con olor a vida,
En ese escenario
Del banco aquél,
Donde las parejas
Se hacen arrumacos,
Y grabado tiene
Juan ama…a Raquel.
Y así es el tiempo
De un banco de plaza,
Cobijando a solos
Que penando están,
También a esa abuela
Que cuida a su nieto,
Y al que está cansado
De andar…por andar.
Te recuerdo siempre
Porque en mis delirios,
Fui también poeta
Y en tu regazo escribí,
Mis primeros versos
Para un amorcito,
Que lindos momentos
Los que allí…viví,
La placita de mi barrio
Era pura alegría,
En ella tuve sueños
De pibe andarín,
Su banco era el barco
Que yo timoneaba,
Ojalá tu recuerdo
Nunca…tenga fin.”
Querido hijo de mi existencia, necesito aparezcas en mis
sueños para poder darte un beso.
Acariciarte sería tocar el cielo con las manos.
Es absolutamente necesario
para los dos, podamos abrazarnos.
Impiadoso Cronos ha vedado ese tipo de probabilidad.
Jamás podré acostumbrarme a no tenerte más.
Mi ser de luz iluminando el sendero que no deseo transitar
más.
Imposible asimilar tu ausencia temprana.
El dolor me acompañará hasta el último día de existencia terrenal.
Enclave en el que no deseo
estar más.
Te amo tesoro, tanto que no es posible dimensionar.
En cada uno de estos enlaces te pediré por favor, nunca
olvides cuanto te quiere mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=-E2WxAM4jDk
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