RECUERDOS DE VIAJES

Buenos días hijo querido.

Te saludo en una mañana fría y húmeda, la baja temperatura se siente un poco más.

Mis musas decidieron viaja a las playas de Brasil, con el propósito  de encontrar  los destellos dorados del sol, acariciando nuestra piel y otorgando color a la misma.

Elegimos un espacio alejado, para  obtener el gozo deseado.

Debajo de una palmera dejamos las reposeras y los demás artículos, entregados por el dueño del parador.

El cielo despejado anunciaba una jornada espléndida.

El océano tranquilo, permitía nadaras con tu estilo clásico.

Las gaviotas revoloteaban a nuestro alrededor.

A ellas no les agrada deslizase por el agua como lo hacés vos.

Sin felices desplegando las alas para volar hacia donde deseen y luego regresar.

Ellas comentaron, estábamos debajo de una palmera de dátiles, fruto codiciado y de rico sabor.

Resulta maravilloso poder recrear los viajes que hicimos juntos.

Solo vos conocés,  no he regresado al  lugar donde compartimos los momentos más bellos que se pueden vivir.

Esa es la causa por la que decidí no regresar a  enclaves compartidos en familia, se notaría demasiado tu ausencia tan dolorosa.

Viajaremos juntos cuando podaos reencontrarnos.

Ocasión propicia para entregarte todos los besos que tengo guardados para vos.

No permitas marchiten dentro del cofre donde esperan llegar a su legítimo dueño.

Almorzamos en el restó,  de la playa, para luego descansar a la sombra de la bella palmera, y así pasadas unas horas realizar, los deportes acuáticos  que tanto te gustan y tomar sol con mucho protector solar.

Días soñados que no volverán a repetirse. Mientras permanezca en suelo terrenal.

Llegó el día de regreso.

Abordamos el pájaro de alas plateadas que nos traería a Buenos Aires.

En un instante de distracción decidiste comprar unos periódicos, para que leyera mientras viajábamos a nuestro refugio.

Nada es perfecto, en un instante doloroso no pude verte más.

Las lágrimas por tu ausencia no las pude contener.

La familia chiquita  en vano intentó consolarme, saben es muy difícil continuar, sin tu presencia adorada.

Imposible acostumbrase a vivir sin vos.

La imagen que antecede a este contacto fue tomada  por vos.

Los recuerdos se aglutinan en mi mente.

Todos son hermosos, hasta el momento de tu enfermedad.

Seleccioné letras relacionadas con esas plantas exóticas, decidiendo dejarlas en este espacio que nos une, a diario un poco más.

 

“Las palmeras

Autor; Pedro Antonio de Alarcón

 

«¡Quiero sol!» Moribunda dijo un día,

 

una palmera que en umbroso huerto,

 

amortajada,  en su ramaje yerto,

 

cual alma sin amor languidecía.

 

Y elevando sus ramas con porfía,

 

descubrió, al fin su copa el campo abierto,

 

y vio marchita, en medio del desierto,

 

otra palmera que de sed moría.

«¡Quiero sombra!» Decía esta palmera,

 

gimiendo por un soplo de frescura.

 

«¡Quiero sol!» Repetía la primera...

Y de ambas condolida el aura pura,

compaginó las cosas de manera

 

que gozaron de igual temperatura.”

 

Sigo n la búsqueda de palabras diferentes para contarte la inmensidad de mi amor hacia vos.

Es tan grande que no es posible dimensionarlo

Te amo y por eso siempre te pido aparezcas en mis sueños.

¿Cuándo podrías venir?

Quiero verte con una sonrisa.

Po ninguna circunstancia, convoques al llanto, nos hiere a los dos.

¿Cómo ayudar para que no notes,  estamos ausentes?

Mi lugar está junto  a tu hábitat  para cumplir  con las funciones básicas de una mamá que extraña a su hijo cada día más.

Incomprensible, solucionar temas en la tierra, fracaso en la probabilidad de un reencuentro rápido.

¿Nadie es capaz de entender, la distancia,  es enemiga de mis proyectos compartidos con el ser que más ano en la vida?

¿Cuál es el lenguaje que debería utilizar con la intención de ser escuchada?

Lejos de despejar tantas vacilaciones, las mismas van en aumento.

¿No entienden no deseo esta en este suelo hostil?

Te traje a la vida para que fueras vos, quien se ocupara de despedirme.

Todo sucedió de forma inversa y antinatural.

Con tu ayuda llegaré al destino que más añoro.

Cansa la espera carente de sentido

Es verdad, soy reiterativa.

Seguiré clamando por vos.

Abrigo la esperanza de encontrarnos pronto.

Los  hijos no deben morir.

Mientras llega ese momento ansiado, he de pedirte por favor, nunca olvides, cuanto te quiere,  mamá.

 

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=_BvHmFMpd4o&t=76s