Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana cálida y despejada.
Hace poco levantaron un ramal ferroviario, sin explicar las
razones de semejante decisión, dado que muchos ciudadanos dejarán de abordar los trenes que abordaban para dirigirse a distintas
actividades.
Las autoridades no ofrecieron ningún tipo de explicación,
sin tener en cuenta que las personas que están radicadas en las cercanías
deberán utilizar otros medios de transporte con el costo que ello implica.
Decisiones arbitrarias que perjudican a la sociedad,
ocasionado perjuicios innecesarios.
Visité la estación, encontrando está en perfecto de conservación.
Otra vez la historia se repite.
Al retirarme del espacio vi a un joven sosteniendo entre sus
manos una mariposa bicolor, rodeado de otras de la misma especie tan bellas
como su compañera temporalmente apresada.
Afortunadamente la persona que la sostenía entre sus manos
la dejó volar.
Entre todas comenzaron a ejecutar una danza colorida.
Revoloteando entre los rieles abandonados, levantaron vuelo
con destino desconocido.
El cielo mostraba su tristeza, comenzando a cubrirse de
densos celajes oscuros, como los pensamientos de algunos terrenales a quienes
aparentemente no respetan la libertad de esos insectos tan bonitos, alegrando la
vista de los que admiramos expresiones que a diario nos regala la naturaleza.
En esos instantes mi mente trajo imágenes de tu niñez.
Era de tu agrado sostener una mariposa para luego dejarla en
libertad.
Asombrado mostrabas tus dedos teñidos por los colores de las
alas de la mariposa, similares a pequeños tatuajes quedando en tu piel.
Ahora que hay demasiado ruido en las ciudades las mariposas
migraron hacia espacios silenciosos y así iniciar su danza cotidiana.
¿Cuándo llegará el momento en que el hombre deje de
inmiscuirse en la naturaleza?
Difícil hallar
respuesta a esta inquietud, capaz de conmover, a quien observa impotente ese tipo de
actitudes que no benefician a nadie.
Cada ser vivo merece su libertad.
No permitiendo que la misma sea vulnerada.
Para la fecha elegí una poesía de autor, con la intención de
compartirla con vos.
“DIVINA MARIPOSA
Autor: Rubén Darío
¡Divina Psiquis, dulce Mariposa invisible
que desde los abismos has venido a ser todo
lo que en mi ser nervioso y en mi cuerpo sensible
forma la chispa sacra de la estatua de lodo!
Te asomas por mis ojos a la luz de la tierra
y prisionera vives en mí de extraño dueño:
te reducen a esclava mis sentidos en guerra
y apenas vagas libre por el jardín del sueño.
Sabia de la Lujuria que sabe antiguas ciencias,
te sacudes a veces entre imposibles muros,
y más allá de todas las vulgares conciencias
exploras los recodos más terribles y oscuros.
Y encuentras sombra y duelo. Que sombra y duelo encuentres
bajo la viña donde nace el vino del Diablo.
Te posas en los senos, te posas en los vientres
que hicieron a Juan loco e hicieron cuerdo a Pablo.
A Juan virgen y a Pablo militar y violento,
A Juan que nunca supo del supremo contacto;
a Pablo el tempestuoso que halló a Cristo en el viento,
y a Juan ante quien Hugo se queda estupefacto.
Entre la catedral y las ruinas paganas
vuelas, ¡oh, Psiquis, oh, alma mía!
-como decía
aquel celeste Edgardo
que entró en el paraíso entre un son de campanas
y un perfume de nardo-,
entre la catedral
y las paganas ruinas
repartes tus dos alas de cristal,
tus dos alas divinas.
Y de la flor
que el ruiseñor
canta en su griego antiguo, de la rosa,
vuelas, ¡oh, Mariposa!,
¡a posarte en un clavo de Nuestro Señor!”
Tesoro te amo y extraño siempre un poco más.
Es demasiado el tiempo transcurrido desde tu ausencia
inesperada e injusta.
¿Cuándo aparecerás en mis sueños?
En estado onírico, tendría la posibilidad de estrecharte en
un abrazo interminable.
Otra de mis utopías es poder acariciarte como ayer.
Reiniciar nuestras charlas sería un sueño cumplido.
No he conocido a nadie que pueda comunicarse, con su
primogénito, conversando sin utilizar el don de la palabra, solo las miradas
desbordadas de amor de una madre hacia su hijo. Quiero entregarte todos los
besos aletargados que guardo para vos.
Para lograr esos objetivos necesito, abandonar suelo terreno,
para ello preciso tu ayuda.
He vivido, creo que es hora de partir hacia donde se
encuentra tu hábitat.
Hasta el momento mi búsqueda entre las estrellas ha sido
negativa.
Son tantas las que brillan en el firmamento que la
búsqueda no ha tenido los resultados que
deseo
¿Qué sucede cuando las estrellas se apagan por causas
naturales del universo?
¿No existe nadie capaz de responder, con argumentos
sostenibles en el tiempo?
Temo no recuerdes a mamá, en el momento de mi arribo.
¿Por qué todo se mantiene en riguroso secreto?
¿Es tan difícil
responder?
Hijo querido, ser de luz, como es habitual en estas
conexiones, no dejaré de reiterar mi
pedido como si fuera una letanía.
Por favor querido, mi amigo más fiel, nunca olvides cuanto
te quiere,
Mamá
https://www.youtube.com/watch?v=edXGzd4SXtM
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