Buenos días hijo querido.
Te saludo en una mañana diáfana, brilla el sol de la
alborada.
Mis musas quieren realizar una ofrenda a la noche.
Han tenido la feliz ocurrencia de hacerle llegar un libro
con imágenes, para ello requirieron mi ayuda.
La misión era sostenerlo en las manos, elevándolo hacia el
cielo.
Sorprendida asistí a vistas bellísimas.
Desde un celaje blanco, una luz brillante iluminaba las
páginas del texto, que luego procedí a leer.
En cada hoja el autor, relataba las noches en distintos lugares,
del mundo.
Bajo un manto de estrellas, se destacaban las letras y el
contenido de un libro maravilloso.
Cada noche era una historia de vida, algunas con final
feliz.
La pluma del escritor transmitía sentimientos, generados por
el amor en general.
Enseñanzas de vida, para adoptar.
En muchos pasajes de las historia sentí plena identificación
con la nuestra,
Breve, e intensa como
nuestra realidad en suelo terrenal.
Letras tan vívidas que lograron como siempre, te percibiera
junto a mí, más allá de la distancia física que nos separa, desde hace más de
siete años.
Alguna vez en mis estados oníricos me pediste no contara,
los días, semanas o meses de ausencia.
No he podido lograrlo por el imperio del amor más profundo
que se convierte en nuestra piel.
No es un libro de tapas lujosas, sin embargo el valor es
incalculable por el contenido de aquel.
Desde que tengo recuerdos, poseo adicción a la lectura.
Han llegado ejemplares clásicos de todos los tiempos,
desarrollados en cualquier lugar del orbe.
A través de ellos pude acceder a diferentes culturas,
aceptando sus creencias y manera de conducirse en realidades diferentes a las
nuestras.
En un punto todas coinciden en el sentimiento más puro, que
puede existir que conocemos como amor leal.
No es fácil llegar a ese estadío, es necesario mantener la
mente abierta y así poder disfrutar y aprender la sabiduría del pensamiento de
distintos autores.
Mis preferidos son los pensadores griegos, nacieron en la
cuna de la cultura que perdura a través del tiempo.
Resulta placentero, releerlo, siempre encontramos algo
novedoso para seguir en cada derrotero impuesto por el destino, intentando
llegar al final determinado por Cronos, en ocasiones con mucha crueldad
desmesurada, poco le importa arrancar a seres luminosos como vos, para
llevárselos a planos desconocidos por terrenales y humanos.
He de hacerle notar, no es bueno el silencio hacia una mamá
que siempre lo abordará para preguntarle por su hijo y amigo más fiel.
Para la fecha quiero dejarte una poesía de autor referida a
la noche, es mi deseo compartirla con vos, por ello la dejo en el espacio de
este contacto que tiene la virtud de acercarnos siempre un poco más.
“Cantar del Alma
Autor; San Juan de la Cruz
Qué bien sé yo la fuente que mana y corre.
Aunque es de noche.
Aquella eterna fiante está escondida...
Qué bien sé yo do tiene su manida,
Aunque es de noche.
Su origen no lo sé, pues no le tiene,
Más sé que todo origen de ella viene,
Aunque es de noche.
Sé que no puede ser cosa tan bella,
Y que cielos y tierra beben de ella.
Aunque es de noche.
Bien sé que suelo en ella no se halla,
Y que ninguno puede vadealla.
Aunque es de noche.
Su claridad nunca es escurecida,
Y sé que toda luz de ella es venida,
Aunque es de noche.
De ser tan caudalosas sus corrientes,
Que infiernos, cielos riegan, y a las gentes,
Aunque es de noche.
Aquesta eterna fuente está escondida,
En este vivo pan, por damos vida,
Aunque es de noche.
Aquí se está llamando a las criaturas,
Porque de esta agua se harten, aunque a escuras,
Aunque es de noche.
Aquesta viva fuente, que deseo.
En este pan de vida yo la veo.
Aunque es de noche.”
Tesoro de mi existencia, preciso verte para darte uno de los
tantos besos que tengo guardados para vos.
No olvides pasar por mis sueños, anhelo decirte cuanto te
amo y extraño.
Es imperioso encontrar el instante para darte ese abrazo
demorado por el que claman mis brazos.
Ha pasado demasiado tiempo sin que pueda acariciarte,
rememorando el ayer, tan lejano en el tiempo.
Más de siete años de ausencia es una eternidad intolerable.
Es muy difícil transitar la vida sin vos.
Se extraña al hijo y al amigo más fiel.
Nunca encontré otro joven que se parezca a vos.
¿Hasta cuándo estaré cautiva, sin conocer los motivos del
encierro?
¿Acaso no saben no deseo permanecer en suelo terrenal?
¿Qué palabras utilizar, para que comprendan el malestar de
despertar a diario sabiendo no te encontraré?
¿Podrías ayudarme a llegar a la estrella en que se halla tu
hábitat?
Mi búsqueda continúa, pese a la falta de éxito.
Jamás bajaré las expectativas,
Cuento con la energía enviada por vos.
Hijo de mi vida, como siempre en estas conexiones, he de
pedirte por favor, nunca olvides cuanto te quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=rz1FX6-LlyQ
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