Buenos días hijo querido. Te saludo en una mañana
primaveral.
Para la tarde la temperatura será propia del estío.
Ayer, al atardecer en la Casa de la Cultura, del Municipio
ofrecieron un concierto de violín al que asistí en compañía de mi amiga Laura.
Las dos disfrutamos del arte del concertista.
Las melodías nos hacen viajar con la imaginación a tiempos
compartidos con tu amorosa compañía.
Sobre el escenario habían colocado una silla, el violín con
su arco, una flor, más una copa de vino.
La sobriedad impactaba.
No hace falta demasiado, para disponerse a escuchar a un
virtuoso en el arte musical.
En el momento que bajaron las luces el silencio fue total.
Apareció un joven, en ese instante los aplausos le dieron la
bienvenida,
La mayoría de los asistentes lo conocía de otros conciertos.
Comenzó con música clásica y luego continuó con temas
actuales, reversionados para poderlos tocar con ese instrumento mágico.
Fue emocionante escuchar los primeros acordes del violín,
con la música de “El violinista sobre el tejado”.
Pese a su juventud el concertista tenía un manejo del
escenario impresionante.
Sus manos empuñando
el arco, volaban como pájaros sobre las cuerdas del violín.
Varias veces fue interrumpido por los aplausos del público.
Elegante con una inclinación de su torso agradecía las
muestras de admiración.
Público de todas las edades asistió al evento de un maestro
de la música.
Terminados los acordes de la música clásica, sorprendió
tocando versiones reconocidas de temas
pop.
Los gestos de admiración se multiplicaron a medida que
avanzaba el concierto.
A la salida del espectáculo, con Laura fuimos a cenar a un
reconocido restó de la zona, el mismo al que asistimos juntos hace tiempo.
Los recuerdos afloran en esos instantes, es allí donde
quisiera tener la potestad de regresar en aquel y así darte el beso que tanto
deseo.
Utopía espero se cristalice en corto tiempo.
Para hoy elegí frases de reconocidos autores aludiendo a ese
instrumento tan frágil como el violín.
Como es costumbre anhelo compartirlas con vos, mi amoroso
ser de luz.
“La felicidad es un arte para practicar, como el violín”.
John Lubbock.
“Cuando tocas una pieza de violín, eres un narrador y estás
contando una historia”. Joshua Bell.
“Sé que la mayor alegría de mi vida ha venido de mi violín”.
Albert Einstein
“La mayoría de los maridos me recuerdan a un orangután que
intenta tocar el violín”. Honore de Balzac.
“Una mesa, una silla,
a un cuenco de frutas y un violín; ¿Qué más necesita un hombre para ser
feliz?”.
Albert Einstein.
“Amo el poder. Pero es como artista que me encanta. Me
encanta como a un músico le encanta su violín, sacar sus sonidos, acordes y
armonías”. Napoleón Bonaparte.
“Se necesita para
descubrir la totalidad a través de los demás. Si te das cuenta de que eres solo
un violín, puedes abrirte al mundo interpretando tu papel en el concierto”.
Jacques Yves Cousteau.
Tesoro de mi vida, te amo y extraño de manera incondicional.
Espero encontrarme con vos en un plazo breve.
Es muy difícil continuar si la presencia del hijo y amigo
más fiel.
Jamás pasarás a ser un recuerdo, dado te percibo en cada
rincón de mi refugio.
¿Cuándo aparecerás en mis sueños?
Necesito verte, con la intención de estrecharte en un tierno
abrazo.
Tener la posibilidad de acariciarte, como lo hace cualquier
madre con su descendiente.
Escapa a mi comprensión por qué tengo vedadas esas
funciones.
Los arbitrios del destino me castigaron de la peor manera.
Castigo inmerecido para cualquier mujer.
Conocí la felicidad cuando te tuve en mis brazos por primea
vez.
Instante gravado en mi memoria hasta que llegue mi propio
final.
El destino quiso conociera el horror, cuando te arrancó de
mi lado de manera abrupta.
¿Estábamos juntos, por qué te eligieron a vos?
Era yo quien debía partir.
No concibo hayas recorrido el sendero que lleva a la
eternidad, en absoluta soledad.
Sin nadie que pudiera guiarte.
Siempre salimos juntos.
¿Por qué en esta ocasión
te obligaron a ir solo?
¿No tuvieron en cuenta la cantidad de proyectos y sueños,
que tenías por cumplir?
¿Es posible tanta falta de humanidad?
En las noches despejadas te busco ente las estrellas, aún no
te encontré.
Situación que fortalece mi búsqueda.
Jamás cesará.
¿A quién pedirle ayuda para volar hacia vos?
Es una situación espantosa continuar en territorio hostil.
Necesito ser parte del Universo donde se halla tu hábitat.
Siento estoy ocupando un espacio que no me corresponde.
Deseo abandonarlo prontamente para encontrarme con vos y así recuperar
pinceladas de paz.
Mi cielo, en cada uno de estos contactos, que nos acercan
más. No dejaré de reiterar mi pedido.
Que todos sepan lo haré de forma cotidiana, en nombre del
amor y empatía que generaste en mí, por favor nunca olvides cuanto te quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=1obMvmUVV2o
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