JAMÁS SE DETIENE

Buenos días mi precioso. En pocas horas finaliza otro año. Quien se va por los senderos del tiempo será inolvidable para toda la humanidad por la pandemia que afectó a millones de personas. Aquí algunos relataron la llegada de las vacunas de Rusia como si fuera una gesta histórica. Poco sabemos de ella, como no soy médica infectóloga, no pienso opinar ni del origen tampoco del contenido, Simplemente me pareció exagerada la forma de recibirla. Ruego la inteligencia prevalezca antes que la popularidad. Los argentinos de bien deseamos fervorosamente todas las vacunas sean exitosas para el bien de todos. A mis compatriotas ante los números altos nuevamente, les pido sean solidarios, se cuiden para cuidar a los demás. Recuerden, el barbijo no es para usar como echarpe alrededor del cuello sino para tapar la boca y las fosas nasales. Desafiar una enfermedad puede producir más víctimas de las que hay. Mi relato no pretende ser un boletín sanitario. Es otra conexión con mi hijo, como realizo desde hace poco más de cinco años. Perturba el paso del tiempo, jamás se detiene. Es una rueda infernal que me lleva a seguir contando los días de ausencia en los que no he podido darte un beso. Deseo contarte algo sucedido cuando aún no habías nacido. Transitando una calle de una ciudad solitaria, algo brillaba en el pavimento. Minutos antes había sido arrojado desde un auto. El cristal del reloj terminó siendo un puñado de añicos. Los cristales no cayeron sobre el cemento oscuro de la calle, Desconozco el motivo por el que comenzaron como si fueran hojas, empujadas por el viento se dirigieron al universo. Las agujas del reloj quedaron paralizadas en la oscuridad de la noche. En la esquina se ubica un puesto de diarios y revistas. Permanece abierto las veinticuatro horas Es atendido por su dueño y los socios que son sus hermanos. Los conozco por saludarlos cada vez que paso por allí o intercambiábamos algunas palabras, cuando me detenía a buscar alguna revista. Por aquel entonces, eran de mi agrado las que en el interior, tenían cuentos de escritores consagrados y otros amateur. El dueño del puesto me pidió si me quedaba unos segundos. Deseaba levantar el reloj que aún estaba sobre la calzada. Las manecillas del reloj se habían detenido por el golpe. Escuché una historia estremecedora. Quien tiró el reloj por la ventanilla, es una mujer que suele pasar temporadas largas internada en un instituto neurosiquiátrico. Cuando recibe el alta sale con su auto y un reloj al que previamente ajusta siempre con el mismo horario. No pude disimular la incredulidad. Al notarlo el dueño del negocio buscó en uno de los estantes, relojes similares que había mandado reparar. ¿Por qué motivo esa reacción tan singular? Esa mujer dio a luz a una niña, Recuerda que la misma vació con vida escuchó su llanto. La trasladaron a una habitación y a la beba a la nursery, para practicarle los primeros estudios. Ante la demora en traerle a su hijita, comenzó a reclamarla de manera insistente. Le colocaron una inyección para dormirla. Cuando despertó le anunciaron la muerte de la niña. Pidió le trajeran el cuerpo de aquella. No era la recién nacida exhibida. Formuló la denuncia en todas las instancias, nunca tuvo respuestas, Expresan los juristas que saben administrar justicia “Tiempo que se dilata verdad que huye” Aplica perfectamente a este caso y tantos otros. Un investigador privado contratado por la madre, luego de una larga investigación, descubrió que en esa maternidad ocurrían con frecuencia los cambios de bebés. La mujer nunca pudo reponerse de tan horroroso desenlace. Por ello cuando le dan el alta compra los relojes de mesa, los ajusta a la hora que nació su hija, para luego arrojarlo desde su vehículo. La intuición de una madre nunca falla. Se reconoce a un hijo antes de haber nacido. Ese estado pasará si algún día puede encontrar a la niña. El tiempo jamás se detiene, hoy que se va un año funesto, recordé esta triste historia de amor maternal. En mi caso fue diferente, pude tenerte conmigo hasta el último día. Tu pasaje por la vida fue demasiado breve. Cronos sigue su marcha. Me gustaría anclar su esencia en el momento que estabas con vida y sano. Poder disfrutar una vez más al sumergirme en tu murada. Abrazarte y darte todos los mimos que se le ocurren a una mamá. Comprendo la historia de esa mujer. Por más internaciones que tenga nunca olvidará a su hijita. No alcanza con la pena máxima impartida por la justicia. Lamentablemente, en algín lugar de nuestro territorio tan amplio está ejerciendo delitos de esas características. Ayer, hoy, mañana estos dislates seguirán ocurriendo. No somos los únicos en el mundo, pasa en otros países también. ¿Qué decirte mi tesoro? Te amo como a nadie en este y otros mundos. Desearía recuperar las creencias. Mi prioridad es llegar a vos. No separarnos nunca más. Seré una mujer plena cuando el tiempo se detenga solo para mí. Por favor nunca olvides cuanto te quiere mamá. https://www.youtube.com/watch?v=A_MjCqQoLLA