Hola mi vida adorada.
Te saludo en una mañana extremadamente fría.
El rigor de la temperatura se hace sentir.
Para relajarnos nada mejor que escuchar un programa musical.
Imaginé las notas del pentagrama, emergiendo de una copa de
cristal.
Todos los instrumentos al unísono entonan melodías imbuidas
de amor.
Expresan el mejor de la condición humana, con el objetivo de
acariciar el alma de todos los terrenales y humanos que habitan Gea.
Sesean llegar a tu cielo, por ello los acordes son suaves,
para no despertar a los ángeles, aún
somnolientos.
Música para calmar a los espíritus contrariados por los
sucesos ocurrentes en el país.
Los funcionarios no cesan en sus equivocaciones, dañando a
la población, cuando nos enteramos hace días, por medio del gobierno de
Paraguay del aterrizaje de un avión, transportando agentes de espionaje.
Nuestra patria sufrió dos atentados letales, pendientes de
resolución, pese a que pasaron varios años, la Señora Justicia tiene los ojos
más vendados que nunca o está perdiendo
imparcialidad al no contemplar situaciones que pueden tener consecuencias
graves para todos los ciudadanos.
Saturada de tanta información brindada por los medios
propios y del exterior, he optado por abstraerme de la realidad, escuchando
acordes de canciones de todos los tiempos.
Es más sano para la psiquis, oír música que estar tan
informado.
Ello no implica esté ausente de la realidad.
Llama la atención el silencio de los funcionarios,
Hasta el día de ayer solo quien está a cargo de la Agencia Federal
de Inteligencia salió a culpar a los medios de comunicación sin hacerse
responsable de absolutamente nada.
Los de mayor rango no han emitido palabra, están dedicados a
la futura campaña electoral, violando el contenido de la Ley Electoral que solo
permite ese tipo de propaganda cuarenta y cinco días antes del comienzo del
proceso de las elecciones primarias.
Cansada de la novela del avión que nadie investiga y tiene
orden de secuestro de parte de Estados Unidos, decidí dedicar mi tiempo libre
para ver series o escuchar música.
Los valores se han tergiversado, quienes debe develar ese
misterio peligroso es el Estado Nacional.
La música, trae recuerdos compartidos con el más noble de
los sentimientos.
Da todo sin pedir nada a cambio.
Cuando finalizo estos contactos que nos unen un poco más,
miro los títulos de los periódicos reconocidos.
No pierdo tiempo en leer el contenido, dado que todos son
similares.
Tu cantante favorita, relanzó un CD, con los temas más
conocidos, en versiones de música ligera.
Es cierto, amabas todas las expresiones musicales.
Ella ocupaba en tu alma un sitio especial.
Esbozo la mueca de una sonrisa, cuando entrabas a casa y
decías
¡Otra vez música de iglesia, mami!
No era tal, sino versiones instrumentales de canciones que
desde siempre me han gustado.
Actualmente la música me acompaña para alejarme de las
noticias poco gratas.
Para hoy elegí, letras de autor relacionados con el tema de
este contacto, como siempre las dejo para compartir.
“MÚSICA SOBERANA
Autor: Guillermo Gagliardi
Entro, circularmente
en la música soberana
de Juan Sebastián Bach.
Acuden, los ángeles
con su cántico celestial.
Suenan, devotos, los violines.
El coro eleva sus voces.
Subido tono
Que siembra caridad y misericordia
entre las gentes.
Altura de gran música:
crea un ámbito gigantesco
de sacralidad y perfume de esencias finísimas.
Me inunda una Luz, radiante,
una Paz, única:
asoma el Gesto del Divino Padre y el Amado Hijo.
Mi pobre escritura
no alcanza a más…
Pero mi espíritu estalla.
Mi mente se apacigua.
Mi Fe vibra, incesante.
El mundo reverdece en colorido homenaje.
¡Dios pasa por mi lado!”
Hijito tenés una mamá que desde tu ausencia se ha tornado
reiterativa y a diario quiere sepas cuanto te amo y extraño.
No comprendo como he llegado a sobrevivir casi siete años,
sin tenerte.
Es imperioso para mi existencia poder darte un beso,
abrazarte y mimarte como en ese ayer, tan lejano en cuanto a distancia se
refiere.
Siempre estás en mi corazón y en cada célula de mi ser.
Si existe la posibilidad de un reencuentro, quiero se
produzca, con rapidez.
¿Cuál es el sentido de esperar?
Si de mí dependiera, ya hubiera comenzado el ascenso hacia
tu hábitat.
Nadie escucha mis anhelos más profundos
Hijo querido, en cada enlace maravilloso que me hace sentir,
estamos más cerca, no dejaré de elevar mi pedido habitual, hijo querido, por
favor, nunca olvides cuanto te quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=p_7IdMQffUc
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