Buenos días hijo querido.
Te saludo en otra mañana invernal.
Pese a la baja temperatura, a media mañana salí a caminar,
lo hice a la inversa de otras ocasiones.
Detuve mi marcha ante una casa que posee una fuente
ornamental en el espacioso jardín, el agua que brota de la misma forma,
diferentes figuras.
En este caso se veía la imagen de una mariposa cristalina
formada por las gotas de agua; un picaflor solitario y confundido intentaba
lograr amistad con la mariposa.
Revoloteaba a su alrededor, tratando de rozar su esbelto
pico, sin advertir que se mojaría con el agua.
Estuvo varios minutos
para lograr su objetivo, saque mi celular del bolsillo de la campera para tomar
una foto de tan curiosa situación.
Se trata de la imagen que antecede a esta conexión que a
diario establezco con vos.
Quise compartirla, dado que nunca antes había visto un
pájaro de esa clase cuando hace tanto frío.
Se siente bien cuando los pájaros buscan amistad con alguien
de su especie.
Ciertos terrenales deberían mirarse en ese espejo tan
particular.
Produce tristeza cuando aquellos solo buscan esa relación
tan hermosa que nos otorga la vida para combatirlos y luego ignorarlos como si
el otro no existiera.
Ahora comprendo tu don de gente, al no esperar nada del otro
dando todo lo que estaba a tu alcance o buscándolo para que no se sintiera
frustrado.
En mi caso tomo el camino más corto, en búsqueda de atisbos
de paz directamente los paso al terreno de la no existencia, ello no implica
sienta rencor ni otros sentimientos negativos.
Para eso basta con encender la televisión y ver a los
funcionarios que desean perpetuarse en el poder, vertiendo ofensas públicas que
los retratan tal cual son.
No han cumplido las promesas de campaña y cuando falta más
de un año para las próximas elecciones, olvidan los problemas de los ciudadanos
anteponiendo sus ansias de seguir usufructuando los espacios que ocupan hoy.
Indolencia total.
No seré quien les haga comprender la existencia de otras
prioridades.
Son sinónimo de egoísmo
y ostentación de ego superlativo.
No alcanzo a comprender ese tipo de convicciones cuando
esbozan sus pensamientos tan alejados de la realidad.
Por ello amo el humanismo y me sorprenden las actitudes
nobles como las del picaflor confundido tratando de trabar amistad con una
mariposa de agua.
Espejo en el que muchos deberían mirarse, demostrando les
llega el padecimiento de los otros.
Para la fecha seleccioné, grafemas de autor, referidas a los
protagonistas de este contacto.
Deseo compartirlos con vos.
“A LA MARIPOSA
Autor: Carolina Coronado
Bien hayan, mariposa,
las bellas alas como el aire leves,
que inquieta y vagarosa
entre las flores mueves,
ostentando, tu púrpura preciosa.
De blanda primavera
bien haya la callada y fiel vecina,
la dulce compañera
del alba cristalina,
perdida entre la flor de la pradera.
Ligera y afanosa
el prado mide tu inseguro vuelo,
ya huyendo temblorosa,
ya con ansioso anhelo
en las flores vagando codiciosa.
Bien haya el purpurino,
el vaporoso polvo de tus alas,
que al aire de continuo
puro y luciente exhalas
al abrirte en sus ámbitos camino.
¡Ay! goza, mariposa,
la pasajera vida de dulzura,
que vuela presurosa:
goza, allá tu ventura,
revoloteando en la siesta silenciosa.
Apura de las flores
el empapado cáliz que te ofrecen,
y apura tus amores;
que ya en la noche acrecen
del otoño los vientos destructores.
Y eres frágil y bella,
y tu belleza el cierzo descolora.
Si sañudo atropella
tu gala seductora,
ni aun de tu forma quedará la huella.”
Tesoro de mi existencia, te amo,
Te extraño mucho más.
Continúa la necesidad imperiosa de darte un beso.
Estrecharnos en un abrazo como antes.
Acariciar tu carita cuando notaba estabas preocupado por
alguna razón.
Capaz
de borrar tu sonrisa que iluminaba tu mirada.
Extraño la tibieza de tus manos cuando tratabas de
transmitir calor a las mías que siempre están frías.
Sigo con la costumbre de no usar guantes.
Guardo en la cajonera del placad muchos de los que recibí de
tus manos.
Te amo y extraño cada día un pocos más, es inmenso el poder
del amor que inspiraste en mamá.
Quiero contarte no es un capricho el deseo de dejar
territorio de Gea.
No estoy cómoda aquí.
El espacio de una madre está junto a su hijo.
Aterra tu soledad, preciso saber cómo estás.
Ocupar una estrella cerquita de la tuya.
En estos casi siete años de ausencia, han sucedido,
demasiados episodios.
Algunos gratificantes, otros que nunca se podrán olvidar.
Comprendo no es de tu agrado, de manera constante, te pida
ayuda para partir.
Espero consideres que es al único que puedo realizar
semejante petición.
Mis pensamientos serían otros si estuvieras aquí.
Los arbitrios del destino no siempre son benéficos.
En nuestro caso interpusieron una distancia no deseada y
menos pensada.
“Los hijos no deben morir”
Chiquito hermoso, sos el pilar que me sostiene, e impide caiga en la profundidad de los
abismos ancestrales.
Cada vez que establezca un enlace con el ser que más amo en
la vida, he de reiterar mi solicitud, por favor, hijo amoroso, mi ángel
guardián te pido siempre nunca olvides cuanto, te quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=3XSRauIjCTk
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