LA ESPERA

Buenos días mi tesoro adorado.
Nuevamente se prolongará el aislamiento.
Hoy se cumple el día número setenta y cinco.
Da la impresión que no se habla con la sociedad sosteniendo verdades.
Solo fotografías cuya data es de dos semanas.
La realidad solo la conoce un ser superior que no ha iluminado a quienes deben transmitirla sin mentiras.
No lo afirmo yo, los ministros del área de salud son los que han dicho más de una vez desconocer datos de la inmediatez.
No resultan agradables las comparaciones con otros países.
No importa si las autoridades tienen una ideología diferente a la nuestra.
Deberían quienes así se manifiestan, considerar que en el medio hay terrenales que han perdido la vida por este virus letal que atacó al mundo.
Nadie está
Inmune.
La pandemia no se fija en la edad de quienes atacará.
Le puede pasar a cualquiera por ello la palabra respeto ante el dolor ajeno nunca está de más.
Por la experiencia surgida en el hemisferio norte, el virus pareciera hallar confort en los lugares fríos.
Faltan poco más de quince días para que llegue el invierno.
Salgo de esta especie de informe sanitario para contarte un sueño loco.
Por las características del mismo sería una pesadilla.
Los médicos dicen que suelen ocurrir durante un encierro prolongado.
Todo suele cambiar en estado onírico.
Los sucesos, se desarrollaban, en un departamento ubicado en una avenida.
Una larga hilera de autos de alquiler esperaba algún ocasional pasajero.
Pese a ser una arteria importante, las luminarias no coincidían con la época actual.
Se trataba de antiguos faroles apoyados en altas columnas pintadas de color negro.
El agua producía efectos en aquellos.
Pese a ser los artefactos que todos conocemos el efecto del la lluvia copiosa los hacía ver de manera circular.
Cuando el cielo llora puede distorsionar las imágenes.
Miraba por la ventana del departamento donde me hallaba.
El silencio y la oscuridad asustaban.
A lo lejos una mujer suplicaba la dejaran tranquila.
A medida que iba acercándose al sitio donde estaba las voces eran más claras.
Pude interpretar se trataba de una pareja.
Ella imploraba no la persiguiera más.
La relación había concluido y no pensaba retomarla.
El hombre parecía desquiciado, en un momento las amenazas subieron de tono.
Ella comenzó a correr hasta la hilera de taxis con la intención de huir.
En ese instante con un golpe certero la mujer cayó al piso.
Él aprovechó para concluir su obra y escapar.
En el ínterin llamé a emergencias y a una ambulancia.
Las autoridades policiales demoraron en arribar.
Rápidamente comprobaron la mujer yacía en la vereda sin vida.
La lluvia había aumentado si intensidad.
El cuerpo fue tapado con unas frazadas que bajaron de una de las ambulancias.
El personal policial cotó la arteria pues había que esperar llegara el fiscal de turno, para realizar las primeras observaciones preliminares y luego derivar el óbito a la morgue judicial para averiguar las causas de la muerte.
Sentí un dolor agudo en el pecho que produjo me despertara.
Así son mis reacciones ante la muerte.
Pensé si también quienes mueren en situaciones violentas encuentran paz en sus sepulcros.
Quise levantarme de esa cama desconocida para ir en búsqueda de un vaso de agua.
Estaba mareada,
Tenía miedo de caerme.
Al tomar estado de conciencia plena pude advertir me halaba en mi dormitorio.
Con la mente más clara recordé que en el día de ayer se cumplieron cinco años del Colectivo de las mujeres que tiene como consigna “Basta de Femicidios”, para recordarla a todas y cada una de esas víctimas uno de los diarios de mayor circulación en nuestro país, junto a Organizaciones Internacionales, decidieron publicar en cada país, en el periódico de mayor circulación un obituario para que el mundo termine con la matanza de mujeres.
Curiosamente en época de aislamiento los números han aumentado de manera preocupante.
Mi tesoro querido, tanto caudal de información provoca estas insólitas ucronías.
Por ello al inicio de este contacto te hablaba de un sueño loco.
Como buena ciudadana en el sueño me decía, debo ser una de las pocas vecinas que en una noche espantosa por el frío y la lluvia,
escuchó discutir a la pareja y tuve la mala experiencia de presenciar un asesinato o femicidio en este caso a pocos metros de mi supuesta ventana.
Junto a vos aprendí, a colaborar con quienes lo necesitaran.
Has sido tan humano que siempre pesaste en el sufrimiento de terceros sin importarte de quienes se tratara.
Tampoco has sido de aquellos que esperaban gratitud.
Sabio y luminoso desde pequeñito.
No he conocido en mi realidad, terrenales despojados de todo aquello que significa lo material.
Espero que muchos puedan mirarse, en el espejo de tu mirada.
Te extraño.
Me hacés falta.
Duele la soledad que viene de la mano del después del final.
En nuestro caso no fue un adiós definitivo, esa palabra la cambié ante tu cuerpo inerte y gélido, por un hasta pronto.
Despedida que no llega a cristalizarse.
He repetido hasta el cansancio que nada me ata a suelo terreno.
Ello no implica que mientras esté aquí abandone tu búsqueda.
En muchas ocasiones me gustaría creer en la existencia de otros mundos posibles.
El golpe asestado con tu muerte, desestabilizó mi estructura.
Con tu ayuda pude reconstruir esto que soy ahora.
Jamás volveré a ser la de antes.
No es un capricho.
Se puede recuperar la apariencia del cuerpo.
No existe la más remota probabilidad de componer las hilachas que penden del alma.
No existe el tiempo que posibilite morigerar el dolor de una falta tremenda.
De la muerte no se regresa, del profundo dolor producida por ella nunca se sana.
Vivo para extrañarte.
Pensar que en la espera algún día aparecerás en mis sueños, no para traer tragedias sino para darte un beso que quiere abandonar el letargo.
Te amo más que a nadie en el mundo por ello te pido nunca olvides cuanto te quiere tu mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=fcD0FXmvi8s