ALLÁ EN TU CIELO

Buenos días amor de mi alma.

Te saludo en una mañana tan desapacible como cargada de tristeza.

Hace seis  años te  trasladábamos a otro sanatorio en busca de la pócima que te trajera a la vida,  sano,  vital.

Desgraciadamente no ocurrió, la muerte en un segundo te arrebató de mi lado para siempre.

Desolada, hoy te busco en tu cielo.

Imagino los planetas pues no llego a divisarlos.

¿En cuál estás?

Te imagino brillando entre los anillos de Saturno, embellecido por una lluvia de estrellas y constelaciones.

En ese espacio deseo estar y cumplir la utopía de darte un beso.

Posibilidades que se  niegan, desconociendo la razón.

Es natural que una madre, desee besar a su hijo.

¿Por qué no puedo hacerlo yo?

¿Es necesario interrumpir vínculos  que deberían ser eternos?

Tu soledad duele.

Entiendo estás en un ambiente desconocido.

Nadie sabe si estás solo o has podido encontrarte con quienes te antecedieron en el  camino o quien te precedió.

¿Por qué  nadie responde a mis requerimientos?

¿Por qué hace tanto tiempo no puedo soñarte?

Como cualquier madre desearía abrazarte al despertar.

¿Quién lo hace en la oscuridad?

No existe peor martirio que ver tus cosas, sabiendo nunca más las usarás.

¿Por qué nadie me enseñó a vivir sin vos?

No es natural  un hijo, , llegue a su morada final, como si no hubiera tenido familia.

Aquí en suelo terrenal solo puedo ver las estrellas.

No son de escarcha como manifestaba Federico García Lorca en sus poesías.

Permanecen con un frío imposible de explicar.

Me piden no llore, comience el tránsito por el camino de la aceptación.

Estoy impedida de hacerlo.

Nadie en sus fueros íntimos  aceptaría la muerte de un hijo.

Cuando se le otorgó vida para que viviera y no para que la ausencia se produjera pocos años después .

¿Qué debo aceptar?

No es posible.

Las mejores intenciones acompañan a quien quiere ayudar a través de  la palabra que conforta.

Cuando de la muerte de un hijo se trata, todos los grafemas sobran.

Se agradecen las buenas intenciones de quienes intentan paliar el dolor.

En este caso es imposible.

No es factible aceptar aquello irreversible.

Te pido vengas a mis sueños.

Quiero saber su allá en tu cielo, has tenido la posibilidad de ver de cerca el sistema solar.

¿Cuál fue el planeta que llamó tu atención, más allá de la historia de cada uno.

¿Han permitido los visites?

Muchos poetas han escrito sobre ellos, quisiera compartir con vos un poema de Pablo Neruda haciendo referencia a ellos.

¿Leemos?

 

“ODA A LAS ESTRELLAS

Autor; Pablo Neruda

 

 

Asomando a la noche

en la terraza

de un rascacielos altísimo y amargo

pude tocar la bóveda nocturna

y en un acto de amor extraordinario

me apoderé de una celeste estrella.

Negra estaba la noche

y yo me deslizaba

por la calle

con la estrella robada en el bolsillo.

 

De cristal tembloroso

parecía

y era

de pronto

como si Ilevara

un paquete de hielo

o una espada de arcángel en el cinto.

 

La guardé

temeroso

debajo de la cama

para que no la descubriera nadie,

 

pero su luz

atravesó

primero

la lana del colchón,

 

luego

las tejas,

el techo de mi casa.

 

Incómodos

se hicieron

para mí

los más privados menesteres.

 

Siempre con esa luz

de astral acetileno

que palpitaba como si quisiera

regresar a la noche,

 

yo no podía

preocuparme de todos

mis deberes

y así fue que olvidé pagar mis cuentas

y me quedé sin pan ni provisiones.

 

Mientras tanto, en la calle,

se amotinaban

transeúntes, mundanos

vendedores

atraídos sin duda

por el fulgor insólito

que veían salir de mi ventana.

 

Entonces

recogí

otra vez mi estrella,

con cuidado

la envolví en mi pañuelo

y enmascarado entre la muchedumbre

pude pasar sin ser reconocido.

 

Me dirigí al oeste,

al río Verde,

que allí bajo los sauces

es sereno.

 

Tomé la estrella de la noche fría

y suavemente

la eché sobre las aguas.

 

Y no me sorprendió

que se alejara

como un pez insoluble

moviendo

en la noche del río

su cuerpo de diamante.”

 

¿Qué decir ante la magnitud de las letras del escritor?

La poesía acompaña y se complementa con el dolor generado por la más terrible de las ausencias.

Es necesario me ayudes a partir.

Sola no es posible cuando he sido secuestrada sin conocer el motivo.

¿Amar a un hijo por sobre todo, es motivo de semejante castigo?

Densos celajes cubren el firmamento, es posible el cielo comience a acompañar el llanto incontenible de esta madre que no sabe vivir sin el ser que más ama en el mundo.

Poco tengo que hacer en suelo terrenal.

Es una carga imposible de llevar.

Con mi hijo amado todo era llevadero.

Nunca entendí los crueles designios del destino, al señalarlo para que otro se lo llevara de forma prematura.

En silencio para no perturbar tu sueño eterno, quiero estar a tu lado.

Seré custodia permanente de ese sueño,

Ignoro si despertarás cuando llegue.

Me conforma sostener tu mano.

Nadie osará impedirme bese tus mejillas.

En suelo terreno nada debo hacer.

A tu cielo, llevaré la fragancia de las flores más bellas.

De tu cama prendería  estrellas con el propósito iluminen tus sueños.

Es necesario mantengas tus recuerdos intactos.

Única manera para que puedas reconocerme al llegar.

¿Despertarás cuando ello ocurra?

Precisamos conversa de los temas cotidianos que convocaban tu risa.

Te amo querido mío.

Busco acotar mi permanencia en la tierra sin vulnerar tu memoria, hasta el momento no la he encontrado.

Te pido paciencia.

Creo estar más cerca.

Tesoro de mi alma, como cada mañana te pido, nunca olvides cuanto te quiere mamá.

 

 

https://www.youtube.com/watch?v=rEJIjbm0m0M