Bueno días hijo
amado.
Te saludo en otra mañana primaveral, con excesiva niebla.
Con el correr de las horas se disipará, así podrán admirarse los dorados destellos del sol.
Ayer por la tarde, concurrí al vivero cercano a mi refugio.
Han entrado variedad de plantas con flores.
Quedé impactada por una de flores grises y algunas doradas.
Mi intención era adquirirla.
El dueño del local sugirió espere a los primeros días de
septiembre cuando el tiempo se normalice, para que no sufra los cambios de
temperatura, que nos sorprenden por su calidez, poco habitual en pleno
invierno, quien parece haberse tomado licencia, ignorando cuándo volverá.
Tomé varias fotos, una de ellas es la imagen que antecede
este contacto que nos mantiene más
unidos que nunca.
Encontrar flores grises en nuestro territorio.
En ese instante supe que son importadas de centro américa
donde la temperatura, inclusive en invierno, no posee cambios rigurosos, por lo
tanto esperaré, el tiempo adecuado.
Esa especie tiene una particularidad, las flores grises son
perennes, las doradas duran bastante tiempo, aún cuando la floración es
diferente, pese a pertenecer a la misma planta.
Originalidades de la naturaleza.
En este caso especial por la floración exótica.
Arbitraré los medios necesarios para traerla pronto a mi
refugio donde tiene un espacio exclusivo para mostrar su hermosura.
Apenas la divisé, pensé en vos a quien le gustaban las
plantas pero sin cortar las flores de las mismas.
Prometo no cortar
ninguna, esperando puedas verlas desde la estrella donde se encuentra tu
hábitat.
¿Por qué no puedo hallarte en las noches cuando el cielo
está despejado?
Solo espero que puedas ver a mamá.
Deseo con ansias llegar a vos para contarte de la inmensidad
de mi amor, renovado a diario por la empatía, que siempre existió entre
nosotros.
Continúo con la necesidad imperiosa de darte un beso.
¿Cuándo aparecerás en mis sueños?
Es la única manera de cristalizar este deseo, capaz de quitarme la sensación de ansiedad, al observar que uno
a uno te los vas llevando.
El cofre que los contiene está repleto.
¡No los dejes marchitar!
Para la fecha seleccioné, letras de autores, mencionando,
las flores en general.
Las dejo aquí para compartirlas con mi maravilloso ser de
luz.
“Flores secas
Autor: Manuel Reina
No extrañéis que conserve, cual tesoro,
esas pálidas flores;
sus hojas son las páginas de oro
de una historia de amores.
Esas páginas traen a mi memoria
la ventura perdida;
el tiempo del placer y de la gloria,
mañana de la vida.
El fuego en tu corola ya no arde,
despedazada rosa;
lindo adorno tú fuiste, cierta tarde,
del pecho de una hermosa
Este mustio clavel, bella Dolores,
borró nuestros enojos;
aún me parece ver, en sus colores,
los de tus labios rojos.
Esos nardos, con pétalos brillantes,
Adelina hechicera,
bañaron, en aromas penetrantes
tu blonda cabellera.
Amelia regalome esta camelia
con lúbrico embeleso,
dando a la flor la encantadora Amelia
un encendido beso.
Tus pétalos de plata, raso y oro,
marchitada azucena,
aún parecen regados por el lloro
de la dulce Filena.
Las flores están ya tristes y yertas;
sus hojas, en jirones;
todo pasó; las flores están muertas
como mis ilusiones”.
Tesoro de mi existencia, tenemos conversaciones pendientes.
¿Cómo hacer para retomarlas?
Han pasado episodios que fueron resolviéndose de manera
positiva.
Espero con el alma, el último que surgió, siga el mismo
camino que el anterior.
Tengo la certeza que así será, no solo por confiar en ellas,
sino porque intuyo brindarás tu ayuda desde la inmensidad del universo que nos
separa.
Siempre me pregunto por qué nos acechó la fatalidad.
No encuentro explicación satisfactoria, para ese evento tan
cruel.
Te necesito hijo querido.
Sos el único capaz de calmar mi ansiedad.
Nada alcanza para alejar la silente soledad.
Unos minutos mirándote me brindarían la posibilidad de
estrecharte en un abrazo.
Regalarte las caricias que te han faltado en estos casi
siete años.
Cronos sigue avanzando sin hacer ningún esfuerzo para
ayudarme a concretar mi más grande utopía.
¿No sabe no quiero habitar suelo terreno?
¿Por qué me castigan con semejante cautiverio?
Hasta el momento, nunca recibí una respuesta adecuada y
sobre todo argumentada.
¿No existen fundamentos para la tragedia?
Tal vez sea un ser caprichoso a quien no le agrada ser
interrogado.
Comprendo es una deidad. Debería entender que soy una mamá
que ama y extraña a su hijo.
No quiero como respuesta,
“No eres la única”
Lo sé.
También pregunto por ellas, sumidas en el mismo dolor.
Quizás callen para evitar represalias.
De mi parte nada debo, nada temo y menos a quien desde las
sombras digita el tiempo de vida de cada terrenal.
Hijo de mi corazón, como es usual en estos enlaces mágicos,
he de reiterar mi petición, hijito lindo, por favor nunca olvides cuanto te
quiere,
Mamá.
https://www.youtube.com/watch?v=SDIYuPcErRM
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